La ruptura con Google aleja a Huawei del liderazgo mundial en la venta de m¨®viles

El cese de relaciones comerciales cruciales entre Google y Huawei, propiciado por la Administraci¨®n Trump en su guerra comercial con China, amenaza con castigar severamente los negocios de venta de dispositivos m¨®viles y equipamiento de redes del gigante asi¨¢tico si la situaci¨®n se mantiene.

Las compa?¨ªas tecnol¨®gicas estadounidenses han suspendido todo negocio con Huawei relacionado con la venta y compra de hardware, software y servicios t¨¦cnicos. La ruptura comercial con Google es la m¨¢s destacada por afectar a miles de millones de consumidores en el mundo, una gran parte en territorio europeo, porque podr¨ªa obligar al fabricante a incluir en sus dispositivos una versi¨®n de c¨®digo abierto de Android que no incluir¨ªa servicios y actualizaciones clave para los consumidores.

Ambas compa?¨ªas han remarcado p¨²blicamente que los consumidores que posean un tel¨¦fono m¨®vil de la marca no se ver¨¢n afectados, pero no se ha dado ning¨²n tipo de detalle sobre lo que ocurrir¨¢ en el futuro.

Huawei lidera el mercado m¨®vil en Europa. Adem¨¢s, por el crecimiento visto en su volumen de ventas en los ¨²ltimos trimestres, el fabricante aspiraba a convertirse en la marca n¨²mero uno a nivel mundial. En el primer trimestre de 2019, sus tel¨¦fonos fueron los m¨¢s vendidos en nueve pa¨ªses de Europa, seg¨²n los datos del proveedor de inteligencia de mercado IDC. Sin embargo, el panorama ha cambiado dr¨¢sticamente este lunes ante el temor de que la medida no sea revertida en las pr¨®ximas semanas.

"Es pronto para calcular el impacto que puede suponer la medida, necesitamos esperar unas semanas", dice Francisco Jer¨®nimo, vicepresidente asociado de IDC. "Pero si Huawei no consigue licencia de una versi¨®n de Android con las aplicaciones y servicios de Google, el veto supondr¨¢ un impacto enorme en los negocios del fabricante".

La restricci¨®n podr¨ªa limitar las operaciones en el mercado m¨®vil de Huawei fuera de su mercado natal, China, u obligar a que el fabricante ofreciera terminales con una versi¨®n de Android menos segura, menos actualizada y que obligase al consumidor a descargar aplicaciones y servicios clave como WhatsApp fuera de la tienda oficial, con las consecuencias que eso supondr¨ªa tanto en seguridad como en comodidad para el consumidor.

"Cerca del 40% del mercado mundial de smartphones y el 45% de los ingresos de Huawei llegan desde fuera del mercado chino", dice Neil Shah, analista de la consultora Counterpoint Research a EL PA?S. "Es un gran impacto en sus aspiraciones, porque una versi¨®n de Android sin los servicios clave de Google hace que la experiencia que podr¨¢n ofrecer quede a la sombra de la que ofrecen actualmente rivales directos como Xiaomi".

Los analistas creen que la situaci¨®n se resolver¨¢ porque multitud de proveedores en Estados Unidos, Europa, Jap¨®n y Taiw¨¢n dependen directamente de Huawei. Como segundo fabricante a nivel mundial, muchas compa?¨ªas se ver¨ªan afectadas por una decisi¨®n que puede acarrear cuantiosas p¨¦rdidas econ¨®micas. "Creo que los Gobiernos de los pa¨ªses afectados presionar¨¢n a EEUU para que la restricci¨®n se elimine lo antes posible", dice Shah.

La decisi¨®n, que "perjudica a todo el mundo", seg¨²n Jer¨®nimo, plantea a su vez un hipot¨¦tico escenario en el que las compa?¨ªas tecnol¨®gicas chinas formasen una alianza para crear un sistema operativo que compita con Android y Apple. No ser¨ªa descabellado, ya que 43% del mercado de smartphones a nivel mundial es suyo. Esta gran base de usuarios har¨ªa muy atractivo para las compa?¨ªas de software o servicios el desarrollo de aplicaciones para ese posible nuevo sistema operativo. Adem¨¢s, la necesidad de tener un ecosistema no controlado por EE UU se acrecentar¨¢ ante el veto. "Ahora es Huawei, pero podr¨ªa afectar a otros fabricantes en el futuro", piensa Jer¨®nimo. "Es importante para ellos empezar a pensar en una alternativa, lo que podr¨ªa suponer una gran amenaza para Google, que perder¨ªa miles de millones de dispositivos en los que incrustar sus servicios, de los que provienen sus ingresos".

La envergadura de Huawei obliga a pensar en c¨®mo puede afectar a todas las partes implicadas, ya que podr¨ªa convertirse en un gran problema para las propias empresas estadounidenses y europeas que dependen directa o indirectamente de las grandes tecnol¨®gicas chinas.

El veto tambi¨¦n afectar¨ªa a su otro gran negocio: la venta e instalaci¨®n de redes y equipamiento telem¨¢tico. Impedir que Huawei compre hardware a EE UU har¨ªa casi imposible que la compa?¨ªa pueda crear sus productos, ya que casi un tercio de su inversi¨®n y gasto se realiza en Am¨¦rica. Por otra parte, aunque se levantara esa sanci¨®n, el fabricante seguir¨ªa teniendo restringida la venta de equipos de telecomunicaciones en EE UU, lo que supondr¨ªa p¨¦rdidas mil millonarias tanto para Huawei como para todas las empresas estadounidenses que tienen relaciones econ¨®micas con el gigante asi¨¢tico. La medida podr¨ªa dar margen a que compa?¨ªas como Nokia, Ericsson o Cisco dominasen el mercado empresarial de redes de nueva generaci¨®n como las redes 5G.