El suculento negocio de la comida chatarra en M¨¦xico
M¨¦xico es el primer vendedor de comida preparada de Am¨¦rica Latina y el segundo pa¨ªs con m¨¢s obesidad del mundo
La comida est¨¢ enraizada en lo m¨¢s profundo de la identidad mexicana. Tanto, que el ma¨ªz aparece en el centro de las explicaciones mitol¨®gicas mayas sobre el origen del hombre. El cultivo de la milpa, la sagrada trinidad formada por el ma¨ªz, el frijol y el chile, es la base ancestral de una pir¨¢mide alimenticia saludable y nutritiva. Sin embargo, M¨¦xico se sit¨²a en los primeros puestos en las listas de obesidad y muertes por diabetes. La comida chatarra, alimentos prefabricados que rebosan grasa, az¨²car, sal y componentes qu¨ªmicos, ha ido desplazando en los ¨²ltimos a?os a los cereales, las legumbres o las verduras frescas. El Gobierno est¨¢ intentando cambiar los h¨¢bitos alimenticos desde campa?as informativas al arma disuasoria de los impuestos. Pero se enfrenta a un duro contrincante, la industria de alimentos procesados.
M¨¦xico es una de las 10 potencias mundiales en comida preparada. Es el primer productor de Latinoam¨¦rica, por encima de Brasil, la mayor econom¨ªa la regi¨®n, seg¨²n un reciente informe del centro de estudios Global Research. El sector en M¨¦xico se embols¨® unos beneficios de 28.300 millones de d¨®lares en 2012, doblando la cifra de sus hom¨®logos cariocas. Como causa primera de este vigoroso m¨²sculo industrial, el estudio apunta al Tratado de Libre Comercio firmado entre EE UU y M¨¦xico en 1994.
Dos terceras partes de la inversi¨®n extranjera directa en agricultura y alimentaci¨®n vinieron de EE UU durante la primera d¨¦cada del acuerdo, siendo la industria de comida prefabricada el principal destino. Pepsi, Nestl¨¦, Unilever o Danone engordaron sus posiciones en el pa¨ªs y los beneficios del sector crecieron a una tasa del 10%, seg¨²n los datos de Goblal Research. ConM¨¦xico, la asociaci¨®n que representa a las principales empresas ¨CCoca Cola, Nestl¨¦, Bimbo¨C declin¨® hacer declaraciones para este reportaje.
Los abarrotes y las tiendas 24 horas son los grandes surtidos de comida preparada
M¨¦xico es el segundo pa¨ªs del mundo con m¨¢s personas obesas ¨Csolo por detr¨¢s de EE UU¨C y ocupa el sexto lugar en muertes causadas por diabetes. El Gobierno implement¨® el a?o pasado un impuesto especial para gravar alimentos hipercal¨®ricos y refrescos azucarados. Y esta misma semana estrech¨® el c¨ªrculo de la comida preparada?¨Cs¨¢ndwiches, hamburguesas, burritos o sopas instant¨¢neas¨C con una subida del IVA. El objetivo es desalentar su consumo, que cay¨® un 6% el a?o pasado.
¡°La realidad es que los mexicanos dejaron de gastar en productos de cuidado personal para comprar alimentos impactados por estos nuevos impuestos¡±, reza un estudio de la encuestadora Kantar WorldPanel. Revela?tambi¨¦n que la comida basura represent¨® el 30% del gasto de una familia mexicana durante 2014 y concreta que los lugares donde m¨¢s se venden este tipo de productos son las peque?as tiendas de ultramarinos o abarrotes, y los consumidores m¨¢s afectados los de niveles econ¨®micos medio y bajo.
Hay m¨¢s de 400.000 de estas tiendas en M¨¦xico. Seg¨²n el informe de Global Research la industria ha colonizado los abarrotes. Alrededor del 90% de las ventas de Pepsi y de Coca Cola provinieron de estas tiendas durante la pasada d¨¦cada. Estos grandes grupos surten adem¨¢s toda una gama de productos chatarra. Pepsi, por ejemplo, tambi¨¦n distribuye golosinas y aperitivos salados. El siguiente escal¨®n que dibuja el informe son las tiendas 24 horas, que est¨¢n a su vez sustituyendo a los abarrotes.
Oxxo es uno de estos establecimientos, muy populares en M¨¦xico. Su modelo simboliza la tendencia a la integraci¨®n vertical y la acaparaci¨®n del mercado que advierte el estudio. Es propiedad del Grupo Femsa, que a su vez distribuye a Coca-Cola en el pa¨ªs. Sus tiendas se multiplicaron un 300% en las ¨²ltimos dos d¨¦cadas. La cadena tiene 12.853 puntos de venta y aspira alcanzar los 14.000 durante este a?o.
Publicidad azucarada
La influencia de la industria en la publicidad es otra de las cr¨ªticas de las asociaciones de consumidores. Consideran que los planes p¨²blicos para la prevenci¨®n de la obesidad son incapaces de regular a la industria de comida chatarra en los anuncios y en el etiquetad de los productos.
"Las normas sobre publicidad han sido dise?adas por la propia industria. El etiquetado que no se entiende e induce al consumo de altas cantidades de az¨²car, en vez de desincentivarlo", defiende Alejandro Calvillo, director de Poder del Consumidor. En M¨¦xico se permite la publicidad de cualquier cereal que tenga hasta 30 gramos de az¨²car por cada 100 gramos alimento. Sin embargo, este porcentaje es seis veces m¨¢s alto que lo recomendado por los est¨¢ndares internacionales marcados, entre otros, por la Organizaci¨®n Panamericana de la Salud, dependiente de Naciones Unidas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.