El FROB vigil¨® al Popular durante cuatro d¨ªas antes de la intervenci¨®n
Pese a los estrechos controles, las autoridades se vieron sorprendidas por la ca¨ªda del banco
Las alarmas sobre el Popular se dispararon el viernes 2 de junio. Al d¨ªa siguiente, el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB), por orden de la Junta ?nica de Resoluci¨®n (JUR), un organismo europeo, inici¨® un estrecho seguimiento de la liquidez y viabilidad del Popular. Sin embargo, no pudo evitar que cuatro d¨ªas despu¨¦s, el martes 6, estallara una crisis sorprendente por una abrupta falta de liquidez y se precipitara un final de urgencia. Fuentes del FROB justificaron esta situaci¨®n ¡°porque se esper¨® hasta el final a que llegara una soluci¨®n privada¡±.
El Mecanismo ?nico de Resoluci¨®n (MUR), del que depende el FROB y la JUR, no pudieron evitar la ca¨ªda del sexto banco espa?ol, pese a estar m¨¢s que vigilado. El 31 de mayo, la presidenta del MUR, Elke K?nig, en unas inexplicables declaraciones a Reuters, admiti¨® que se estaba siguiendo la situaci¨®n del Popular ¡°con particular atenci¨®n con vistas a una posible intervenci¨®n¡± si los intentos de fusi¨®n ¡°eran infructuosos¡±.
Para entonces, el Popular no ten¨ªa ninguna oferta privada sobre la mesa, por lo que sus directivos debieron deducir que su final estaba cerca: ca¨ªan en Bolsa en picado y perd¨ªan dep¨®sitos sin freno. Tras las palabras de K?nig, grandes accionistas como Blackrock, vendieron sus acciones. Seg¨²n fuentes del FROB, no se puede decir que aquel aviso fuera determinante para el final del Popular: ¡°La presencia medi¨¢tica del banco era muy potente y el deterioro ven¨ªa de atr¨¢s¡±.
Seg¨²n el Ministerio de Econom¨ªa, el rescate estaba previsto para el fin de semana, pero todo se aceler¨® por este problema de liquidez. El Popular, presidido por Emilio Saracho, solicit¨®, en las ¨²ltimas semanas, financiaci¨®n constante al Banco Central Europeo (BCE) hasta que se qued¨® sin garant¨ªas suficientes para obtener efectivo, seg¨²n comentaron en Econom¨ªa. Seg¨²n este relato, las autoridades europeas deb¨ªan conocer con gran precisi¨®n la fuga de dep¨®sitos, lo que no casa con la idea de que pensaban rescatarlo el fin de semana. Tampoco cuadra con la sorpresa que tuvieron cuando el martes Saracho dijo que no ten¨ªa dinero para abrir las oficinas el mi¨¦rcoles 7 de junio.
Ca¨ªda de dep¨®sitos
Al margen de estos detalles, las autoridades hacen un balance positivo de su actuaci¨®n con el Popular porque se han salvado los dep¨®sitos. El 5 de junio, el Popular dispon¨ªa de 60.347 millones de euros de sus clientes, de los que 35.410 millones correspond¨ªan a dep¨®sitos inferiores a 100.000 euros, aunque fuentes del FROB precisaron que estos datos no son comparables con los recogidos en el balance de la entidad a cierre del primer trimestre. Seg¨²n la entidad, a 31 de marzo de 2017, el Popular ten¨ªa 71.187 millones de clientes minoristas. La necesidad de proteger a los depositantes para garantizar la estabilidad financiera fue el factor principal que condujo a las autoridades.
Este organismo admite que ¡°cuando se produce la inviabilidad de un banco no existen escenarios indoloros o inocuos, y en este caso les ha correspondido a los accionistas y tenedores de deuda subordinada asumir las p¨¦rdidas, todo lo cual entra dentro de la normativa europea¡±. La situaci¨®n del Popular era inviable, seg¨²n fuentes del FROB, y en un contexto como ese lo primero es valorar si existe un inter¨¦s p¨²blico para que se evite la liquidaci¨®n concursal del banco; en el presente caso, el inter¨¦s general resid¨ªa en evitar la quiebra de la entidad. La intervenci¨®n solo se pod¨ªa haber evitado si previamente hubiera atado una soluci¨®n privada, es decir, la aparici¨®n de un comprador, pero no apareci¨®, hasta que se intervino y lleg¨® el Santander. La agencia de calificaci¨®n crediticia Moody's ha confirmado todos los ratings de deuda de Santander y ha mejorado el de la deuda s¨¦nior de Popular tras el anuncio de la compra.
Por otro lado, Saracho ha reconocido en un v¨ªdeo interno dirigido a los empleados, al que tuvo acceso Vozp¨®puli, su ¡°fracaso¡± en la gesti¨®n de la p¨¦rdida del valor de las acciones del banco. Saracho, visiblemente emocionado, dice que ¡°no ha habido un s¨®lo d¨ªa que no haya vivido la crisis del banco¡±, pero ¡°no me cambiar¨ªa por nadie¡±. ¡°Quiz¨¢s se pod¨ªan haber hecho unas cosas y otras no, pero eso ya trabajo de arque¨®logos¡±, a?ade.
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