El Gobierno decidir¨¢ la vida ¨²til de las nucleares seg¨²n vayan las renovables
El Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica determinar¨¢ el cierre de las plantas en consonancia con la penetraci¨®n de las energ¨ªas alternativas
El Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica ha decidido zanjar cualquier pol¨¦mica sobre el futuro del parque nuclear y acabar con la incertidumbre existente en las empresas. Ante la evidencia de que ser¨¢ necesario ampliar la vida ¨²til de las centrales nucleares mientras no se cubra la demanda con energ¨ªas renovables, el departamento que dirige Teresa Ribera determinar¨¢ el plazo de ampliaci¨®n para llevar a cabo un cierre ordenado tras escuchar a las el¨¦ctricas propietarias de las centrales.
Es responsabilidad del Ejecutivo decidir la pol¨ªtica energ¨¦tica del pa¨ªs y la normativa establece un aumento decenal de la vida ¨²til de las centrales nucleares con car¨¢cter general cuando as¨ª lo estipule y lo apruebe la Junta de Energ¨ªa Nuclear. Para hacer la ampliaci¨®n, seg¨²n fuentes empresariales consultadas, se podr¨ªa modificar el art¨ªculo 20 del Reglamento de Instalaciones Nucleares y Radiactivas aprobado por Real Decreto 1836/1999, de 3 de diciembre. No obstante, admite que la Administraci¨®n pueda dar otro plazo por menos o m¨¢s tiempo si se considera necesario. As¨ª lo entienden en el Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica, que determinar¨¢ el plazo de acuerdo con los intereses de la transici¨®n.
En ese sentido, el Plan Nacional de Energ¨ªa y Clima que est¨¢ elaborando el ministerio pondr¨¢ fecha de cierre al carb¨®n y condenar¨¢ a la energ¨ªa nuclear. Pero, mientras parece claro que cerrar¨¢ las plantas de carb¨®n antes de 2030, las nucleares tendr¨¢n una ¡°senda de cierre¡± ordenada que ir¨¢ en consonancia con la penetraci¨®n de las renovables. ¡°Las nucleares tienen una fecha de dise?o de 40 a?os, pero eso hay que hacerlo compatible con un cierre ordenado y con las capacidades que tenemos en Espa?a. Hay que hacerlo de la mano del Consejo de Seguridad Nuclear y de acuerdo con las compa?¨ªas¡±, ha reconocido Jos¨¦ Dom¨ªnguez Abascal, secretario de Estado de Energ¨ªa.
LAS NUCLEARES HOY
Es decir, considera que la participaci¨®n de las nucleares es necesaria en la transici¨®n energ¨¦tica, lo que supondr¨¢ seguir con su funcionamiento bajo un marco retributivo estable que garantice una rentabilidad razonable. Asimismo, reconoce que escuchar¨¢ las pretensiones de las el¨¦ctricas, lo que no quiere decir que las asuma. No obstante, habr¨¢ que formalizar una negociaci¨®n para que ¡°el cierre ordenado sea compatible con las necesidades¡±.
El objetivo es que en 2050 el 100% de la generaci¨®n de energ¨ªa tenga origen verde y que en 2030 ronde el 70%. Por tanto, requiere intensificar la instalaci¨®n de parques y plantas renovables (e¨®licos, fotovoltaicos, biomasa...). El escalonamiento que su implantaci¨®n exige hasta llegar a 2050, deja hueco a las otras fuentes de energ¨ªa y, principalmente, a la nuclear y la de gas natural (ciclo combinado), que har¨¢n de respaldo, sobre todo cuando se producen puntas de demanda. Hoy esas fuentes de energ¨ªa suponen en torno al 20% y entre el 5% y 10% de cuota, respectivamente.
Las empresas, a la gre?a
En la actualidad, existen siete grupos nucleares operativos en Espa?a (Almaraz 1 y 2, Asc¨® 1 y 2, Cofrentes, Trillo y Valdell¨°s 2, ordenadas por su puesta en funcionamiento), cuyo vencimiento se fecha sucesivamente entre 2021 y 2028. La propiedad, excepto los casos de Asc¨® 1 y Cofrentes, se reparte entre ellas en Agrupaciones de Inter¨¦s Econ¨®mico (v¨¦ase cuadro). Pero se da la circunstancia de que estas compa?¨ªas est¨¢n mal avenidas y plantean horizontes temporales distintos con respecto a su involucraci¨®n en la gesti¨®n de las plantas. En concreto, mientras Iberdrola y Naturgy (antigua Gas Natural Fenosa) han pedido renovar la licencia por cuatro a?os, Endesa quiere hacerlo por 10 a?os y alcanzar los 50. La primera prueba de fuego la tendr¨¢n en Almaraz 1, donde deben pedir si la quieren renovar en 2019.
Adem¨¢s, la antigua empresa p¨²blica, hoy controlada por la estatal italiana Enel, ha llegado a plantear incluso hacer intercambio de activos y as¨ª dejar de compartir la propiedad y, consecuentemente, acabar con la pol¨¦mica. Mientras, Iberdrola se ha mostrado reiterativamente partidaria de cerrar apelando a la falta de rentabilidad. Asimismo, se ha opuesto a asumir el desmantelamiento, atribuy¨¦ndoselo al Estado, recordando, al tiempo, el alto coste que supone cerrar una nuclear.
El carb¨®n est¨¢ sentenciado y el gas natural har¨¢ de respaldo
Nueve de las 14 centrales t¨¦rmicas de carb¨®n que en la actualidad est¨¢n en funcionamiento en Espa?a se cerrar¨¢n antes de 2020, principalmente porque no han hehco las inversiones requeridas para cumplir con las exigencias de la normativa europea sobre descarbonizaci¨®n y desulfurizaci¨®n.
Las cinco restantes, que s¨ª se han adaptado, pasar¨¢n ese rubic¨®n; pero su esperanza de vida no superar¨¢ 2030, seg¨²n las previsiones ministeriales. Estas son As Pontes (A Coru?a) y Litoral (Almer¨ªa), propiedad de Endesa; Abo?o y Soto, ambas en Asturias, que controla EDP Espa?a, y Los Barrios (C¨¢diz), cuyo propietario es Viesgo (este activo no se vendi¨® a Repsol).
Por su parte, el gas natural continuar¨¢, a trav¨¦s de los ciclos combinados, con la labor de respaldo del resto de energ¨ªas que tiene en el sistema actual, sobre todo tras la desaparici¨®n del carb¨®n. No obstante, deber¨¢ ¡°reinventarse¡±, en palabras del secretario de Estado de Energ¨ªa, Jos¨¦ Dom¨ªnguez Abascal, si quiere mantener ese protagonismo colateral actual m¨¢s all¨¢ de esta fase de transici¨®n. Es decir, basarse en gas renovable, cero en emisiones. En todo caso, tendr¨¢ un papel importante en sectores como el transporte de mercanc¨ªas y en el mar¨ªtimo.
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