¡®Big data¡¯ un siglo despu¨¦s de los rayos X

En verano de 2003, el hospital de La Paz, en Madrid, instal¨® el primer PET-TAC ¡ªun equipo avanzado que combina las im¨¢genes radiol¨®gicas del TAC, o tomograf¨ªa axial computarizada, con las de medicina nuclear del PET, o tomograf¨ªa por emisi¨®n de positrones, en una sola exploraci¨®n¡ª de la sanidad p¨²blica espa?ola. Apenas tres a?os despu¨¦s de que la revista Time lo considerara el mejor invento m¨¦dico del a?o 2000, llegaba un aparato casi infalible a la hora de detectar tumores y muy eficaz para evaluar la eficacia de los tratamientos. Alta tecnolog¨ªa que revolucion¨® la pr¨¢ctica m¨¦dica, pero tambi¨¦n los presupuestos de los gestores hospitalarios: aquel primer equipo cost¨® tres millones de euros (de una partida para inversiones de 5,4).

El diagn¨®stico por imagen es una de las principales inversiones de cualquier centro sanitario. Y, como tantas otras partidas, se resiente en situaciones de crisis. Este mercado, que mueve entre 24.000 y 30.000 millones de d¨®lares anuales, seg¨²n c¨¢lculos de distintas consultoras, se ha estancado en regiones como el sur de Europa, pero los expertos pronostican que ser¨¢ uno de los que m¨¢s r¨¢pido crezca de todo el sector sanitario. India, Am¨¦rica Latina, Rusia y China est¨¢n construyendo y equipando nuevos hospitales a medida que sus econom¨ªas progresan. Y all¨ª han puesto el foco los grandes fabricantes, aseguran los analistas de Frost & Sullivan.

Los tres gigantes del diagn¨®stico por imagen ¡ªSiemens, General Electric y Philips¡ª se reparten casi el 80% de la cuota de mercado mundial. Hasta ahora, su objetivo estaba bien definido: EE UU, con el 25% de las ventas mundiales; Europa, con el 19%, y Jap¨®n (17%). Pero las tornas est¨¢n cambiando y la pujanza de los sistemas sanitarios de la India y China espolean la demanda de estos equipos. Solo en India se espera que las ventas se doblen en 2017. Tecnolog¨ªas asequibles, menos invasivas, de uso m¨¢s sencillo y que requieran menos mantenimiento triunfar¨¢n en este nuevo escenario.

Adem¨¢s de cuestiones como la mejora de la resoluci¨®n y la eficiencia de los equipos, Magda Rosenm?ller, profesora asociada del IESE, menciona otras tendencias de futuro del sector relacionadas con las restricciones de gasto. ¡°Philips por ejemplo trabaja recogiendo equipos de imagen antiguos que revisa, renueva y repone, de forma que son m¨¢s accesibles para instituciones sanitarias o regiones bajo la presi¨®n de los recortes presupuestarios¡±, explica. ¡°Otra opci¨®n es vender el servicio de diagn¨®stico por imagen por 10 a?os, pagando una cantidad anual. As¨ª no se tiene que invertir y todos los gastos del equipo y el mantenimiento est¨¢n cubiertos. Es un sistema interesante, pero no exento de cr¨ªticas porque reduce la flexibilidad¡±, a?ade.

Fabricantes chinos empiezan a competir contra Philips o General Electric

Las grandes compa?¨ªas de tecnolog¨ªa m¨¦dica a¨²n no temen la competencia de la floreciente industria china, que con l¨ªderes como Mindray o Wandong empiezan a hacerse hueco en el mercado interno y tambi¨¦n en la exportaci¨®n. ¡°A¨²n no son una amenaza para el segmento de calidad alta¡±, se?ala Rosenm?ller. Lo confirma Luis Campos, presidente de GE Healthcare Espa?a: ¡°Aqu¨ª solo se ven en radiolog¨ªa b¨¢sica y ultrasonidos, no en alta tecnolog¨ªa, y su presencia por ahora es peque?a¡±.

Los equipos de imagen h¨ªbridos ¡ªcomo el PET/MR, que combina un PET con una resonancia magn¨¦tica y ofrece grandes posibilidades en oncolog¨ªa, neurolog¨ªa y cardiolog¨ªa¡ª y la aplicaci¨®n de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y el big data al diagn¨®stico y tratamiento centraron el inter¨¦s de la ¨²ltima gran cita de la radiolog¨ªa mundial, el congreso de la Sociedad Radiol¨®gica de Norteam¨¦rica (RSNA) celebrado la semana pasada en Chicago. Tanto Siemens como GE presentaron sistemas que funcionan casi como redes sociales, que permiten compartir de forma segura una resonancia o un TAC desde cualquier hospital de cualquier lugar del mundo. Estos software permiten mejorar la eficiencia y compararse con el resto: d¨®nde se es m¨¢s productivo, controlar cu¨¢nta radiaci¨®n recibe cada paciente en cada prueba o qu¨¦ t¨¦cnico suministra mayores dosis. Es decir, prestaciones que van mucho m¨¢s all¨¢ de la venta de m¨¢quinas.

Campos apunta a otras tendencias, como la ¡°miniaturizaci¨®n de los equipos¡±, para hacerlos m¨¢s compactos, mejorar el confort del paciente (resonancias sin apenas ruido o mesas de rayos que permiten bajar la mesa a 30 cent¨ªmetros de suelo para que un paciente anciano pueda subir sin esfuerzo¡­), o el ¨¦nfasis en la reducci¨®n de dosis. Pero siempre con un ojo puesto en la mejora del coste efectividad. ¡°Siempre se busca que el gasto de inversi¨®n y operativo sea lo m¨¢s bajo posible¡±, subraya.