Una legi¨®n de escoltas para el expresidente del BBVA

Tras 22 a?os de banquero, Francisco Gonz¨¢lez (Chantada, Lugo, 75 a?os) se ha convertido en un hombre temeroso. Pese a que ya no es presidente del BBVA, mantiene una verdadera legi¨®n de escoltas: 14 profesionales de la seguridad le protegen dentro y fuera de su casa. Y a su esposa la protegen dos m¨¢s, 16 en total. Incluso ahora, que est¨¢ jubilado desde el pasado de diciembre, la entidad asume todos los gastos, seg¨²n fuentes no oficiales del banco y exmiembros de la seguridad de la entidad.

Gonz¨¢lez dispone de cuatro coches de gran cilindrada tambi¨¦n sufragados por el BBVA; tres para su uso y otro m¨¢s para su mujer. El banco declin¨® confirmar este dato, pero apunt¨®: ¡°El expresidente Gonz¨¢lez tiene la seguridad que se considera adecuada seg¨²n criterios t¨¦cnicos. Se cubre su gasto como se ha hecho con otros expresidentes¡±. No obstante, Emilio Ybarra, que dej¨® el banco en 2001, solo tiene un coche con conductor. Este diario tambi¨¦n ha tratado de contactar con Gonz¨¢lez, pero el banco no ha facilitado ning¨²n acceso al exdirectivo.

Gonz¨¢lez se mueve con dos grandes coches: ¨¦l viaja en un BMW blindado, le sigue un segundo veh¨ªculo y un tercero se adelanta al lugar donde va a ir para comprobar que no haya problemas. Cuenta con cuatro escoltas en los dos coches, m¨¢s uno de los que est¨¢ en su casa, que se encarga del tercer veh¨ªculo. Adem¨¢s, tiene ocho m¨¢s destinados en su domicilio, que cuenta con un sofisticado sistema de c¨¢maras, un servicio que tambi¨¦n corre a cuenta del banco.

Su protecci¨®n contrasta con la de Carlos Torres, actual presidente del banco: tiene ocho personas de seguridad y se mueve en un solo coche con dos escoltas. El consejero delegado, Onur Gen?, dispone de tres empleados de seguridad y un veh¨ªculo.

Dos millones de euros de coste

FG, como se le conoce en el mercado, renunci¨® a la presidencia de honor el 14 de marzo pasado, aunque mantuvo intacto su servicio de escoltas, que tiene un coste anual cercano a los dos millones de euros, seg¨²n profesionales de la seguridad consultados. Adem¨¢s, cuando el expresidente viaja (incluido el mes de vacaciones en Andratx, Mallorca), los gastos de desplazamiento de la seguridad tambi¨¦n corren a cuenta del BBVA: hoteles, aviones y restaurantes (tan selectos como los que frecuenta Gonz¨¢lez).

Seg¨²n algunas de las fuentes consultadas, Gonz¨¢lez tendr¨ªa un contrato aprobado por el consejo de administraci¨®n del banco que le cubre los gastos de seguridad durante siete a?os desde su jubilaci¨®n; otras fuentes lo elevan a 10 a?os. Este directivo entr¨® en el mundo de la banca en 1996 al ocupar la presidencia de Argentaria, gracias a su amistad con el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Posteriormente, en 1999 alcanz¨® la presidencia del BBVA, donde estuvo hasta diciembre de 2018, cuando dej¨® el cargo envuelto en la pol¨¦mica por la supuesta relaci¨®n del banco con el comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo, que realiz¨® escuchas a pol¨ªticos, empresarios y periodistas.

El portal Moncloa.com y El Confidencial publicaron una supuesta conversaci¨®n entre Julio Corrochano, ex director general de Seguridad del BBVA, y Villarejo en la que el primero le ped¨ªa al comisario jubilado detalles sobre una investigaci¨®n y aseguraba que el ¡°presi¡± le llamaba cada 10 o 15 d¨ªas. Corrochano dej¨® el banco en abril de 2018, dos meses antes de que se publicaran las primeras facturas con pagos a Villarejo y de que se abriera una investigaci¨®n interna. Las pesquisas las dirigi¨® Joaqu¨ªn Gortari, uno de los ejecutivos m¨¢s cercanos a Gonz¨¢lez (hoy es responsable de la auditor¨ªa interna) y se reenfocaron en enero pasado con la contrataci¨®n de PwC, y los despachos Ur¨ªa y Garrigues, aunque todav¨ªa no se ha cerrado.

En la p¨¢gina web de la entidad, en los textos que resumen la gesti¨®n de Gonz¨¢lez, dicen que ¡°le obsesionan dos cosas: la tecnolog¨ªa y los principios¡±. Los que le conocen de cerca a?aden una tercera: la seguridad. Quiz¨¢ esto se debe a que su llegada al banco fusionado fue convulsa, ya que exigi¨® la dimisi¨®n de todos los consejeros y altos ejecutivos procedentes del BBV, sin esperar a juicio, cuando se supo que ten¨ªan fondos de pensiones en el para¨ªso fiscal de Jersey. ?l asumi¨® la presidencia ¨²nica y, posteriormente, la justicia no conden¨® a los directivos despedidos.

Desde que se hizo con las riendas del BBVA, FG reforz¨® su seguridad alcanzando niveles extraordinarios. En diciembre de 2018, cuando pas¨® a ser presidente de honor, qued¨® en un segundo plano, lo que hizo pensar a algunos en el BBVA que rebajar¨ªa su costos¨ªsimo sistema de seguridad, pero no fue as¨ª. Incluso cuando dej¨® completamente el banco, en marzo pasado, tampoco redujo su protecci¨®n.

El m¨¢s vigilado

Esta situaci¨®n convierte a FG en el expresidente m¨¢s protegido del Ibex 35 y, probablemente, est¨¢ entre los m¨¢s defendidos incluso si se tiene en cuenta a los m¨¢ximos responsables en activo, que cuentan, habitualmente, con un coche con dos escoltas y unas cuatro personas de seguridad en el domicilio. Cuando las empresas son m¨¢s peque?as, el dispositivo consiste en un conductor y un escolta.

Diferentes profesionales de seguridad, que piden el anonimato, consideran que el dispositivo de Gonz¨¢lez es ¡°claramente excesivo, ya que Espa?a, y Madrid en concreto, es una de las zonas m¨¢s seguras de Europa¡±. Tambi¨¦n apuntan que, tras el cese definitivo de ETA, los empresarios rebajaron su seguridad, algo que no ha hecho Gonz¨¢lez, pese a su enorme fortuna (se fue con un fondo de pensiones de 80 millones), ya que no asume el coste de su seguridad.

El expresidente del BBVA siempre repiti¨® que sus normas en la gesti¨®n eran la ¨¦tica y la transparencia y que todo lo que hiciera el banco pod¨ªa ser publicado en la primera p¨¢gina de un peri¨®dico.