Draghi descarta un final abrupto del plan del BCE de compra de deuda
El Eurobanco, que deja los tipos en el 0%, decidir¨¢ en diciembre si ampl¨ªa el programa m¨¢s all¨¢ de marzo
Mario Draghi compr¨® el jueves tiempo con el que responder al dilema al que se enfrenta. Desde Fr¨¢ncfort, el presidente del Banco Central Europeo (BCE) dej¨® todo intacto: los tipos de inter¨¦s no se mueven de su m¨ªnimo hist¨®rico y el programa de compra de deuda sigue tal cual se hab¨ªa dise?ado. Hasta marzo del pr¨®ximo a?o ¡°y m¨¢s all¨¢ si es necesario¡±, seg¨²n la coletilla habitual. Draghi no quiso dar muchas pistas; pero s¨ª dijo que le parece ¡°poco probable¡± un final abrupto de la medida que tantas suspicacias despierta en Alemania. Suger¨ªa as¨ª que esta puede continuar m¨¢s all¨¢ de lo planeado.
Ser¨¢ en la reuni¨®n del pr¨®ximo 8 de diciembre cuando el italiano tendr¨¢ que pronunciarse y anunciar finalmente si la adquisici¨®n de activos, a la vista del d¨¦bil crecimiento y de una inflaci¨®n todav¨ªa muy lejos del nivel deseado, continuar¨¢ m¨¢s all¨¢ del primer trimestre de 2017.
El dilema de Draghi se puede resumir en una pregunta: ?debe atender el BCE a aquellos que alertan de la fr¨¢gil recuperaci¨®n y aconsejan continuar con las medidas extraordinarias de pol¨ªtica monetaria o, por el contrario, escuchar a los que, comandados por Alemania, se oponen a alargar una medida que equivale a mantener vivo a un paciente con respiraci¨®n artificial?
El presidente del BCE dijo que el Consejo de Gobierno del banco no hab¨ªa abordado esta cuesti¨®n en su reuni¨®n del jueves. Los mercados reaccionaron a la baja tras estas palabras, que pod¨ªan interpretarse como un anuncio de vuelta paulatina a la ortodoxia. Pero se recuperaron m¨¢s tarde, cuando el italiano desech¨® la posibilidad de un final abrupto para el programa que lanz¨® en marzo de 2015 y que ha ido ampliando de manera progresiva.
?Desigualdad? El culpable es el paro
Mario Draghi est¨¢ acostumbrado a defenderse de acusaciones procedentes de Alemania. En la rueda de prensa del jueves abord¨® una repetida ¨²ltimamente: los bajos tipos y la compra de deuda generan desigualdad. Los cr¨ªticos le reprochan perjudicar a los peque?os ahorradores y beneficiar a las grandes fortunas. ¡°La principal causa de desigualdad es el desempleo¡±, respondi¨® Draghi. Y, con su pol¨ªtica, el presidente del BCE trata de impulsar el crecimiento y disminuir el paro. Incluso el Bundesbank, habitualmente cr¨ªtico con Draghi, ha confirmado esta tesis recientemente.
Draghi estuvo, si cabe, m¨¢s cr¨ªptico de lo habitual. Pero todo apunta a que el banquero central, vapuleado a menudo por pol¨ªticos, economistas y periodistas de la primera econom¨ªa de la zona euro, se inclina por la opci¨®n de continuar con la compra de deuda. Dijo ser consciente de que las medidas extraordinarias no pueden durar para siempre. Pero tambi¨¦n record¨® que el escenario de ¡°recuperaci¨®n moderada pero continuada de la eurozona y un aumento gradual de la inflaci¨®n¡± est¨¢ ligado a la pol¨ªtica monetaria actual.
Los datos de los ¨²ltimos meses no son malos, pero tampoco como para echar cohetes: el PIB de la eurozona creci¨® entre abril y junio un 0,3%, menos que en el primer trimestre del a?o; y la inflaci¨®n ha crecido ligeramente hasta el 0,4%. Pero sigue muy, muy lejos del objetivo oficial de acercarse al 2%
El BCE se congratula de que la zona euro haya resistido los efectos adversos de la econom¨ªa global y de la incertidumbre pol¨ªtica, pero alerta al mismo tiempo de los riesgos a la baja. La conclusi¨®n es que la eurozona est¨¢ en una especie en terreno de nadie: ni va tan mal como para justificar nuevas medidas por parte del BCE; ni tan bien como para retirar las ya existentes.
Sin riesgo de burbujas
¡°No hemos visto ninguna evidencia de burbujas¡±, remach¨® Draghi, en un intento de quitar la raz¨®n a los que alertan de que las actuales alegr¨ªas del BCE generar¨¢n tensiones futuras. ¡°Los tipos bajos funcionan. Han funcionado¡±, a?adi¨®.
Tras escuchar a Draghi, el economista Marcel Fratzscher est¨¢ ahora m¨¢s convencido que antes de que la compra de deuda continuar¨¢ m¨¢s all¨¢ del mes de marzo. ¡°Mi previsi¨®n, adem¨¢s, es que no se reduzca el volumen de 80.000 millones de euros al mes. Esta decisi¨®n defraudar¨ªa las expectativas del mercado y podr¨ªa desatar reacciones indeseadas¡±, asegura el presidente del instituto econ¨®mico alem¨¢n DIW.
Nicolas Veron, del think-tank Bruegel, duda que el propio BCE sepa ya los detalles de c¨®mo se va a desarrollar lo que en la jerga imposible de los financieros se conoce como QE ¡ªsiglas de quantitative easing o expansi¨®n cuantitativa¡ª. Cree que estos detalles depender¨¢n de la evoluci¨®n de la zona euro en las pr¨®ximas semanas. Pero da por hecho que en diciembre habr¨¢ nuevas medidas. ¡°Una vez aclaradas las dudas sobre la legalidad de sus decisiones, el BCE tiene v¨ªa libre. No obtendr¨¢ un apoyo un¨¢nime en el Consejo de Gobierno, pero s¨ª una mayor¨ªa suficiente¡±, a?ade desde Washington.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.