La tijera de la pobreza

Puede que estemos ante una nueva explosi¨®n de la pobreza y de la desigualdad en Espa?a. Pero estamos a tiempo de evitarla. Mi temor viene de dos circunstancias, relacionadas ambas con la vivienda. Una es la importancia del gasto en vivienda en la renta disponible de los hogares pobres. La otra es el riesgo de que la nueva subida de precios de la vivienda provoque un aumento de la pobreza y de desahucios encubiertos. Vayamos por partes.

Para ver c¨®mo act¨²a la vivienda sobre la pobreza puede ser ¨²til imaginarnos una tijera. La hoja de abajo representa los ingresos de los hogares: salarios, prestaciones de paro y otras prestaciones p¨²blicas. Al caer los ingresos, esta hoja se abre. La hoja de arriba es el gasto de vivienda. Si aumenta, esa hoja se abre. El espacio que queda entre las hojas es el n¨²mero de hogares pobres. Cuanto m¨¢s caigan los ingresos y m¨¢s suba la vivienda, mayor es la pobreza.

Hay que enfrentar el tema de los alquileres. La inacci¨®n puede llevar a otra revuelta social contra los desahucios

Como es bien conocido, el paro y la ca¨ªda de los salarios han afectado mucho m¨¢s a los hogares m¨¢s pobres que a los de renta media y alta. Por el lado de los gastos, la vivienda es el gasto que mayor impacto tiene en la pobreza. La diferencia entre ingresos y gastos es la renta disponible que les queda a las familias para otros gastos: alimentaci¨®n y educaci¨®n de los hijos, por ejemplo. La ca¨ªda de la renta disponible despu¨¦s del gasto en vivienda para el 20 % de los hogares m¨¢s pobres ha sido del 44 % en el per¨ªodo 2008 al 2015. La vivienda act¨²a como una sanguijuela que chupa renta disponible a las familias.

El impacto en los hogares con ni?os es a¨²n m¨¢s dram¨¢tico. La renta disponible final para otros gastos que le queda a un hogar con ni?os despu¨¦s del pago de la vivienda es de 1,760 euros al a?o. Esa cantidad es de 24.836 euros a?o en el caso del 20 % de hogares de mayores ingresos. Un reciente informe de ¡°Save The Children¡± sobre la pobreza infantil en Espa?a es una llamada de atenci¨®n al sentido de decencia de una sociedad que permite este desastre social (¡°Desheredados. Desigualdad infantil, igualdad de oportunidades y pol¨ªticas p¨²blicas en Espa?a¡±, 2017).

Los gastos en vivienda, junto con el paro y la precarizaci¨®n del empleo, son tambi¨¦n la causa de otra anomal¨ªa. Se trata de la baj¨ªsima tasa de emancipaci¨®n de los j¨®venes. Alrededor de un 80 % de los j¨®venes entre 19 y 33 a?os, es decir, 8 de cada 10, siguen viviendo con sus padres. No sucede en ning¨²n otro pa¨ªs. Sus consecuencias son importantes. En primer lugar, para los propios j¨®venes. En la edad en que han de hacerse responsables de su futuro y adquirir la cultura moral para ello, siguen cobijados por sus padres. En segundo lugar, para el dinamismo de la econom¨ªa y la sociedad. Cuanto antes un pa¨ªs logre la emancipaci¨®n de los j¨®venes mejor situado estar¨¢ en el ranking de la innovaci¨®n.

A m¨¢s largo plazo la soluci¨®n al problema habitacional solo puede venir de un aumento de inmuebles con renta asequible

El problema se puede agravar en los pr¨®ximos a?os por dos factores. Uno es el aumento del precio de la vivienda, tanto de compra como de alquiler, especialmente en ciudades como Madrid y Barcelona. Otro es el hecho de que a partir de 2017 se tienen que renovar decenas de miles de alquileres. Esa renovaci¨®n, en un entorno de subida de precios, puede llevar al aumento de la pobreza y a una nueva ca¨ªda en la emancipaci¨®n de los j¨®venes.

?Qu¨¦ se puede hacer, al menos para que las cosas no empeoren? Primero, enfrentarse a la renovaci¨®n de los alquileres. La inacci¨®n puede llevar a otra revuelta social contra los desahucios encubiertos. Segundo no estropear m¨¢s las cosas con pol¨ªticas err¨®neas. Eso es lo que puede suceder si va adelante la medida prevista en el borrador del Plan de Vivienda 2018-2021 anunciado por el ministro del ramo, consistente en fomentar la compra de vivienda en propiedad por parte de j¨®venes mediante una subvenci¨®n p¨²blica a fondo perdido de hasta 10.800 euros. Ser¨ªa volver a las andadas.

A m¨¢s largo plazo, la soluci¨®n al problema habitacional de los hogares pobres y de los j¨®venes s¨®lo puede venir del aumento del stock de vivienda de alquiler asequible. F¨®rmulas como las de las Housing Associations brit¨¢nicas ¡ªinstituciones privadas sin fines de lucro con un parque de vivienda de alquiler muy importante¡ª son un buen ejemplo a seguir.

La vivienda es uno de esos problemas persistentes que se resisten a su soluci¨®n. Si los expertos y los organismos europeos e internacionales que se dedican a hacer recomendaciones de pol¨ªticas al gobierno le dedicasen el 10 % del inter¨¦s que dedican al mercado de trabajo, las autoridades espa?olas se ver¨ªan impulsadas a hacer algo para cerrar la tijera y cortar la pobreza.