Bruselas derriba las fronteras virtuales para el comercio en la UE

La Uni¨®n Europea puso fin a los controles aduaneros entre sus pa¨ªses miembros hace a?os, pero la eclosi¨®n de los negocios digitales levant¨® fronteras virtuales. La Comisi¨®n Europea ha constatado que el 63% de las plataformas virtuales pone trabas a los ciudadanos para comprar desde otros pa¨ªses a trav¨¦s de Internet y, adem¨¢s, tienen diferencias de precio sustanciales entre Estados por el mismo producto.

Para evitar estas circunstancias, un reglamento comunitario, que entr¨® en vigor el pasado diciembre, pone fin al bloqueo geogr¨¢fico en los dispositivos m¨®viles. Algunas empresas de comercio en la Red? utilizan la IP del dispositivo electr¨®nico desde el que se realiza la compra para redirigir a la p¨¢gina local. De esta forma ponen trabas para acceder a ofertas o productos exclusivos que se ofrecen en otros pa¨ªses de la Uni¨®n.

Bruselas tiene abiertas alrededor de una docena de investigaciones a empresas que limitaban las compras transfronterizas. La Comisi¨®n ha acelerado a finales de a?o sus planes para derribar estas barreras que dificultan el comercio dentro de los pa¨ªses de la UE, tambi¨¦n en cuanto a pagos bancarios. Desde diciembre, las compa?¨ªas ya no pueden bloquear o desviar el acceso de un consumidor a sus plataformas por motivos geogr¨¢ficos o porque su tarjeta de cr¨¦dito procede de otro pa¨ªs. Ese impedimento se produce sobre todo, seg¨²n la Comisi¨®n, en los sectores de los electrodom¨¦sticos (89%), la electr¨®nica y la inform¨¢tica (79%) o la moda (63%), pero tambi¨¦n en el sector del ocio o de las reservas de viajes. Los pa¨ªses miembros deber¨¢n vigilar ahora que las empresas cumplen con la legislaci¨®n comunitaria.

La Comisi¨®n Europea cree que esa medida es un paso de gigante, pero no es el ¨²nico m¨¦todo que siguen algunas multinacionales para impedir las compras de un pa¨ªs a otro. La investigaci¨®n a la firma de moda norteamericana Guess puso al descubierto que esta llegaba a acuerdos de distribuci¨®n con sus minoristas autorizados que restring¨ªan el uso de su marca en Internet, les imped¨ªa publicitarse online o directamente no les dejaban vender a otros Estados. Esa pol¨ªtica comercial permit¨ªa a Guess, seg¨²n Competencia, mantener los precios de sus productos entre un 5% y un 10% m¨¢s elevados en 11 pa¨ªses de Europa del este respecto al resto de la Uni¨®n.

Bruselas impuso a la multinacional con sede en Los ?ngeles una multa de 40 millones de euros por esas pr¨¢cticas. Pero, seg¨²n fuentes comunitarias, la Comisi¨®n tiene una docena de investigaciones m¨¢s abiertas. Entre las compa?¨ªas bajo la lupa de Competencia est¨¢n Nike; las compa?¨ªas tur¨ªsticas Rewe, Kuoni, Thomas Cook o Meli¨¢ y distribuidores de videojuegos como Bandai, Valve, Koch Media o Focus Home. Antes, tuvieron que cambiar su pol¨ªtica comercial Mango, Oysho, Pull & Bear, Topman o De Longhi, entre otros.

Luchas contra los agujeros tributarios

La ¨²ltima de las barreras que quiere romper la UE es la de los pagos bancarios en pa¨ªses miembros fuera de la zona euro. El Parlamento Europeo y el Consejo de la UE acordaron ya medidas para proteger a los consumidores contra los ¡°cargos excesivos¡± por las conversiones de monedas. Esa decisi¨®n va m¨¢s all¨¢ del comercio online. Cuando un ciudadano de un pa¨ªs de la moneda ¨²nica viaja a otro Estado de la UE que no la ha adoptado y paga con su tarjeta de cr¨¦dito o d¨¦bito, por ejemplo, el terminal le ofrece la posibilidad de abonar la factura con la moneda local o en euros. En ese ¨²ltimo caso, se carga una comisi¨®n. Los consumidores deber¨¢n poder comparar el precio de un producto con o sin comisi¨®n de conversi¨®n, tanto en cajeros como en comercios o restaurantes, seg¨²n la nueva regulaci¨®n. Las organizaciones de consumidores han advertido de que la normativa es insuficiente.

El acuerdo sobre los cargos en las conversiones en pa¨ªses fuera de la zona euro decepcion¨® a la organizaci¨®n de consumidores BEUC por no ir m¨¢s all¨¢ y rebajar esas comisiones. ¡°Es desconcertante que la Comisi¨®n Europea y el Parlamento se rindieran tan f¨¢cilmente ante los pa¨ªses miembros¡±, lament¨® Monique Goyens, directora general de la entidad. La asociaci¨®n tiene en sus manos varios estudios que indican los costes que tienen estas pr¨¢cticas para los consumidores. Por ejemplo, se examinaron 1.500 transacciones hechas por ciudadanos noruegos en el exterior y se concluy¨® que solo en cuatro casos salieron ganando haci¨¦ndolo en su moneda local. Otro estudio elaborado por la organizaci¨®n alemana Stiftung Warentest se centr¨® en 11 pa¨ªses de la UE y concluy¨® que el cliente paga entre el 2,6% y el 12% m¨¢s cuando elige su moneda en lugar de la local. Los mayores costes se registraron en la Rep¨²blica Checa, Polonia y Hungr¨ªa.