Adveo pierde los papeles

"En dos a?os y medio la compa?¨ªa se pondr¨¢ al d¨ªa¡±. Jaime Carb¨®, consejero delegado de la empresa de material de oficina Adveo, dec¨ªa esto en el verano de 2016. Cumplido el plazo, lo que ha pasado es que la empresa ha entrado en la peor espiral posible: un ciclo de deuda cada vez m¨¢s asfixiante que va paralizando el negocio poco a poco.

Esta semana la banca acreedora se ha plantado: Adveo, que tiene unas 30.000 referencias en su cat¨¢logo (cuadernos, bol¨ªgrafos, papel, sobres, tinta para impresoras o hasta pantallas de ordenador), se declar¨® en concurso de acreedores y ha visto suspendida su cotizaci¨®n en Bolsa. En el ¨²ltimo a?o las acciones han perdido un 81% de su valor (cotizan a menos de medio euro). Pero lo m¨¢s preocupante est¨¢ en sus almacenes, donde trabajan cerca de 900 personas en cinco pa¨ªses, y en su red de 700 franquicias. La falta de liquidez (la deuda neta a mes de septiembre es de 208 millones y la ¨²ltima facturaci¨®n consolidada, de 2017, ascendi¨® a 490 millones), ha hecho que se reduzcan las existencias, y sin material no hay ventas, y sin ventas, no hay empresa.

¡°Los resultados contin¨²an lastrados por la limitada disponibilidad de inventario¡±, admit¨ªa el grupo hace un par de meses. Tampoco podr¨¢n aprovechar todo el potencial del Black Friday el pr¨®ximo 23 de noviembre. Encargaron al banco Houlihan Lokey que buscase un nuevo inversor dispuesto a arriesgar 30 millones de euros en forma de financiaci¨®n a largo plazo. Pero las ofertas que llegaron no cuajaron. Antes del verano se puso sobre la mesa la de Pacific Investment Management Company (Pimco), un fondo conocido en Espa?a porque fue uno de los bonistas atrapados en la ca¨ªda del banco Popular. Seg¨²n la empresa, ¡°la oferta significaba la entrada de 33 millones de euros de liquidez inmediata y la modificaci¨®n de la financiaci¨®n bancaria¡±. Pero la idea no convenci¨® a los prestamistas (un grupo de siete bancos donde est¨¢n el BBVA, el Sabadell o Caixabank). La rechazaron el 26 de julio y la empresa desconvoc¨® la junta donde se iba a aprobar su entrada.

Adveo segu¨ªa sin ver la salida y sus centros log¨ªsticos necesitaban liquidez inmediata. Y apareci¨® el segundo ¡ªposible¡ª salvador, el socio industrial Staples, propiedad del fondo de capital riesgo Cerberus, que llegaba de la mano de la banca. ¡°La oferta vinculante se recibe en condiciones que no han sido facilitadas a la sociedad, y es aceptada por las entidades financieras¡±, admiti¨® la empresa en un hecho relevante a la CNMV a finales de septiembre. En la imposici¨®n de esta operaci¨®n quedaban patentes las diferencias entre el equipo gestor, que hab¨ªa apostado por Pimco, y los acreedores. Staples, un competidor participado por Cerberus, quer¨ªa comprar el pasivo para convertirlo en acciones y quedarse con la empresa. ¡°Adveo dijo am¨¦n a la decisi¨®n de la banca y comenz¨® el proceso [una auditor¨ªa en profundidad]. Durante el tiempo que duraron las gestiones la banca dio un cr¨¦dito puente de 20 millones para que la empresa no se colapsase¡±, dice una persona cercana a la negociaci¨®n. Pero tampoco hubo acuerdo. ¡°Supongo que entraron prometiendo el oro y el moro y despu¨¦s fueron recortando las condiciones¡±, asegura otra fuente interna.

La banca rechaz¨® dos ofertas este verano y ha forzado el concurso de acreedores

La banca, presumiblemente descontenta con la elevada quita que propon¨ªa el comprador, volvi¨® a decir que no. Y durante ese tira y afloja la empresa asumi¨® un compromiso de venta de uno de sus principales activos, el almac¨¦n de Tres Cantos (Madrid) por 22 millones de euros, que no se ha ejecutado y depender¨¢ de la administraci¨®n concursal.

El problema est¨¢ ahora en la continuidad del negocio. Los nuevos tiempos digitales, la entrada de operadores log¨ªsticos muy fuertes, como Amazon, han erosionado la actividad de la heredera de Unipapel, que a su vez fue fundada por tres familias en 1976: los Bezares (due?os de la riojana Papyrus), Moreno de Tejada (de la madrile?a Segundo Moreno) y Muguerza (Vascongada de sobres). Su negocio inicial centrado en los sobres se fue abandonando en favor de la distribuci¨®n de todo tipo de material de oficina. Adem¨¢s, a finales de la d¨¦cada pasada la empresa se embarc¨® en una poco meditada operaci¨®n de crecimiento que engord¨® la deuda hasta los 318 millones con un ebitda de 20. Durante ese tiempo compr¨® de la empresa de consumibles para impresoras Adimpo, o la divisi¨®n europea de Spicers, con las marcas Calipage y Plein Ciel.

En 2015, cuando Carb¨® pas¨® a encabezar el equipo gestor, la actividad ya estaba muy tocada, pero todav¨ªa facturaba 900 millones de euros. El ejecutivo hab¨ªa pasado por empresas en dificultades, como Ebro Foods o Deoleo. Su plan inicial era recortar divisiones no productivas, vender el negocio no rentable, reducir deuda y recuperar el prestigio perdido. Lanz¨® una ampliaci¨®n de capital esperando conseguir 60 millones, pero se qued¨® en la mitad. Ech¨® a 56 trabajadores del ¨¢rea log¨ªstica, suspendi¨® los contratos temporales y ha reducido mucho el tama?o del grupo. A la vez, reform¨® todo el equipo directivo, tanto en Espa?a como fuera: en la parte de tecnolog¨ªa y sistemas fich¨® a Luis Ramos, procedente de Everis, en finanzas mont¨® una estructura para gestionar la reducci¨®n de deuda con Manuel L¨®pez Ant¨®n al frente y en log¨ªstica fich¨® a Ram¨®n Barca, que hab¨ªa trabajado en log¨ªstica en Inditex. Todos estos cambios no parece que hayan impulsado el negocio. En los nueve primeros meses de este a?o las ventas s¨®lo llegan a 282 millones. Adem¨¢s la bola de p¨¦rdidas se hace m¨¢s grande: se acumulan 30 millones en los primeros nueve meses. ¡°Su objetivo estuvo claro, renovar el equipo directivo, desprenderse de una estructura cara e ineficiente, lanzar nuevas l¨ªneas de ingresos y una nueva propuesta de marcas propias. Pero ese plan necesita financiaci¨®n¡±, desliza una fuente de la empresa. Y hay oportunidades en el mercado: el sector factura en Europa unos 40.000 millones de euros en consumo de material, con crecimientos anuales del 2,3%. El margen bruto de Adveo ronda el 30%, y podr¨ªa crecer si se concentran en referencias de m¨¢s valor a?adido. A la vez, tienen 17.000 clientes e ingresos recurrentes en mercados como Francia y Alemania. Pero llevan casi dos a?os enfangados en el problema de la deuda, buscando soluciones externas o ampliando la financiaci¨®n.?

En enero se pusieron en venta las f¨¢bricas de Logro?o y Aduna, en Guip¨²zcoa, ambas de la antigua Unipapel. En paralelo Carb¨® impuls¨® una nueva plataforma tecnol¨®gica para poner orden en la red de aplicaciones que sosten¨ªan el complicado sistema inform¨¢tico montado en el grupo. El tiempo se acaba y el directivo se va alejando de su objetivo de reflotar la empresa.