Los bufetes de abogados dan la voz de alarma

Uno de los term¨®metros que mejor miden el clima inversor de un pa¨ªs son los despachos de abogados, esos lugares donde se tramitan opas, fusiones y adquisiciones y todo tipo de operaciones mercantiles. Durante los a?os duros de la crisis cay¨® la temperatura a niveles inquietantes; aunque desde 2013 ha ido recuperando el calor. Iban llegando inversiones, realiz¨¢ndose transacciones y canalizando salidas a Bolsa. Era un s¨ªntoma claro de que la salida de la crisis empezaba a ser una realidad.

Sin embargo, en lo que va de a?o se ha comenzado a detectar una aton¨ªa peligrosa, que ha levantado la voz de alarma en los bufetes. En enero, la actividad, que se mide por el n¨²mero de encargos y las horas trabajadas facturables, ha disminuido entre el 8% y el 10% respecto al mismo mes del a?o anterior en el mejor de los casos, ya que en alguno el descenso llega hasta el 20%. El mercado de capitales se ha secado, no hay salidas a Bolsa en perspectiva, los fondos de inversi¨®n no anuncian operaciones grandes, no se producen peleas por la captaci¨®n del cliente. Ni la batalla de Abengoa ni la prevista entrada de Siemens en Gamesa ha animado el cotarro.

Seg¨²n fuentes del sector, no se sabe si se debe a la situaci¨®n pol¨ªtica nacional, a la incertidumbre generada a nivel mundial por el miedo a una tercera recesi¨®n o a ambas cosas a la vez. ¡°Habr¨¢ que esperar a los siguientes meses para constatar primero si la ca¨ªda ha continuado y aclarar de d¨®nde vienen los tiros¡±, dice una de esas fuentes.

La mezcla de las dos causas es lo m¨¢s probable, ya que tambi¨¦n en otros pa¨ªses del entorno europeo se ha producido un descenso. No obstante, el show celtib¨¦rico tiene una especial incidencia, por la inseguridad que ha generado el resultado electoral y la posterior incapacidad para formar Gobierno. Esta circunstancia est¨¢ frenando de manera palpable a los fondos de inversi¨®n y no digamos a los grupos que ten¨ªan previsto realizar alguna inversi¨®n.

Otra fuente atribuye el frenazo exclusivamente al contexto pol¨ªtico y, para ser m¨¢s concreto, a la angustia que engendra Podemos por sus pr¨¦dicas antisistema y su programa. Por eso, la posibilidad de entrar en una coalici¨®n en el Ejecutivo crea inquietud y desaz¨®n en las gradas. En ese sentido, esa fuente apunta, por ejemplo, que cada vez se exigen m¨¢s cautelas en los contratos, sobre todo los que se hacen con organismos que dependen de ayuntamientos regidos por este grupo o algunas de las coaliciones pr¨®ximas.

El frenazo, en todo caso, no es igual en todos los sectores. Algunos de los consultados sostienen que, pese a todo, hay inversores que encuentran la oportunidad de invertir en activos que no van a estar m¨¢s baratos. Ocurre con el sector inmobiliario, que parte de m¨¢s abajo que ning¨²n otro por el azote que sufri¨® en la crisis.

La aton¨ªa no se produce, sin embargo, en Latinoam¨¦rica, con excepci¨®n de Brasil, que s¨ª est¨¢ sufriendo el impacto de la crisis interna. El resto de pa¨ªses, donde los principales despachos espa?oles tienen presencia directa o indirecta a trav¨¦s de acuerdos comerciales con firmas nativas, la actividad se mantiene a buen ritmo.

La ca¨ªda cunde en el Gobierno en funciones. ¡°Afortunadamente, las inversiones comprometidas en sectores como el de la construcci¨®n de autom¨®viles (en concreto, los grupos PSA, Renault y VW) y otras inversiones se mantienen y no han dado marcha atr¨¢s¡±, sostiene una fuente del Gobierno mientras ratifica la preocupaci¨®n que ha supuesto este inesperado impasse.

La crisis ha supuesto un cambio radical en estos despachos. Antes, los profesionales estaban acostumbrados a que llamasen a su puerta. Ahora est¨¢n obligados a salir a buscar negocio y a adquirir conocimientos de gesti¨®n, lo que hace que a los despachos se les catalogue m¨¢s como empresas de servicios jur¨ªdicos que como despachos de abogados y tener un perfil de gestor. Asimismo, se ha producido reducci¨®n de minutas y cambios en la facturaci¨®n, de manera que se establecen honorarios cerrados en lugar de contabilizar las horas facturables.

El sector legal cambi¨® la tendencia en 2013 y en 2014 creci¨® un 4%, recuperando el ritmo de cinco a?os antes. Pero todav¨ªa quedaba lejos del doble d¨ªgito de antes de la crisis. Entre los grandes despachos espa?oles (Garrigues, Cuatrecasas, Ur¨ªa y Men¨¦ndez, G¨®mez-Acebo & Pombo y P¨¦rez Llorca) se incrustan internacionales (Clifford Chance, Baker &McKenzie, Linklaters, Hogan Lovells...) y las divisiones legales de las cuatro grandes auditoras (PwC, KPMG, Deloitte y EY).