El negocio blindado de FAC

En 1931, un joven emprendedor llamado ?ngel Estepa combin¨® un cerrojo met¨¢lico horizontal con un moderno cilindro de llaves. Este invento permit¨ªa reforzar la seguridad de las puertas sin tener que cambiarlas en su totalidad, un argumento que desencaden¨® un ¨¦xito inmediato de ventas en la Espa?a de la Gran Depresi¨®n. Patentado, comercializado y fabricado por Estepa desde un taller en la calle Viriato de Madrid, el llamado modelo n? 1 fue la base sobre la que se edific¨® FAC, una firma de productos de seguridad que hoy factura m¨¢s de ocho millones de euros al a?o.

Tras la Guerra Civil, la empresa se destac¨® de su competencia gracias a que su fundador hab¨ªa trabajado en Radio Madrid (ahora parte de la cadena SER) y conoc¨ªa las ventajas de anunciarse en radio. A partir de 1965 la empresa se diversific¨® introduciendo una l¨ªnea de cajas fuertes. "Hasta entonces las cajas de seguridad se vend¨ªan en tiendas especializadas", explica Antonio Estepa, nieto del fundador y director gerente de la empresa. "Nosotros fuimos los primeros en ponerlas en un expositor en las ferreter¨ªas". Hoy las cajas de seguridad representan un 40% del negocio de la compa?¨ªa.

Por estas razones, FAC siempre ha hecho hincapi¨¦ en mantener una buena relaci¨®n con las ferreter¨ªas ¡ªtanto grandes superficies como peque?as tiendas de barrio¡ª como los intermediarios entre el cliente y la empresa. Eso es lo que ha permitido a la firma, seg¨²n su director gerente, salir menos tocada de la Gran Recesi¨®n que su competencia. "Lo bueno que tenemos es que no nos movemos a base de pelotazos", explica. "Nunca hemos trabajado con la construcci¨®n directamente, como s¨ª han hecho algunos de nuestros rivales". Para Estepa, la diferencia es que el suyo "no es un producto de casa construida; es un producto de casa habitada. Lo que fabricamos no suele ir preinstalado".

La crisis tambi¨¦n ha tenido consecuencias en la forma de producir de la empresa. "Antes se fabricaba por volumen, porque los distribuidores nos ped¨ªan pal¨¦s enteros con un producto determinado", explica Estepa. "Pero el mercado se ha hecho m¨¢s especializado y nos piden menos cantidades, as¨ª que nuestras prensas tienen una gran variedad de troqueles distintos para los m¨¢s de 800 productos del cat¨¢logo".

Otro de los pilares de la compa?¨ªa es la innovaci¨®n. "De hecho, hasta 2001, la empresa se llamaba Patentes FAC", explica Estepa, "y contin¨²an siendo una parte muy importante del negocio". Esa apuesta es imprescindible para una empresa que siempre ha de ir un paso por delante de los potenciales rateros. "El cilindro de llaves ha evolucionado de una forma espectacular, para combatir m¨¦todos como el bumping [desbloqueo de cerraduras por percusi¨®n], el impresioning [copias de llaves hechas con masilla epoxi o silicona] o la ruptura f¨ªsica de las cerraduras. Pero no solo se trata de llaves: la empresa tambi¨¦n tiene una l¨ªnea de puertas antiokupa, fabricadas con chapa met¨¢lica y que bloquean la entrada en caso de ruptura de la puerta principal. "Act¨²an como una barrera disuasoria", explica Estepa.

Para el director general, ese ¨¦nfasis en el dise?o y la producci¨®n propia, llevados a cabo en la f¨¢brica de 12.000 metros cuadrados que tiene FAC en Casarrubios del Monte (Toledo) es, a la vez, "lo mejor y lo peor que tiene la empresa". Estepa lo explica: "Por un lado, el cliente final sabe que somos fabricantes y que que podemos hacer cosas como personalizar nuestro producto para grandes pedidos. Por ejemplo: las agencias de alquiler de veh¨ªculos requieren cajas con un buz¨®n que permita introducir las llaves y la documentaci¨®n del veh¨ªculo alquilado y que nadie pueda pescarlas despu¨¦s. Tambi¨¦n podemos hacer peque?os lotes para introducir un nuevo dise?o en el mercado y, si tiene ¨¦xito, llevarlo a la fabricaci¨®n robotizada. Pero, por otro, nos hace mucho menos flexibles en lo que se refiere a personal: tenemos siempre todo un equipo aqu¨ª y si la demanda est¨¢ floja no podemos hacer como otras empresas, que simplemente dejan de encargar".

Casi todos los productos est¨¢n hechos en esta localidad cerca de Valmojado, a excepci¨®n de algunos candados y una l¨ªnea de cajas fuertes fabricadas en China y comercializadas con la marca Traba. Estepa afirma que la empresa tuvo que tomar esta medida ante el poder¨ªo del mercado de cajas de seguridad baratas hechas en el pa¨ªs asi¨¢tico, aunque insisten en no utilizar su propia marca "para no da?arla". Aunque la gama baja etiquetada como FAC tambi¨¦n les ha dado una sorpresa positiva: "Dise?amos una caja fuerte para hoteles que se puede anclar en las estanter¨ªas. Pero los hoteles casi siempre compran mirando el precio, por lo que dif¨ªcilmente podemos competir con el producto asi¨¢tico. As¨ª que donde estamos teniendo ¨¦xito es en el mercado para particulares, dado que es una caja muy bien construida con un precio moderado".

Casa interconectada

Estepa reconoce que el futuro de la empresa est¨¢ en la casa inteligente y en la interconexi¨®n con los dispositivos m¨®viles. "Estamos trabajando en sistemas monitorizados y conectados, pero queremos tener todas las garant¨ªas de fiabilidad", afirma. "Pero es un proceso lento y largo de concienciaci¨®n del cliente final". Y pone ejemplos: "Cost¨® hacer que los clientes aceptasen una caja fuerte plenamente electr¨®nica, sin una cerradura mec¨¢nica. En otro caso, posiblemente llegamos demasiado pronto. Trabajamos con Samsung para ofrecer una puerta que se abriese con un bot¨®n y una contrase?a; en Corea casi todo el mundo las tiene, pero en Espa?a, aunque las vendemos a un precio m¨¢s que razonable, no funcion¨®. La gente nos miraba y nos dec¨ªa, bueno, s¨ª, pero... ?y si me quedo sin luz? ? y si viene uno con un martillo y me la destroza?".

El mercado internacional, que tanto impulsa a otras pymes, no es tan importante para FAC: Estepa estima que ronda el 10% de la facturaci¨®n. "El de la cerrajer¨ªa es un mercado muy tradicional y complejo, porque dependiendo de cada pa¨ªs, o incluso de cada regi¨®n, las necesidades e incluso los gustos son diferentes. Por ejemplo, en algunas regiones prefieren cerraduras de borjas frente a las de cilindro ¡ªque se distinguen por el tipo de llave utilizada¡ª. Y lo mismo pasa en el extranjero. Es algo cultural".