Educado por sus padres en casa y admitido en una universidad brit¨¢nica
Leonel Virosta, superdotado de 18 a?os, estudi¨® la Secundaria sin acudir al instituto y ha sido aceptado por la Universidad de Manchester
Leonel Virosta sabe que es especial. Tiene 18 a?os y a diferencia de la mayor¨ªa de j¨®venes de su edad, ¨¦l no fue al instituto. Desde los 10 a?os sus padres le educaron en su casa de Cuevas del Valle, un pueblo de 500 habitantes en la provincia de ?vila. Diagnosticado como alumno de alta capacidad con sobredotaci¨®n intelectual a los seis a?os, Leonel se prepar¨® por su cuenta el Bachillerato y la PAU (antigua Selectividad) y obtuvo una nota media de 12,62 sobre 14. Quer¨ªa estudiar el grado en Bioqu¨ªmica en la Universidad Complutense, pero el Ministerio de Educaci¨®n le deneg¨® el acceso por no tener los certificados oficiales. Su suerte cambi¨® hace unos meses cuando la Universidad de Manchester le admiti¨® pese a no haber pisado ning¨²n centro de Secundaria.
¡°El colegio se basa en un sistema de castigos y recompensas, profesores que te rega?an en funci¨®n de tus notas y estudiantes que te admiran o hablan mal de ti. Esa es una falsa motivaci¨®n. En casa no hay ayuda externa, todo depende de ti¡±, explica Leonel en la sede madrile?a de British Council, que le acaba de escoger de entre 400 j¨®venes espa?oles para concederle la Beca IELTS, dotada con 10.000 euros e impulsada para animar a estudiar un grado o posgrado en ingl¨¦s.
"Cuando estudias en casa aprendes a ser disciplinado, tienes que cumplir unos horarios y no despistarte", detalla Leonel. En Espa?a todas las familias est¨¢n obligadas a escolarizar a sus hijos desde los seis hasta los 16 a?os. Algunos padres deciden educarles en casa, una opci¨®n que no est¨¢ regulada y que puede ser motivo de denuncia.
Junto a Leonel est¨¢ su madre, Bel¨¦n Guti¨¦rrez, que asegura que a los tres a?os el ni?o ya le¨ªa y escrib¨ªa. ¡°Pillaba al vuelo los juegos de palabras¡±, cuenta. Leonel naci¨® en Alicante y muy pronto sus padres, ambos actores, decidieron instalarse en un peque?o pueblo para criar a su hijo en un entorno de naturaleza. Aunque ¡°ya ten¨ªa resistencia a entregarle al sistema educativo¡±, relata Guti¨¦rrez, a los cuatro a?os le matricularon en un colegio rural de El Hornillo, a 29 kil¨®metros por carretera de Cuevas del Valle. Se decantaron por ese centro porque una vecina les hab¨ªa hablado maravillas de una de sus profesoras, Juana Cano. "Me consolaba pensar que le entregaba a una maestra rural de las que todav¨ªa sienten pasi¨®n por su trabajo; pocos alumnos en clase y una educaci¨®n personalizada".
Admitido en Manchester para estudiar Biolog¨ªa Celular
Hace unos meses, la Universidad de Manchester admiti¨® a Leonel Virosta para estudiar un grado en Biolog¨ªa Celular. Con una condici¨®n: deb¨ªa cursar un Foundation, nombre que recibe el curso de un a?o de duraci¨®n que tiene como objetivo preparar al alumno con los conocimientos espec¨ªficos sobre la materia en ingl¨¦s y cuyo precio de matr¨ªcula es igual a un curso universitario, 9.250 libras al a?o (10.424 euros) en el caso de la p¨²blica. Finalmente, le han comunicado que podr¨¢ acceder directamente a la carrera gracias a haber obtenido la beca de British Council, que valora, entre otras cosas, la habilidad para innovar y "ser una persona din¨¢mica".
"Nosotros no podemos costearlo, es magn¨ªfico que British conceda este tipo de ayudas", indica la madre de Leonel, Bel¨¦n Guti¨¦rrez. El Gobierno brit¨¢nico ofrece pr¨¦stamos sin intereses por un importe m¨¢ximo de unas 9.250 libras al a?o a los estudiantes, que comenzar¨¢n a devolverlo cuando su sueldo sea superior a 21.000 libras (23.741 euros) al a?o. Una vez transcurridos 30 a?os, la deuda prescribe. A diferencia de Espa?a, en Reino Unido no existe la Selectividad ni las notas de corte para acceder a un grado. Cada universidad fija unos requisitos de acceso y uno de los criterios para realizar la criba, adem¨¢s de las cartas de recomendaci¨®n y las entrevistas personales, es la nota media obtenida en primero y segundo de Bachillerato.
Esa maestra recuerda bien el caso de Leonel. "El primer a?o demandaba m¨¢s atenci¨®n que el resto, siempre ten¨ªa que cogerle en brazos, se notaba que no hab¨ªa tenido contacto con otros ni?os", describe Juana Cano. Pronto empez¨® a destacar en el plano intelectual. Cuando les encargaban redactar un poema en casa, ¨¦l tra¨ªa un peque?o libro con diez poemas. Mientras estudiaban el cuerpo humano, ¨¦l llegaba a clase con un trabajo sobre las patolog¨ªas del coraz¨®n. "Sus respuestas eran divergentes, no eran las habituales, ¨¦l iba por otro lado", se?ala Cano.
A los seis a?os la maestra y la psicopedagoga del centro, con un total de 30 alumnos, recomendaron a los padres de Leonel que le realizaran un test para detectar altas capacidades. El diagn¨®stico lo confirm¨® y decidieron adelantarle un curso para que estuviese en un entorno m¨¢s acorde a su nivel. Al final se salt¨® dos cursos, no realiz¨® segundo ni cuarto de Primaria, una medida 100% legal contemplada por la Consejer¨ªa de Educaci¨®n de Castilla y Le¨®n para ese tipo de alumnos conocida como flexibilizaci¨®n curricular.
Cano se inscribi¨® en un curso online del Ministerio para apreder metodolog¨ªas espec¨ªficas para atender a alumnos con altas capacidades. Unos a?os despu¨¦s pas¨® a encargarse de otro grupo y dej¨® de ser su maestra. Se enter¨® de que otra profesora "le estaba haciendo la vida imposible" porque no se aprend¨ªa de memoria las tablas de multiplicar. "?l ten¨ªa sus propias f¨®rmulas de c¨¢lculo y sus compa?eros tambi¨¦n empezaron a juzgarle". A los 10 a?os Leonel termin¨® la Primaria y sus padres decidieron seguir educ¨¢ndole en casa. "No les juzgo porque el sistema educativo no sirve para todos. A veces los padres tienen que defender a sus hijos de ese sistema", opina Cano, que tras la marcha de Leonel del centro le perdi¨® la pista.?
El siguiente episodio son ocho a?os en los que sus padres compraron los libros de texto de las diferentes asignaturas y cursos de la ESO, los estudiaron en profundidad y le dieron las lecciones en casa. "En Espa?a no hay centros p¨²blicos de Secundaria para alumnos con altas capacidades y el CIDEAD -¨²nico centro del Ministerio de formaci¨®n a distancia para j¨®venes- no acept¨® a Leonel", argumenta su madre. El problema era que el CIDEAD solo admite a alumnos a petici¨®n de las comunidades aut¨®nomas con los informes pertinentes?de la inspecci¨®n educativa. Entre sus 1.800 alumnos, la gran mayor¨ªa son ni?os de entre seis y 16 a?os que residen fuera de Espa?a, hijos de familias itinerantes que cambian frecuentemente de domicilio (como los trabajadores del circo) y deportistas de alto nivel. Adem¨¢s, seg¨²n reconoce Ra¨²l Pardo, actual director del CIDEAD, el centro no dispone de un servicio para alumnos con altas capacidades.?
Para poder certificar los estudios del chico, sus padres recurrieron a centros de homeschooling (en espa?ol, escuela en casa) en Estados Unidos y Panam¨¢, que cada a?o le hac¨ªan ex¨¢menes online para acreditar sus conocimientos. El drama lleg¨® cuando Leonel finaliz¨® el Bachillerato con 16 a?os, realiz¨® la PAU por la UNED, obtuvo una muy buena nota (12,62 sobre 14), y el Ministerio le comunic¨® que no pod¨ªa acceder a la universidad en Espa?a al no disponer de certificados oficiales. El Instituto Internacional del Pac¨ªfico -con sede en Panam¨¢-, que le certific¨® el Bachillerato, no est¨¢ homologado en Espa?a.?
Durante dos a?os Leonel, que ahora vive en Serdio, un pueblo de casi 200 habitantes de Cantabria, con sus padres y sus tres hermanos peque?os -todos escolarizados-, cre¨® un canal de YouTube para ense?ar Biolog¨ªa. La inspiraci¨®n le vino de todos los v¨ªdeos educativos que consult¨® durante esos ocho a?os de aprendizaje autodidacta. "El sistema brit¨¢nico es mucho m¨¢s flexible que el espa?ol; para admitirle en la Universidad de Manchester han valorado que est¨¢ motivado y que tiene los conocimientos", se?ala Carolina Jim¨¦nez, directora de pol¨ªtica educativa de British Council Espa?a.?
En el encuentro con Leonel y su madre surgen algunas preguntas inc¨®modas, como la falta de socializaci¨®n de un adolescente. "He sufrido que no tuviese una pandilla de amigos con 17 a?os, pero es importante aprender a estar solo", confiesa su madre. ?l est¨¢ contento con la persona que es y dice que no cambiar¨ªa nada. Es un apasionado de la ciencia y cree que de no haberse educado en casa no tendr¨ªa una convicci¨®n tan poderosa."Yo nunca he sido t¨ªmido y ser diferente no me ha hecho introvertido. De hecho, lo que m¨¢s me atrae de Manchester en su comunidad internacional", aclara Leonel.
El pr¨®ximo septiembre se separar¨¢ por primera vez de su familia para volar a la ciudad brit¨¢nica. "Cuando despegue el avi¨®n y los deje en tierra quiz¨¢s sea el momento m¨¢s triste que he vivido", cuenta. "Pero lo estoy deseando".
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