Las comunidades asumen que la financiaci¨®n auton¨®mica se reformar¨¢ en dos fases

En las dependencias del Ministerio de Hacienda calculan los tiempos para ir despejando la agenda pendiente. Primero hay que aprobar los Presupuestos de 2018, despejarse la situaci¨®n en Catalu?a, relanzar el Pacto de Toledo para abordar la reforma de las pensiones y abrir, de una vez por todas, la financiaci¨®n auton¨®mica.

Los barones regionales claman en p¨²blico porque el sistema se reforme cuanto antes. Algunos, sin embargo, reconocen en privado que la presi¨®n ha perdido intensidad en algunos de los territorios que tradicionalmente han sido m¨¢s beligerantes con el asunto.

La recuperaci¨®n econ¨®mica est¨¢ provocando que las comunidades reciban m¨¢s recursos que nunca procedentes del sistema de financiaci¨®n y, adem¨¢s, la recaudaci¨®n de los tributos propios est¨¢ creciendo a ritmos de dos d¨ªgitos por la reactivaci¨®n del sector inmobiliario. A pesar de esta supuesta bonanza, el gasto de estas administraciones tambi¨¦n sufre presiones al alza. El envejecimiento de la poblaci¨®n, la recuperaci¨®n de los servicios recortados en la crisis y el aumento de la inversi¨®n por la proximidad de la carrera electoral comprometen el control del gasto regional.

Est¨¢ previsto que tras el verano se estrene la campa?a electoral que ya da sus primeros coletazos. Ya est¨¢n programadas auton¨®micas, locales y europeas para el ¨²ltimo domingo de mayo de 2019 y las andaluzas se dibujan en el horizonte oto?al.

En este contexto de complejidad pol¨ªtica, las comunidades reconocen que es dif¨ªcil negociar una reforma del sistema de financiaci¨®n que arrojar¨¢ perdedores y ganadores, seg¨²n diversas fuentes auton¨®micas y gubernamentales. Estas mismas fuentes reconocen que el panorama en Catalu?a deber¨ªa despejarse porque son un actor principal en el cierre del nuevo sistema de financiaci¨®n.

Por eso, las comunidades empiezan a resignarse a que la reforma se acometa en dos fases. La primera parte ser¨ªa la reestructuraci¨®n de la deuda auton¨®mica. La segunda, se dejar¨ªa para m¨¢s adelante, tras el proceso electoral. En esta fase se atender¨ªan los asuntos m¨¢s t¨¦cnicos y espinosos.

165.000 millones de deuda

Hacienda trabaja con todos los escenarios. Convocar¨¢ un Consejo de Pol¨ªtica Fiscal para reunir a las comunidades a finales de mayo o en junio. Les presentar¨¢ una propuesta base. Su primera opci¨®n pasa por un cambio integral del sistema. Simplificando los cinco fondos existentes en dos, con m¨¢s transparencia y otorgando m¨¢s recursos al fondo de compensaci¨®n interterritorial, que estar¨ªa fuera del modelo y servir¨ªa para que las autonom¨ªas m¨¢s pobres converjan con las pr¨®speras.

Aunque todas las autonom¨ªas creen que el sistema carece de fondos suficientes para prestar los servicios p¨²blicos con m¨ªnimas garant¨ªas, el ministro se resiste a aportar nuevos recursos como reclaman los barones.

As¨ª, para abrir las negociaciones, Hacienda est¨¢ dispuesto a reestructurar la deuda auton¨®mica. Las comunidades adeudan alrededor de 165.000 millones al Estado por los pr¨¦stamos del plan de pago a proveedores y el Fondo de Liquidez Auton¨®mica (FLA). Y as¨ª lo ha dispuesto en una disposici¨®n adicional en los Presupuestos de 2018, que se tramitan en el Congreso, por la que se habilita al Gobierno a alargar los plazos de devoluci¨®n y rebajar los intereses a aquellas comunidades que cumplan los objetivos presupuestarios de deuda y d¨¦ficit p¨²blico. "La refinanciaci¨®n es un parche. Quieren solucionar la consecuencia en lugar de abordar el problema, que es la insuficiencia", asegura un responsable auton¨®mico.