La patronal de bancos: ¡°El cliente debe acostumbrarse a pagar comisiones¡±
Rold¨¢n, presidente de la Asociacion Espa?ola de Banca (AEB), admite que la exigencia ¡°no ser¨¢ f¨¢cil ni pac¨ªfica¡±
La banca no tiene dudas sobre la necesidad de cobrar por sus servicios. Jos¨¦ Mar¨ªa Rold¨¢n, el presidente de la patronal, la Asociaci¨®n Espa?ola de Banca (AEB), cree que "el cliente tendr¨¢ que acostumbrarse a pagar de manera expl¨ªcita por aquellos servicios que antes pagaba de manera menos transparente, algo que no ser¨¢ f¨¢cil ni pac¨ªfico, como tampoco lo es en el ¨¢mbito de la prensa o de las creaciones intelectuales en cine, m¨²sica o literatura".
En su intervenci¨®n, Rold¨¢n insisti¨® en que "en la pr¨®xima d¨¦cada el cobro de los servicios prestados ser¨¢ la norma, por mucho que, de momento, las estrategias comerciales de atracci¨®n de clientes basadas en la gratuidad de las comisiones sigan formando parte de las herramientas de diferenciaci¨®n de algunas entidades que necesitan reforzar su atractivo en el corto plazo".
En su conferencia en el XXIII Encuentro del Sector Financiero, organizado por Deloitte, la Sociedad de Tasaci¨®n y ABC, aclar¨® que cuando lleguen estos cobros "se podr¨¢ comparar entre los distintos proveedores de servicios, probablemente no todos bancarios, y decidir cu¨¢l le ofrece mejor calidad al menor coste, como ocurre en tantos otros sectores: son la transparencia en las comisiones, la competencia y la libertad de contrataci¨®n los tres factores que garantizan siempre que el consumidor obtenga un resultado ¨®ptimo, esto es, un buen servicio al mejor precio posible".
Rold¨¢n ha suavizado este mensaje aclarando que, pese a lo que creen muchos clientes, antes tambi¨¦n hab¨ªa comisiones. En fechas anteriores, "bajo esa apariencia de gratuidad, se estaba cargando en m¨¢rgenes un sobreprecio que, de haberlo conocido, el cliente quiz¨¢s no lo hubiera aceptado. Adem¨¢s, se produc¨ªan subsidios cruzados entre clientes, a favor de los que requer¨ªan de m¨¢s servicios y en contra de aquellos con menores necesidades".
El m¨¢ximo responsable de la banca coment¨® que estas comisiones "no se evidenciaba de manera transparente" por lo que "se dificultaba la comparaci¨®n entre entidades y la evaluaci¨®n de la calidad de su servicio, limitando as¨ª la sana competencia. Por el contrario, un modelo de repercusi¨®n al cliente del coste de los servicios efectivamente prestados evita esos subsidios cruzados entre clientes, permite la comparaci¨®n entre entidades y favorece una competencia saludable, no solo entre entidades bancarias, sino entre estas y los nuevos operadores financieros".
En un sentido parecido se manifest¨® el director general de la CECA, Jos¨¦ Mar¨ªa M¨¦ndez, que afirm¨® que la ca¨ªda de m¨¢rgenes que afrontan las entidades se tiene que ¡°compensar¡± con ¡°m¨¢s y mejores servicios que se traduzcan en comisiones¡±. Este ejecutivo asumi¨® la previsi¨®n de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros (Funcas) que anticip¨® un recorte adicional del 10% en el n¨²mero de oficinas en los dos pr¨®ximos a?os y un ajuste de empleados del 7,5%. M¨¦ndez record¨® que el sector ha reducido un 32% las sucursales desde 2008. Los bancos procedentes de cajas han recortado en un 39% las oficinas y prescindido del 36% de los empleados.
?Supervisi¨®n m¨¢s minuciosa
Otro de los temas principales del discurso de Rold¨¢n, que fue director general de Regulaci¨®n del Banco de Espa?a, fue la supervisi¨®n. Y lanz¨® un claro mensaje de advertencia de uno de los "peligros" que vive el sistema. En su opini¨®n, el actual entorno de tipos "puede adem¨¢s llevar inherente, para algunos bancos con problemas en su modelo de negocio, la tentaci¨®n de una huida hacia adelante. Esto es, algunas entidades que se encuentren en esa situaci¨®n pueden sentirse tentadas a asumir riesgo de cr¨¦dito sin un adecuado control del mismo". Para controlar a estos bancos peligrosos,
Rold¨¢n cree que "la respuesta adecuada no debe ser aumentar las exigencias a todo el sector (mediante medidas macroprudenciales), sino emplear los instrumentos tradicionales de supervisi¨®n para frenar esa inapropiada asunci¨®n de riesgos por aquellos bancos que no est¨¦n leyendo el mapa de riesgos de manera adecuada".
Para evitar que queden dudas, Rold¨¢n dej¨® claro que el responsable de realizar esta tarea discriminatoria es "el supervisor, el Mecanismo ?nico de Supervisi¨®n, que debe actuar cuando los gestores de un banco concreto siguen pol¨ªticas comerciales y de gesti¨®n de riesgo err¨®neas. El comportamiento en manada solo se produce cuando no se penaliza la asunci¨®n de riesgos excesiva por parte de los primeros agentes que se separan del grupo", concluy¨®, recordando una de las causas de la reciente crisis financiera mundial.
En tercer lugar, Rold¨¢n abog¨® por la subida de tipos de inter¨¦s, ya que cree que la situaci¨®n actual perjudica a la banca, pero tambi¨¦n frena la recuperaci¨®n econ¨®mica. "La normalizaci¨®n de la curva de tipos de inter¨¦s, un hecho que, cuando se produzca, ser¨¢ una magn¨ªfica noticia para el sector bancario, pero tambi¨¦n para la econom¨ªa en general. No podemos ignorar la paradoja actual: a los bancos se les exige prudencia, es decir, control de los riesgos, pero por otra parte, la instrumentaci¨®n de la pol¨ªtica monetaria incentiva a esos mismos bancos a asumir m¨¢s riesgo, lo que resulta contradictorio y, por qu¨¦ no decirlo, desconcertante".
Digitalizar las oficinas
Dentro de estas jornadas, tambi¨¦n intervinieron Carlos Torres, Gonzalo Gort¨¢zar y Jaime Guardiola, consejeros delegados del BBVA, CaixaBank y Sabadell respectivamente. La digitalizaci¨®n fue el eje de los discursos de todos ellos, as¨ª como la especializaci¨®n de las sucursales en centros de asesoramiento que aporten mayor valor y m¨¢s rentabilidad al colocar pr¨¦stamos, fondos de inversi¨®n, planes de pensiones y seguros, entre otros.
Sin querer entrar en un tema tan espinoso como la reducci¨®n de plantillas y oficinas, que evitaron los tres ponentes, el discurso m¨¢s contracorriente fue el de Gort¨¢zar. El segundo ejecutivo de CaixaBank defendi¨® su inmensa red de oficinas, 5.228 sucursales, pese a que ha planteado reducci¨®n de plantilla en unas 500 prejubilaciones. Record¨® que tras las compras realizadas durante la crisis, (entre ellas, Banca C¨ªvica, Banco de Valencia y Barclays) "recibimos 2.300 oficinas, pero cerramos 2.800. Con menos sucursales, ahora tenemos un 31% m¨¢s de clientes y un 58% m¨¢s de recursos gestionados que antes de las adquisiciones". "La red tiene que ser m¨¢s eficiente y competitiva, pero es absolutamente clave", afirm¨®.
Gort¨¢zar dej¨® entrever que el sector habla de cierre de oficinas porque solo las ven como centros de costes. "Si es esa la ¨®ptica, el objetivo siempre es cerrar, pero nosotros creemos que ofrecen valor a?adido, no operaciones porque solo se hacen el 8% del total en las sucursales". Afirm¨® que sus gastos por oficinas ascienden a 255.000 euros, "el menor los siete bancos m¨¢s importantes, y los gastos generales por empleado era de 41.000 euros", tambi¨¦n el m¨¢s bajo.
Tambi¨¦n de forma velada critic¨® a los que hablan de invertir en tecnolog¨ªa de forma abstracta. "La visi¨®n de CaixaBank es que esta inversi¨®n tiene sentido si reduce costes, mejora efectividad de los empleados y mejora el servicio. En nos meses, los empleados dispondr¨¢n de 20.000 tabletas inteligentes para llevar la oficina a donde est¨¦ el cliente".
Gort¨¢zar diferenci¨® su estrategia de la de otros competidores. Habl¨® de recuperar la reputaci¨®n perdida y, en este campo, una de las decisiones que ha tomado CaixaBank es "no abandonar ninguna de las poblaciones donde estamos ahora. Cubrimos el 93% de los municipios de m¨¢s de 5.000 habitantes. No nos vamos a ir porque dejar poblaciones sin servicios financieros genera exclusi¨®n financiera y pobreza". Sobre la cuenta de resultados admiti¨® que uno de los ejes que les ha permitido mantener los beneficios ha sido el ¨¢rea aseguradora. "En este campo hemos tenido quiz¨¢ m¨¢s ¨¦xito en el negocio bancario. Los seguros y sus alianzas han contribuido a la cuenta con 700 millones, algo que es diferencial y cada vez crece m¨¢s". Tambi¨¦n destac¨® lo que ganan con la gesti¨®n de activos y el negocio de tarjetas, con los que han amortiguado la crisis financiera.
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