CaixaBank podr¨¢ lanzar la opa sobre BPI sin el l¨ªmite del derecho de voto

El Ministerio portugu¨¦s de Finanzas ya ha enviado a los bancos afectados y a la CMVM una reforma legal para que el l¨ªmite de los derechos de votos en las empresas desaparezca en caso de que se lance una Oferta P¨²blica de Acciones (opa) sobre el 75% del capital. Esa reforma beneficia las intenciones de CaixaBank en el banco BPI, que a principios de 2015 lanz¨® una opa con la condici¨®n previa de que los estatutos del banco eliminaran la limitaci¨®n al 20% de los derechos de votos, independientemente del peso accionarial. El banco espa?ol no consigui¨® los dos tercios de los votos y desisti¨® de presentar la opa.

CaixaBank tiene el 44% de BPI, frente el 18,5% de Santoro (sociedad de la angole?a Isabel dos Santos), pero ambos con los mismos derechos de voto, un 20%; Allianz tiene el 8,4% ¡ªsuele posicionarse a favor de CaixaBank¡ª, la familia portuguesa Violas un 2,7% y BIC, banco tambi¨¦n propiedad de Isabel dos Santos, otro 2%.

Seg¨²n uno de los autores del texto gubernamental, el objetivo no es acabar con la limitaci¨®n de los derechos de votos en todas las empresas porque se considera un mecanismo ¨²til para proteger al peque?o accionista, pero s¨ª que pretende eliminarlo cuando impida tomar decisiones estrat¨¦gicas.

El caso m¨¢s importante desde hace unos a?os es el de BPI, por los diferentes intereses de CaixaBank e Isabel dos Santos, aunque tambi¨¦n afectar¨¢ a los estatutos del segundo banco del pa¨ªs, el BCP. All¨ª el mayor accionista es Sonangol (18,5%), la empresa petrol¨ªfera de Angola y, por tanto, bajo la total influencia de la familia Dos Santos, seguido de Sabadell (5%) y la el¨¦ctrica EDP (2,5%). Precisamente Sonangol emiti¨® el mi¨¦rcoles un comunicado advirtiendo de que hay que tener cuidado al legislar, lo que fue interpretado como una velada amenaza del Gobierno de Angola.

Primero, la v¨ªa diplom¨¢tica

Aunque se esperaba que el Consejo de Ministros del jueves aprobara ya esta reforma legislativa, el primer ministro Ant¨®nio Costa prefiere agotar la v¨ªa diplom¨¢tica; aunque sea bajo presi¨®n, prefiere un acuerdo entre el banco espa?ol y la empresaria angole?a, antes de que haya una obligaci¨®n legal.

El acuerdo o la aprobaci¨®n del cambio legislativa es contrarreloj. El 10 de abril acaba el plazo para que el BPI reduzca su riesgo en Angola, donde posee la mayor¨ªa del BFA ¡ªde donde procede la mitad de sus beneficios¡ª, o para que cubra el 100% de todo su riesgo bancario en aquel pa¨ªs. En caso contrario, el BCE sancionar¨¢ al BPI con una multa diaria que podr¨ªa llegar hasta los 162.000 euros diarios, en un a?o la cuarta parte de sus beneficios.