¡°Es m¨¢s f¨¢cil crear ¡®startups¡¯ en Europa que en Silicon Valley¡±

La primera vez que Le Monde cit¨® en sus p¨¢ginas a Xavier Niel le catalog¨® como "joven pirata inform¨¢tico". Hoy, con 48 a?os, es copropietario del peri¨®dico y la novena fortuna de Francia.Empresario fuera de norma, sin estudios superiores y de sonrisa permanente, destaca por su capacidad para hacer dinero y hacerlo ganar a los dem¨¢s. En 1999 lanz¨® Free (Grupo Iliad), que hoy es el tercer operador de telefon¨ªa e internet de Francia. Es su director general delegado, administrador y presidente. En esta entrevista, realizada en la sede central de Free en Par¨ªs, Niel se niega a hablar de los planes para controlar Telecom Italia, pero defiende Francia y Europa como lugares propicios para el emprendimiento, y da pistas sobre el secreto de su ¨¦xito.

Pregunta. Usted introdujo Free en el mercado franc¨¦s de las telecomunicaciones rompiendo los precios y ofreciendo la Freebox, que canaliza el tel¨¦fono, internet y la televisi¨®n...

Respuesta. Son nuestras dos ideas fundamentales: ser innovadores y baratos al mismo tiempo. Podemos hacerlo por nuestro modo de trabajar. En Free la gente es directamente responsable de lo que hace, estamos organizados en equipos muy peque?os y todo est¨¢ internalizado. La totalidad de nuestro software se desarrolla aqu¨ª.

P. ?Todav¨ªa hay margen para seguir reduciendo precios?

R. Por supuesto. Le pongo un ejemplo: hace dos meses que integramos el roaming en Europa ilimitado para nuestros clientes con un abono de veinte euros. Nos adelantamos a la competencia negociando con los operadores de otros pa¨ªses, lo que no fue f¨¢cil. Les ofrec¨ªamos m¨¢s tr¨¢fico e hicimos un modelo matem¨¢tico para poder integrar esta innovaci¨®n en nuestra oferta. S¨ª, quiz¨¢ a corto plazo perdemos dinero, pero a cambio logramos m¨¢s abonados.

P. Los Gobiernos, como el franc¨¦s, est¨¢n apoyando la digitalizaci¨®n de la econom¨ªa. ?No estamos idealizando las nuevas tecnolog¨ªas?

R. El internet de hoy es la electricidad de mis abuelos. En todas las ¨¦pocas hay tremendos cambios. La gran ventaja de las nuevas tecnolog¨ªas de hoy es que no requieren mucho dinero. Google, Facebook o cualquier otro sitio web es producto de j¨®venes sin dinero capaces de hacer esa innovaci¨®n en su casa. Cuando nuestros abuelos quer¨ªan innovar ten¨ªan que construir una f¨¢brica y, por tanto, deb¨ªan formar parte de una familia rica. Hoy, gracias a la facilidad con la que se puede innovar, se redistribuye la riqueza. Ya no estamos en un capitalismo de herencia.

P. Y sin embargo vamos hacia un mundo m¨¢s desigual.

R. No estoy seguro de eso. Creo que en todas partes hay ahora iniciativas que permiten avanzar sin tener en cuenta de d¨®nde viene cada uno. En la escuela 42 [una iniciativa gratuita de Niel para formar a 1.000 desarrolladores cada a?o] no se piden diplomas ni se pregunta de d¨®nde viene uno. Solo se les pide tener l¨®gica y ganas de trabajar, y resulta que ah¨ª se fabrican los mejores t¨¦cnicos del mundo. Es la misma idea con la que apoyo a las startups.

P. ?Cu¨¢l es la ventaja para una gran empresa de apoyar a las startups?

R. No hay una gran sociedad detr¨¢s. El apoyo a Escuela 42 y las mil startups de la Halle Freyssinet es personal. Solo me mueve la voluntad de ayudar a mi pa¨ªs, que es el que me ha permitido ganarme muy bien la vida y hacer un mont¨®n de cosas interesantes. Este pa¨ªs es fant¨¢stico. Lo adoro.

P. ?Considera entonces que el ecosistema franc¨¦s, como el europeo, es suficientemente favorable para hacer negocios e innovar?

R. Aqu¨ª hay much¨ªsima innovaci¨®n. Mire, por ejemplo, [la aplicaci¨®n musical sueca] Spotify. Somos capaces de crear cosas importantes en Europa, pero necesitamos m¨¢s ejemplos; que los j¨®venes vean que es posible y que tengan el deseo de intentarlo. Y necesitamos infraestructuras para facilitar su desarrollo. Es verdad que no tenemos un Silicon Valley, pero no creo que sea un buen ejemplo. Es m¨¢s f¨¢cil crear una startup en Espa?a o en Francia que en Silicon Valley. Todo es menos competitivo y hay m¨¢s respeto por lo que hacen los dem¨¢s.

¡°Invierto en prensa porque me interesa mantenerla lo m¨¢s libre posible¡±

P. ?Por qu¨¦ arriesgar dinero invirtiendo en prensa, un sector que est¨¢ en crisis?

R. Me interesa mantener una prensa lo m¨¢s libre posible. En el caso del grupo Le Monde, los nuevos accionistas no quer¨ªamos tomar el control editorial, sino aplicar m¨¦todos profesionales de gesti¨®n y crear nuevos productos. Hoy hay cabeceras que se venden mejor que hace un a?o, como T¨¦l¨¦rama y Courrier International. Hemos creado nuevos productos digitales que han logrado que la web de Le Monde en Francia sea la primera en informaci¨®n. La crisis no es ineluctable. Si eres capaz de reunir la inteligencia, el an¨¢lisis y una verdadera informaci¨®n que los otros no tienen, la gente estar¨¢ dispuesta a pagar esa informaci¨®n. La ecuaci¨®n es ofrecer algo que no se puede encontrar gratis en internet. Le Monde perd¨ªa 15 millones al a?o. Este ejercicio tendr¨¢ 3 ¨® 4 millones de beneficio y espero que el pr¨®ximo a?o supere los diez millones.

P. El entorno digital ha amenazado a la prensa en este periodo de transici¨®n.

R. No creo que lo digital amenace a la prensa. La inteligencia es muy cara de producir en papel porque hay que imprimir y distribuir. En lo digital, esa producci¨®n es m¨¢s barata y llega a m¨¢s gente. Si somos capaces de mantener el nivel de inteligencia entonces lo digital es una oportunidad. De hecho, para Le Monde la parte m¨¢s rentable es la digital. Nosotros hemos aumentado el n¨²mero de periodistas en contra de la tendencia general porque estamos en otro c¨ªrculo: m¨¢s calidad y, en consecuencia, m¨¢s ventas. Es una receta que vale para todo tipo de productos.