M¨¢s vacas cerca de las ciudades y una industria l¨¢ctea m¨¢s poderosa

El sector l¨¢cteo est¨¢ en viviendo una revoluci¨®n sin precedentes a ra¨ªz del fin de las cuotas de producci¨®n que estuvieron en vigor desde finales de los ochenta hasta abril de 2015. Con la liberalizaci¨®n, la industria ha acabado por tener a¨²n m¨¢s la sart¨¦n por el mando y el ganadero ha perdido casi toda su fuerza como cabeza de la actividad de producci¨®n.

Incluso desde antes del fin de las cuotas, los fabricantes de l¨¢cteos y derivados contaban con una posici¨®n casi de dominio ante un sector desorganizado y con un producto perecedero. Dispon¨ªan, por ejemplo, de la capacidad para imponer o pactar precios o rutas de recogida, y la ejerc¨ªan a pesar de la vigilancia y las multas de las autoridades de Competencia. Hoy, sin cuotas, ya no dependen de esos ganaderos en unos determinados territorios y tienen m¨¢s libertad para decidir d¨®nde adquieren la leche que necesitan en funci¨®n de sus intereses y los de la gran distribuci¨®n. Se est¨¢ dibujando un nuevo escenario que reconfigurar¨¢ el sector, desde el n¨²mero de ganaderos hasta los tipos de explotaci¨®n y ubicaci¨®n de las mismas.

M¨¢s producci¨®n

Un primer efecto de la eliminaci¨®n de las cuotas ha sido el incremento de los niveles de producci¨®n en Espa?a por encima del 6% de media (unos siete millones de toneladas). El aumento de la oferta en Espa?a y en toda la Uni¨®n Europea, junto con un desajuste de las previsiones de consumo frente a la demanda real, provoc¨® a su vez una ca¨ªda generalizada de los precios superior al 20% de media.

El hundimiento de las cotizaci¨®n de la leche ech¨® por tierra todas las expectativas de la UE de un aterrizaje suave en el cambio de un modelo regulado a libre, lo que oblig¨® a Bruselas a finales del pasado a?o a poner a disposici¨®n del sector una aportaci¨®n extraordinaria de 420 millones de euros (25 millones para Espa?a) para paliar la crisis. A esta cifra se sumaron otras ayudas directas del Ministerio de Agricultura por valor de 20 millones. Sin embargo, ante la persistencia del problema, Bruselas ya trabaja en la puesta en marcha de una pol¨ªtica de abandono voluntario de la producci¨®n, cuyo mecanismo est¨¢ por decidir, junto a otras medidas, como duplicar hasta 218.00 y 100.000 toneladas el volumen de compras p¨²blicas de leche en polvo y de mantequilla, respectivamente, adem¨¢s de fondos para promoci¨®n y exportaciones.

Deslocalizaci¨®n de la producci¨®n

Un segundo efecto que est¨¢ provocando la supresi¨®n de las cuotas es la deslocalizaci¨®n de la producci¨®n de leche desde muchas ¨¢reas tradicionalmente productoras del norte de Espa?a, especialmente de Galicia, hacia las explotaciones ubicadas en zonas m¨¢s cercanas a los grandes puntos consumo, a las plantas industriales o a las plataformas de la gran distribuci¨®n, donde se ahorran costes de transporte y log¨ªstica. En 2015, seg¨²n el Fondo Espa?ol de Garant¨ªa Agraria y el sindicato agrario COAG, la producci¨®n aument¨® muy por encima del crecimiento medio anual (7,1%) en Andaluc¨ªa, Castilla-La Mancha, Navarra, Comunidad Valenciana, Madrid, Murcia, Catalu?a y Baleares. Por el contrario, fue inferior en Galicia, Pa¨ªs Vasco, Cantabria, Castilla y Le¨®n y Asturias. Este fen¨®meno se est¨¢ comenzando a ver en la cuota de participaci¨®n de cada territorio en la producci¨®n nacional, donde Galicia lleg¨® a contabilizar m¨¢s del 40%, Castilla y Le¨®n (13%), Catalu?a (11%), Asturias (8%) Cantabria (7%). Estos porcentajes han experimentado ya los primeros ajustes en esas zonas productoras. Galicia, por ejemplo, ya est¨¢ en el 37% y la tendencia es que siga bajando.

Menos granjas, m¨¢s concentraci¨®n

Un tercer efecto de la eliminaci¨®n de las cuotas se refleja en el modelo de explotaci¨®n, donde se prev¨¦ que habr¨¢ un aumento de la producci¨®n con menos granjas. Aunque el descenso de explotaciones ha sido constante en las ¨²ltimas d¨¦cadas, con la supresi¨®n de las cuotas se ha intensificado el proceso. En el ¨²ltimo a?o se ha pasado de 17.000 a 16.325 explotaciones. De ese n¨²mero, en Galicia se pas¨® de 9.606 a 9.079. Tambi¨¦n ha descendido el n¨²mero en otras Comunidades Aut¨®nomas como Cantabria, Asturias y Castilla y Le¨®n, mientras que en el resto de Espa?a la cifra pr¨¢cticamente se ha mantenido estable o han aumentado ligeramente el n¨²mero de animales para producci¨®n.

Desde la industria transformadora representada por la Federaci¨®n de Industrias L¨¢cteas, no se cree que la supresi¨®n de las cuotas vaya a provocar un cambio radical en la ubicaci¨®n de las producciones. Tampoco lo cree Rom¨¢n Santalla, portavoz de Uni¨®ns Agrarias, quien espera que la industria busque tener mucha estabilidad en el aprovisionamiento de leche, por lo que no se arriesgar¨¢ a depender en exceso de estas granjas-factor¨ªa pr¨®ximas a las plantas.

Cambio estrat¨¦gico

Los productores recuerdan que durante a?os la industria argument¨® que las cuotas imped¨ªan un mayor crecimiento del negocio y que ahora que la producci¨®n est¨¢ liberalizada, esas mismas compa?¨ªas alegan que hay un excedente de oferta y que es imposible comercializar toda la leche que se produce. Esta situaci¨®n pone en evidencia la existencia de una industria dedicada simplemente a envasar e incapaz de dar una salida a la leche a trav¨¦s de productos transformados. Es un sector que se halla encadenado a un mercado de leche l¨ªquida donde la demanda dom¨¦stica ha ca¨ªdo en poco m¨¢s de una d¨¦cada de cuatro a 3,3 millones de toneladas.

Espa?a vive como el resto de los Estados de la UE los problemas derivados de los precios, as¨ª como el comportamiento de la producci¨®n. Sin embargo, en la actual situaci¨®n de excedente de oferta, bajos precios y falta de medidas para paliar la crisis, existe el riesgo de que los pa¨ªses m¨¢s fuertes y con menores costes de producci¨®n como son los del norte y centro de Europa aguanten mejor la tormenta y pongan fuera del mercado a miles de productores de los pa¨ªses del sur.