Espa?a propone a la UE diversificar los proveedores de 5G sin vetar a los chinos

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Espa?a es contraria a que Europa siga el ejemplo de EE UU e incluya a firmas como la china Huawei en una lista negra que les impida participar en la la nueva red 5G, el Internet utrarr¨¢pido, pero aboga por tomar medidas preventivas, como la ¡°diversificaci¨®n de suministradores¡± o la ¡°redundancia de equipos cr¨ªticos¡±. As¨ª figura en el borrador del documento que el Gobierno espa?ol, como los otros 27 socios de la UE, enviar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas a la Comisi¨®n Europea, que debe dise?ar antes de final de a?o la estrategia al reto del 5G.

El despliegue de las redes de quinta generaci¨®n de telefon¨ªa m¨®vil supone un reto sin precedentes. ¡°La sociedad va a depender, en una medida muy superior a lo conocido hasta ahora, de una tecnolog¨ªa que a¨²n no est¨¢ probada desde el punto de vista de la seguridad. Sus implicaciones en materia de derechos y libertades no han sido suficientemente estudiadas. Si se implanta el 5G sin tomar precauciones, luego ser¨¢ muy dif¨ªcil rectificar¡±, advierten responsables del Centro Criptol¨®gico Nacional (CCN), dependiente del servicio secreto CNI.

El tiempo apremia. Vodafone pone este s¨¢bado en marcha la primera red comercial de conexi¨®n ultrar¨¢pida en 15 ciudades espa?olas (incluidas Madrid o Barcelona), con participaci¨®n de Huawei en la red, pero no en los terminales. La plena implantaci¨®n del 5G tardar¨¢ algo m¨¢s: entre 2020, cuando se complete la subasta de frecuencias, y 2025.

La Comisi¨®n Europea ha pedido a los Estados miembro que le remitan, antes del 30 de junio, una evaluaci¨®n de los riesgos, tanto desde el punto de vista t¨¦cnico como legal. El objetivo es que, antes de final de a?o, Bruselas dicte los requisitos que deben cumplir las redes europeas de quinta generaci¨®n.

Las fuentes consultadas descartan que la UE vete a las compa?¨ªas chinas Huawei o ZTE (¡°una medida as¨ª crear¨ªa un enorme agujero a las operadoras¡±, advierten fuentes conocedoras del sector), aunque pronostican que EE UU har¨¢ todo lo posible para que la UE siga sus pasos. Para evitar que los pa¨ªses europeos tengan que enfrentarse por separado a las presiones contradictorias de Washington y Pek¨ªn, la UE ha tomado cartas en el asunto, aunque aun no est¨¢ claro si aprobar¨¢ una directiva de obligado cumplimiento o solo recomendaciones de car¨¢cter voluntario.

Para dar respuesta a la demanda de Bruselas, Espa?a ha puesto en marcha dos grupos de trabajo, uno con las operadoras, presidido por la Direcci¨®n General de Telecomunicaciones y Tecnolog¨ªas de la Informaci¨®n: y otro gubernamental, pilotado por la Direcci¨®n General de Seguridad Nacional.

Sus conclusiones se han plasmado en un documento de casi 60 p¨¢ginas que propone, entre otras medidas, la ¡°diversificaci¨®n de los suministradores¡±, evitando la excesiva dependencia de unos pocos proveedores. Adem¨¢s, para reforzar la resiliencia del sistema ante una aver¨ªa o un sabotaje, plantea la ¡°redundancia de los equipos identificados como cr¨ªticos¡±, la ¡°gesti¨®n distribuida¡± (es decir, la posibilidad de gestionar la red desde diferentes puntos) o la implantaci¨®n de ¡°sistemas de reconfiguraci¨®n autom¨¢tica [de la parte da?ada] en caso de fallo¡±. Fuentes gubernamentales aseguran que Espa?a est¨¢ en condiciones de aplicar con rapidez las instrucciones (vinculantes o no) de la Comisi¨®n, a trav¨¦s de un decreto que cuelgue de alguna ley ya vigente.

Uno de los puntos m¨¢s complejos es la posibilidad de certificar la seguridad de las tecnolog¨ªas 5G. Hasta ahora, a los equipos 4G solo se les exige un certificado de safety (seguridad ante aver¨ªas o fallos de funcionamiento), pero no de security (protecci¨®n ante injerencias o ataques exteriores). Fuentes del CCN aseguran que, dada la vulnerabilidad que entra?a la nueva tecnolog¨ªa, al menos los elementos cr¨ªticos deben ser evaluados y certificados.

El centro espa?ol responsable de la ciberseguridad, junto a sus hom¨®logos de Alemania y Francia y en cooperaci¨®n con varias operadoras, ha lanzado una iniciativa para crear una red paralela de 5G. ¡°Ser¨¢ una especie de laboratorio de ensayo que nos permita probar los equipos en condiciones reales¡±, explican fuentes del CCN.

Corresponder¨¢ a la Comisi¨®n Europea, asesorada por ENISA, la agencia europea de ciberseguridad, fijar los requisitos cuyo cumplimiento deber¨¢ verificar la red de laboratorios europeos especializados. No habr¨¢ listas negras, pero s¨ª requisitos de seguridad preceptivos para operadores y suministradores de bienes y servicios.

Desconfianza de Pek¨ªn

M¨¢s all¨¢ de la guerra comercial, la desconfianza hacia las firmas chinas puede tener fundamento: gran parte de sus directivos procede de los servicios de inteligencia militares y el Estado chino las riega con cuantiosas ayudas. Su legislaci¨®n las obliga a entregar a las autoridades cualquier informaci¨®n que pidan, aunque las empresas alegan que esta servidumbre se limita a los datos obtenidos dentro de China.

Hasta ahora no se ha probado que Huawei act¨²e como quinta columna de Pek¨ªn. Cuando t¨¦cnicos brit¨¢nicos descubrieron un atajo que permit¨ªa controlar un equipo, sus directivos alegaron que se trataba de una puerta trasera habilitada durante el periodo de prueba que alguien se olvid¨® cerrar. No se sabe qu¨¦ inquietaba m¨¢s: si que fuera un sistema sofisticado de espionaje o una chapuza.