El crudo barato hunde las prospecciones a niveles de 1952

En 2015 la anglo-holandesa Shell vendi¨® m¨¢s petr¨®leo del que era capaz de reemplazar en sus almacenes. Se qued¨® con un d¨¦ficit del 20%, el peor resultado en al menos una d¨¦cada. Hace poco menos de 10 a?os, cuando el barril de brent ¡ªla referencia europea¡ª lleg¨® a costar m¨¢s de 140 d¨®lares, la reducci¨®n de las reservas de una gran compa?¨ªa hubiese desatado todas las alarmas. Pero en ¨¦poca de petr¨®leo barato (el pasado viernes el brent cotizaba a 38,67 d¨®lares), las compa?¨ªas est¨¢n cambiando su paradigma financiero. La prioridad es contener los gastos para hacer frente a los menores beneficios, aunque implique recortar en prospecciones: seg¨²n los datos de la consultora estadounidense IHS Energy, en 2015 se detectaron, con t¨¦cnicas convencionales, 12.600 millones de barriles equivalentes de petr¨®leo (BEP), el peor resultado desde 1952.

Shell no es la ¨²nica petrolera que experimenta esta ca¨ªda. El a?o pasado la tasa reposici¨®n de reservas de BP fue del 61% y la de ExxonMobil del 69%, los peores resultados en un lustro. Tambi¨¦n, Cepsa, la segunda compa?¨ªa espa?ola en este sector, registr¨® el a?o pasado unas p¨¦rdidas de 1.040 millones de euros, lo que implica, bajo las normas Internacionales de Informaci¨®n Financiera (NIIF), elevar un 136% sus n¨²meros rojos, seg¨²n inform¨® la propia petrolera.

Nuevo escenario

El escenario internacional ha cambiado. La sobreoferta que inunda de crudo el mercado mantiene los precios bajos, y las firmas tienen que adecuarse. ¡°Cuando los Estados miembros de la OPEP [el cartel de los pa¨ªses productores] actuaban como swing producers [calibraban la producci¨®n para equilibrar el mercado], la prioridad de los inversores en petroleras era vender crudo, y empujaban para que aumentasen las nuevas exploraciones. Pero hoy la OPEP no est¨¢ dispuesta a contrarrestar el desplome de los precios, por lo que los inversores buscan un estricto control financiero que permita pagar sus dividendos¡±, explica Henry Tchilinguirian, analista jefe de materias primas del banco BNP Paribas.

La consecuencia directa de este cambio de paradigma ha sido una oleada de recortes. Seg¨²n Bob Friklund, jefe de estrategia de IHS Energy, ¡°aunque parte de los capitales invertidos hace cinco a?os est¨¢n dando sus frutos ahora, el precio bajo no deja alternativas a las petroleras: a lo largo de 2015 las compa?¨ªas anunciaron la intenci¨®n de deshacerse de activos por un valor de 23.700 millones de euros¡±, apunta.

Los datos de otro banco, Morgan Stanley, certifican las consecuencias directas de esos recortes: el a?o pasado se aprobaron solo seis nuevos proyectos de exploraci¨®n de nuevos yacimientos.

Seg¨²n los c¨¢lculos de IHS, 2016 podr¨ªa ser otro a?o negro en este sentido: para no alterar el equilibrio entre el capital que gastan y los ingresos, las compa?¨ªas norteamericanas deber¨ªan ahorrar 21.000 millones de euros, el 50% de lo que invirtieron el a?o pasado.

Adem¨¢s, el hecho de que esas compa?¨ªas hayan conseguido asegurar en 2016 solo el 15% de su producci¨®n total las expone a¨²n m¨¢s a las fluctuaciones del mercado.

Leta Smith, directora de investigaci¨®n de IHS, a?ade que los yacimientos de mayor envergadura que se han descubierto en los ¨²ltimos meses son de gas, pero tampoco representan una soluci¨®n al problema: ¡°El gas es muy dif¨ªcil de comercializar y la demanda global es muy d¨¦bil¡±, aclara.