Mercados nerviosos
La pol¨ªtica econ¨®mica dispone de ant¨ªdotos frente a la virulencia de la prima de riesgo
Los mercados est¨¢n viviendo jornadas marcadas por la volatilidad, que podr¨ªan pasar factura a la econom¨ªa. Durante el ¨²ltimo mes, los inversores han venido exigiendo una mayor rentabilidad para sus compras de deuda p¨²blica espa?ola. La presi¨®n no ha sido constante, sino con altibajos. As¨ª, el tipo de inter¨¦s del bono a 10 a?os se sit¨²a ahora por encima del 1,35%, 15 puntos b¨¢sicos m¨¢s que a principios de mayo. Y en los momentos de m¨¢xima tensi¨®n el martes pasado, la cotizaci¨®n roz¨® el 2%. La Bolsa tambi¨¦n ha sufrido una severa correcci¨®n, complicando la financiaci¨®n de las empresas, aunque al cierre semanal parec¨ªa haber recuperado parte del terreno perdido.
Se alude a menudo a la situaci¨®n en Italia para explicar estas turbulencias. El pa¨ªs transalpino se ha enfrentado a dificultades para formar un nuevo gobierno, en un contexto de antieurope¨ªsmo y de dudas sobre el futuro de una econom¨ªa sobreendeudada que no consigue despegar.
Las incertidumbres propias tambi¨¦n contribuyen a elevar el riesgo a pesar de la buena marcha de la econom¨ªa en comparaci¨®n con la italiana. El diferencial de tipos de inter¨¦s frente al bono alem¨¢n ¡ªla famosa prima de riesgo¡ª se ha disparado hasta m¨¢s de 95 puntos, un 25% m¨¢s que hace un mes.
Sin embargo, frente al nerviosismo de los mercados y los avatares de la pol¨ªtica, conviene no desviar la atenci¨®n de las tendencias subyacentes que explican las turbulencias. En primer lugar, la zona euro no funciona adecuadamente, lo que adem¨¢s de un crecimiento econ¨®mico d¨¦bil genera reacciones excesivas en momentos de inestabilidad como el que estamos viviendo. S¨®lo as¨ª se explica el repunte de las primas de riesgo en pa¨ªses estables pol¨ªticamente como Austria y Portugal, o el desplome del euro frente al d¨®lar.
La zona euro tambi¨¦n padece un problema de credibilidad. Se han prometido reformas de calado, como la uni¨®n bancaria, para evitar contagios de las primas de riesgo sobre la financiaci¨®n de la econom¨ªa y prevenir fugas de dep¨®sitos. Tambi¨¦n se ha debatido acerca de generar una capacidad de respuesta europea a eventuales recesiones. Sin embargo, pese a t¨ªmidos pasos, el grueso de estas reformas se ha enfrentado a profundos desacuerdos entre los socios comunitarios.
Por ahora, la acci¨®n del BCE suple a estas carencias ¡ªde lo contrario estar¨ªamos asistiendo a una nueva crisis del euro¡ª. Pero el remedio no es estructural ni podr¨¢ prolongarse de manera indefinida.
En segundo lugar, varios pa¨ªses europeos como Espa?a carecen de una estrategia cre¨ªble para reducir sus principales desequilibrios como la deuda p¨²blica, el paro de larga duraci¨®n o la precariedad laboral. Por ello son m¨¢s vulnerables a las debilidades fundacionales del euro. Tambi¨¦n se exponen a una falta de apoyo social a reformas que favorecen la integraci¨®n europea o el crecimiento sostenible de la econom¨ªa.
En definitiva, el impacto de las tensiones financieras va a depender de la capacidad que muestre la UE para avanzar tanto en la gobernanza del euro como en la agenda de reformas en nuestro pa¨ªs. A corto plazo, la inercia del crecimiento parece garantizada. Los datos del PIB para el primer trimestre que acabamos de conocer aportan un bal¨®n de ox¨ªgeno. Se confirma la progresi¨®n de la econom¨ªa a un ritmo anual del 3%, apenas una d¨¦cima menos que el anterior trimestre. Adem¨¢s, el sector externo consolida su aportaci¨®n y a?ade robustez a la recuperaci¨®n.
Sin embargo, el incremento de los costes financieros que provoca la actual situaci¨®n acabar¨¢ por repercutir sobre los ingresos de empresas y familias, y retardar¨¢ la necesaria reducci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico. Todo ello en pleno proceso de encarecimiento de las importaciones por la debilidad del euro y el repunte del petr¨®leo, que sin duda pesar¨¢n sobre el bolsillo de los espa?oles.
La econom¨ªa mantiene su dinamismo. Pero el incierto entorno externo exige atajar las tensiones financieras desde su ra¨ªz.
Raymond Torres es director de Coyuntura de Funcas. En Twitter, @RaymondTorres_
Crecimiento
La econom¨ªa espa?ola mantiene la senda de ligera desaceleraci¨®n. El PIB creci¨® un 0,7% en el primer trimestre, igual que en los dos trimestres anteriores. El crecimiento fue del 3% con respecto al mismo periodo de 2017, frente a una tasa del 3,1% en el trimestre precedente. La expansi¨®n procede sobre todo de la demanda nacional. Destaca el dinamismo del consumo, tanto privado como p¨²blico, y de la construcci¨®n. Por el contrario, la inversi¨®n en bienes de equipo retrocede, aunque su tendencia sigue siendo de crecimiento. Las exportaciones pierden aire y lo ganan las ventas al exterior de servicios, sobre todo no tur¨ªsticos. La aportaci¨®n del sector externo es positiva.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.