Los ba?os que seducen a ¡®Juego de Tronos¡¯
El grupo andaluz Aire se expande tras convertirse en el ¡®spa¡¯ de los famosos en Nueva York
Cuando Emilia Clarke se quitaba el traje de Daenerys Targaryen, la Khaleesi de Juego de Tronos, durante el rodaje de la sexta temporada de la serie en Almer¨ªa, se relajaba en los sugerentes ba?os que el grupo andaluz Aire tiene en la Plaza Vieja de esta ciudad andaluza. Antes que ella, se zambulleron en sus aguas los actores de la superproducci¨®n Exodus y en Nueva York, donde la empresa dio el salto en 2012, se han convertido en el spa de los famosos. Est¨¢n en el barrio de Tribeca y algunos de sus habituales son Robert de Niro, Mariah Carey, Bono o Justin Bieber, a quien le encanta abrazarse a una barra de hielo en una de las terapias que se ofertan en la Gran Manzana.
Aire Ancient Baths recibi¨® a sus primeros clientes hace 12 a?os, en un palacete del siglo XVI del sevillano barrio de Santa Cruz, y a principios de 2017 abrir¨¢ las puertas de un nuevo establecimiento en Chicago, donde 1.600 metros cuadrados de lo que fue una f¨¢brica textil han sido reconvertidos para captar la esencia marca de la casa: recuperar la tradici¨®n de los antiguos ba?os griegos, romanos y ¨¢rabes y utilizar las propiedades del agua para ayudar a relajar cuerpo y mente.
El de Chicago, con una inversi¨®n de 8,5 millones de euros, ser¨¢ el sexto negocio del grupo y el segundo en Estados Unidos. En Nueva York tienen proyectado un segundo establecimiento en el Upper East Side y la aventura americana de este grupo de emprendedores continuar¨¢ por Los ?ngeles. El plan de expansi¨®n a corto plazo en Europa pasa por Par¨ªs, Copenhague y Londres, donde ya han firmado el contrato para acondicionar nuevas instalaciones. Uno de sus secretos: los ba?os siempre ocupan lugares singulares con un hueco en la historia.
Crecimiento imparable
El grupo Aire tiene 14 socios, de perfiles variados y procedentes de Almer¨ªa y Granada. La idea de montar unos ba?os cl¨¢sicos surgi¨® en 2011 ante la falta de una oferta similar en Sevilla. En esta ciudad abrieron el primer centro en 2014, en la calle Aire, que da nombre a la marca. Despu¨¦s llegaron Barcelona (2008), Almer¨ªa (2011); Nueva York, abierta en 2012 y que representa el 40% de la facturaci¨®n total; y Vallromanes, a 25 kil¨®metros de Barcelona (2015). Atienden a un cliente exigente de poder adquisitivo medio-alto. Y amantes del silencio, las cosas "puras" y la historia, precisa Am¨®s Milton Garc¨ªa.
"Parte del ¨¦xito es que recuperamos edificios emblem¨¢ticos", explica Am¨®s Milton Garc¨ªa Orozco, socio fundador y presidente del consejo de administraci¨®n. El futuro Aire de Copenhague, por ejemplo, se instalar¨¢ en la antigua f¨¢brica de cerveza Carlsberg y el de Londres, en la casa donde James M. Barrie escribi¨® Peter Pan. "Casi huele a literatura", a?ade este empresario y escritor.
Todos los centros son rentables y el concepto, que sus promotores vinculan m¨¢s a un balneario que a un spa, se ha convertido en un ¨¦xito empresarial y de p¨²blico. La facturaci¨®n rondar¨¢ los 20 millones de euros a finales de 2016 y se estima que en un par de a?os se superar¨¢n los 50 millones. La plantilla la forman 400 empleados y podr¨ªa duplicarse en el mismo periodo de tiempo. Solo son propietarios de los inmuebles de Sevilla y Almer¨ªa y el resto suelen arrendarse por 25 a?os.
"El objetivo es la calidad extrema", apunta Blas Bonilla, gerente de las instalaciones de Almer¨ªa. La necesidad de ser "punteros" en los tratamientos de agua obliga a una renovaci¨®n constante y a reinvertir en mejoras. Y eso pese a los problemas de financiaci¨®n con los que se est¨¢n topando desde el principio. "Para abrir los primeros ba?os, ocho bancos nos denegaron un pr¨¦stamo", rememora Garc¨ªa Orozco. Al tratarse de inmuebles antiguos y singulares, el presupuesto de la reforma suele subir sobre el inicialmente previsto, igual que el tiempo de ejecuci¨®n de la obra.
Los ba?os Aire de Almer¨ªa son los ¨²nicos con un hotel boutique asociado. Cuenta con 10 habitaciones, que ser¨¢n 25 tras la compra y rehabilitaci¨®n de dos edificios aleda?os. La azotea del establecimiento, con vistas al mar y a la potente Alcazaba almeriense, se est¨¢ acondicionando como zona de descanso y ocio, con piscina. En el subsuelo, una de las posibilidades es disfrutar de un ba?o de vino, con masaje craneal y copa incluidos, que se ha trabajado con las bodegas Matarromera para eliminar las mol¨¦culas de alcohol y mantener las propiedades antioxidantes del l¨ªquido. Seguro que a esto tampoco se podr¨ªa resistir la Khaleesi.
Cuesti¨®n de salud y bienestar
El turismo 'wellness', aquel que tiene como objetivo principal los tratamientos de salud, bienestar y mejora del estado emocional o f¨ªsico, est¨¢ en auge en los ¨²ltimos a?os. Un reciente estudio de The Ostelea School of Tourism & Hospitality sit¨²a a Espa?a en el puesto 18 del top 20 de los pa¨ªses con m¨¢s demanda en este segmento, con 540.000 viajes en 2015. La estad¨ªstica la encabezan India, China y Estados Unidos, y Espa?a asciende hasta el n¨²mero 12 en el apartado de ingresos anuales derivados del gasto tur¨ªstico directo, con 419,1 millones de euros. Esa cifra podr¨ªa duplicarse en 2020.
El subsegmento de salud se encuentra orientado principalmente hacia un turista extranjero de alto poder adquisitivo y a¨²n no ha tenido su verdadera eclosi¨®n en nuestro pa¨ªs porque requiere un nivel de especialidad y organizaci¨®n muy potente, aunque las cl¨ªnicas privadas espa?olas aumentan sus esfuerzos para posicionarse en un mercado con cifras millonarias al que se apuntan hoteles, agencias de viajes y centros de ocio. Se calcula que el gasto medio de un turista-paciente se mueve entre 6.000 y 8.000 euros por estancia.
Los subsectores de bienestar y belleza, mucho m¨¢s asequibles, tambi¨¦n ganan terreno. De masajes a ba?os o simples sesiones de est¨¦tica y terapias de relajaci¨®n en balnearios, hoteles o spas. Escapadas puntuales o turistas con una estancia media aproximada de una semana y un gasto diario de cerca de 75 euros. Seg¨²n el ¨²ltimo informe de la Consejer¨ªa de Turismo de Andaluc¨ªa, una de las comunidades espa?olas m¨¢s demandadas en salud y bienestar, la presencia de mujeres es mayor. El n¨²mero medio de tratamientos aument¨® en este destino en 2015 hasta los 6,2, gracias especialmente al empuje de los turistas nacionales, que en este caso superan a los extranjeros.
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