?De qu¨¦ pa¨ªs viene realmente lo que comemos?

En los ¨²ltimos meses, en el mercado ¨²nico europeo se est¨¢n produciendo movimientos a escala nacional para exigir que en el etiquetado de los productos alimenticios figure claramente el pa¨ªs de origen, una medida que la Comisi¨®n Europea avala, sobre todo, si la omisi¨®n del dato puede inducir a error al consumidor. Dentro de esta creciente tendencia, Italia ya ha comenzado por establecer esa exigencia en la leche y derivados y tiene en marcha otras iniciativas en arroz y pastas. Grecia se plantea hacer lo mismo en conejos y jalea; Finlandia, Lituania y Portugal en leche y derivados, y Francia quiere proteger a sus ganaderos exigiendo la procedencia de los ingredientes en los elaborados de la carne.

Espa?a se ha sumado a esta corriente en la industria l¨¢ctea para cumplir con una antigua exigencia del sector local, que intenta as¨ª ganar ventaja con vistas al consumidor frente a las importaciones de leche y derivados (que proceden sobre todo de Francia) de la mano de las grandes multinacionales o de la gran distribuci¨®n.

La normativa comunitaria sobre la obligatoriedad de indicar el pa¨ªs de origen en el etiquetado de los alimentos es muy abierta y var¨ªa seg¨²n los productos. Los siguientes son casos de algunos de los comestibles m¨¢s demandados:

Carne vacuna. La normativa sobre el etiquetado de la carne de vacuno se redact¨® coincidiendo con la crisis de las vacas locas, entre finales de los noventa y el 2000. Entonces se decidi¨® que en el etiquetado figurase obligatoriamente el pa¨ªs de nacimiento, de engorde y de sacrificio del animal. En el pescado se exige indicar la zona de captura o el lugar de cr¨ªa si se trata de piscifactor¨ªa.

Carne de ave, ovino, porcino o caprino. Se debe indicar el pa¨ªs de cr¨ªa y el de sacrificio. En el caso de que la cr¨ªa se haya hecho en varios pa¨ªses se puede elegir entre poner todos ellos o simplemente indicar que son de la UE. Si se hubieran criado en terceros pa¨ªses se puede indicar como producto no originario de la UE o poner sus nombres. Esta exigencia se debe cumplir para las carnes envasadas o en canales a su salida de mataderos o naves de despiece industriales. Sin embargo, no se contempla esa exigencia cuando el proceso de despiece y envasado de esas carnes lo hace el propio grupo de distribuci¨®n.

Huevos. La etiqueta va en la propia c¨¢scara, con un c¨®digo donde obligatoriamente figura en primer lugar el tipo de producci¨®n (el cero si es ecol¨®gico, el uno si son de campo, el dos si son de suelo, es decir, gallinas sueltas en un gallinero, y tres si las gallinas est¨¢n en jaulas). Luego le siguen las siglas del pa¨ªs, provincia, municipio y n¨²mero de la granja. Si se venden envasados debe constar adem¨¢s el centro de embalaje, la talla (XL, L, M, o S) y fecha de consumo preferente.

Aceite de oliva. En el caso de muchos productos, las exigencias sobre el etiquetado no se basan en directivas, sino en varios reglamentos. Es el caso del aceite de oliva, donde la normativa comunitaria contempla la obligatoriedad de se?alar el origen, aunque si procede de un solo pa¨ªs comunitario se puede elegir entre se?alar ese pa¨ªs o rese?ar simplemente que procede de la UE. Si su origen es extracomunitario debe figurar en la etiqueta. Si procede de diferentes pa¨ªses comunitarios, el industrial puede elegir entre informar de los pa¨ªses o simplemente comunicar que es de la UE. Si los aceites son de terceros pa¨ªses, basta con poner "mezcla de aceites no originarios de la UE". Finalmente, si la mezcla son aceites comunitarios y no comunitarios, es suficiente indicar que es originario y no originario de la UE. En el caso de que el aceite proceda de una denominaci¨®n de origen protegida, se debe indicar en la etiqueta. Mientras, en frutas y hortalizas es obligatorio que figure el pa¨ªs de origen.

Vino. Es obligatorio rese?ar el origen, tanto si ha sido embotellado en Espa?a como si se ha elaborado en otro Estado miembro. Igual sucede si ha sido embotellado en un tercer pa¨ªs. Si se trata de vinos a granel, el origen debe ir en el documento de acompa?amiento. En la actual guerra del vino con Francia, los viticultores galos protestan por los bajos precios del vino espa?ol y tambi¨¦n por el hecho de que algunos industriales franceses no pongan en la etiqueta el origen del vino espa?ol o incluso que lo vendan como vino franc¨¦s. En el caso de los vinos con denominaci¨®n de origen es obligatorio poner su lugar de producci¨®n.

Miel. En el etiquetado de la miel, por ejemplo, la directiva obliga a poner el pa¨ªs de procedencia si se trata de uno solo. Sin embargo, si procede de varios ya se deja libertad a la industria para elegir entre identificar los nombres de todos o indicar simplemente que se trata de una miel de mezclas "originarias de varios pa¨ªses de la UE", "no originarias de la UE" u "originarias y no originarias de la UE". En Espa?a, el Ministerio de Agricultura se apunt¨® a la segunda posibilidad y los industriales que han optado masivamente por las mezclas se?alan que se trata de miel de varios pa¨ªses.

Conservas. En relaci¨®n con otros alimentos importados desde terceros pa¨ªses, como las conservas envasadas o las legumbres en seco, las posiciones comunitarias para exigir que figure el pa¨ªs de origen son muy flexibles y solo es obligatorio si su omisi¨®n puede inducir a error al consumidor, algo muy subjetivo. Espa?a logr¨®, como una excepci¨®n, que esa exigencia se aplicara directamente para las conservas de esp¨¢rrago blanco.