Gu¨ªa para entender las etiquetas (4): datos ocultos y mensajes enga?osos

Ocultaci¨®n de datos, letras casi invisibles, falta de informaci¨®n, confusi¨®n, mensajes enga?osos, datos obligatorios inciertos y datos voluntarios sin contrastar. Estas son algunas de las cr¨ªticas que lanzan desde consumidores y productores agrarios contra el actual sistema de etiquetado, fundamentalmente de los productos alimenticios elaborados o preparados. De acuerdo con esta situaci¨®n, desde ambas partes se reclama a las Administraciones competentes, Agricultura y Sanidad, tanto la necesidad de nuevas exigencias en el etiquetado como unos mayores controles para eliminar de los lineales los productos que induzcan al enga?o a los consumidores.

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Desde la Confederaci¨®n Espa?ola de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios, CEACCU, seg¨²n los resultados obtenidos en un amplio estudio sobre el etiquetado de este tipo de productos, en el 80% de los casos analizados, la informaci¨®n obligatoria se relega a las partes menos visibles del envase, mientras en la partes prioritarias se colocan las informaciones voluntarias de menor importancia. Por ejemplo, si se presenta un zumo a base de concentrado, no tiene sentido que la palabra zumo se presente en unos caracteres muy superiores a la palabra concentrado. En esa misma l¨ªnea, se denuncia que haya una sobreabundancia de informaci¨®n secundaria a base de im¨¢genes, inconos, etc olvidando destacar lo importante para el consumidor.

Entre las carencias detectadas en el etiquetado destaca la presentaci¨®n incompleta o deficiente de la denominaci¨®n del producto o el tama?o muy reducido de las letras en el 62% de los productos analizados. El marcado de las fechas de envasado o de caducidad de los productos tiene, en muchos casos, una dif¨ªcil lectura. En relaci¨®n con la informaci¨®n cualitativa, las irregularidades m¨¢s abundantes se concretan en destacar un ingrediente en el envase, pero no la lista completa de los mismos. En el sector de los productos l¨¢cteos, aunque la normativa no contempla la obligatoriedad de indicar los porcentajes de leche que se utiliza para elaborar un queso de mezcla, para las organizaciones agrarias Upa y Coag, se deber¨ªa conocer la parte que corresponde a vaca y qu¨¦ porcentaje tiene de oveja o cabra. Es algo a lo que se han resistido los industriales del ramo. En algunos envases de una de las firmas l¨ªder, Garc¨ªa Baquero, se ha llegado a indicar simplemente que el producto contiene m¨¢s leche de cabra y de oveja que de vaca.

En base a la normativa actualmente en vigor, no es obligatorio que figure en el envase en origen del producto, lo cual afecta muy especialmente a legumbres o envasados de hortalizas. Desde el sector agrario, todas las organizaciones agrarias, Asaja, Upa y Coag reclaman que sea obligatorio que figurase en lugar destacado el origen del producto para no confundir con el lugar de su envasado. Esa misma demanda la mantiene el sector especialmente para la miel donde la normativa espa?ola, a diferencia de lo que sucede en Italia, se?alan desde Coag, no obliga a poner en el envase el origen concreto, sino solo se?alar que se trata de un producto comunitario, no comunitario o de mezcla. Hay envases donde ni siquiera figura esa referencia, lo cual permite que miel de importaci¨®n, fundamentalmente china, se comercialice masivamente en Espa?a en la gran distribuci¨®n, sin que el consumidor est¨¦ debidamente informado. En el caso de la leche, uno de los acuerdos suscritos en los ¨²ltimos tiempos entre el sector agrario y la Administraci¨®n fue la potenciaci¨®n de la oferta espa?ola figurando en el envase las siglas PLS (Producto L¨¢cteo Sostenible). Pascual, CLas o la marca Hacendado son algunas de las pocas empresas que lo cumplen. En el ovino, es f¨¢cil diferenciar un cordero neozeland¨¦s -mucho m¨¢s grande que el cordero espa?ol-, cosa que no sucede en la actualidad con el espa?ol el franc¨¦s.

En defensa de mantener la actividad agraria, el sector reclama solo m¨¢s transparencia e informaci¨®n en el etiquetado, y que elija el consumidor.