El coladero de la nueva ley del pan: los productos fabricados en el extranjero no tienen que cumplirla

Empieza una nueva era para el pan. Este lunes, 1 de julio, entra en vigor en Espa?a una nueva norma que establece c¨®mo debe ser etiquetado correctamente un producto artesano, integral, de masa madre, etc¨¦tera, denominaciones que antes no estaban contempladas o ten¨ªan definiciones muy laxas y que finalmente se han plasmado en un documento oficial al que todos los fabricantes tendr¨¢n que ajustarse. Todos, o casi. Porque los productos importados desde otros pa¨ªses de la Uni¨®n Europea ¡ªadem¨¢s de Turqu¨ªa, Noruega, Islandia y Liechtenstein¡ª no tienen por qu¨¦ atenerse a estos nuevos requisitos. Es algo que ocurre con otros alimentos, pero que causa particular preocupaci¨®n en una parte de la industria del pan, que teme que podr¨ªa restar competitividad a las empresas espa?olas en el mercado nacional.

M¨¢s informaci¨®n

El Gobierno hornea el nuevo decreto del pan

El pan integral ser¨¢ integral de verdad

As¨ª cambiar¨¢ el pan a partir del 1 de julio

Son "productos importados de otros pa¨ªses de la UE (...) que no quedar¨¢n condicionados por esta norma, ni en su formulaci¨®n ni en su packaging, y sin embargo estar¨¢n disponibles para el consumidor espa?ol. Hablamos de un riesgo real y es que, seg¨²n las ¨²ltimas cifras que manejamos, Portugal e Italia son los primeros exportadores de este tipo de productos a nuestro pa¨ªs¡±, defiende Rub¨¦n Moreno, secretario general de la Asociaci¨®n Espa?ola del Dulce (Produlce), que entre sus miembros cuenta con marcas como Bimbo o Panrico.

El pan, al igual que la cerveza, las salsas de mesa o los yogures, no cuenta con una legislaci¨®n armonizada dentro de la UE: los Estados miembros establecen sus reglas internas y pueden exportar sus productos dentro del mercado europeo sin tener que adaptarlos a cada legislaci¨®n nacional. ¡°Mi pan, fabricado seg¨²n criterios de Espa?a, lo puedo vender fuera; en contrapartida, el pan de Francia o Italia se puede vender aqu¨ª. Es el principio de la UE de reconocimiento mutuo¡±, ejemplifica Jos¨¦ Mar¨ªa Ferrer, responsable del departamento de Derecho Alimentario del centro tecnol¨®gico Ainia.?¡°Quien tiene los deberes pendientes es la propia industria y siempre hay que plantearlo todo para no inducir a error al consumidor¡±, a?ade.

Esta preocupaci¨®n sin embargo no es compartida por el resto del sector.?¡°Nuestra competencia fundamental no es precisamente la de fuera¡±,?dice?Jos¨¦ Mar¨ªa Fern¨¢ndez del Vallado, secretario general de la Confederaci¨®n Espa?ola de Panader¨ªa, Pasteler¨ªa, Boller¨ªa y Afines (Ceoppan), que representa el segmento m¨¢s tradicional y artesano. Fern¨¢ndez valora la norma con ¡°moderada satisfacci¨®n¡± y no niega que su negociaci¨®n ha sido ¡°a veces dura y siempre compleja¡±, al haber muchos intereses enfrentados, y admite que hay aspectos que ¡°no han quedado claros del todo¡±.

Protecci¨®n al consumidor

Fern¨¢ndez hace sobre todo referencia a las nuevas denominaciones del pan artesano o de la masa madre, muy en boga entre los consumidores pero hasta ahora desconocidas por la ley.?A partir de este lunes la denominaci¨®n de pan artesano quedar¨¢ restringida (salvo para las existencias ya producidas) solo a los productos que no se hayan fabricado en grandes series y en cuya elaboraci¨®n haya primado el factor humano sobre el mec¨¢nico, y bajo la direcci¨®n de un maestro panadero. ?Mejorar¨¢ la protecci¨®n del consumidor?

¡°No va a valer para nada, no concreta ni menciona ninguna cifra¡±, lamenta Felipe Ruano,?presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de la Industria de panader¨ªa, boller¨ªa y pasteler¨ªa, Asemac, que entre sus principales clientes tiene supermercados, restauraci¨®n y panader¨ªas. Tambi¨¦n distintas asociaciones han lanzado cr¨ªticas sobre las reglas establecidas para usar la definici¨®n de masa madre.?¡°Creemos que va a dar demasiada acidez y no va a gustar, pero como hab¨ªa pol¨¦mica se quiso regular. Ahora se ha aclarado, aunque no significa que el pan mejore¡±, zanja Ruano.

IVA superreducido

Moreno, de Produlce, lamenta que la primera versi¨®n de la norma?¡ª¡°conllev¨® el trabajo de tres a?os en los que se escucharon y tuvieron en cuenta a todas las partes¡±, asegura¡ª era m¨¢s equilibrada que la que ha acabado public¨¢ndose en el Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE). Pero en al menos dos cosas coincide con el resto de actores que participaron en su elaboraci¨®n: en primer lugar, en que hacia falta actualizarla, ya que la anterior se remontaba a 1984 y no recog¨ªa ni el gusto de los consumidores ni las innovaciones del sector; y en segundo lugar, en la ampliaci¨®n de la definici¨®n de pan com¨²n a m¨¢s categor¨ªas ¡ªpan bregado, de flama o miga blanca, y sobre todo, el integral y elaborado con harinas de cereales¡ª, lo que conlleva un IVA superreducido del 4%, y no del 10%, como hasta ahora.

Con la crisis, el consumo de panes m¨¢s elaborados se desplom¨®, en l¨ªnea con la ca¨ªda generalizada que sufre este sector desde hace a?os. Su consumo toc¨® en 2018 el m¨ªnimo hist¨®rico, seg¨²n el Ministerio de Agricultura:?31,87 kilos por persona y un gasto per c¨¢pita de 76,38 euros, frente a los casi 43 kilos y m¨¢s de 90 euros de 2007. El a?o pasado, solo creci¨®?el segmento industrial, tanto en valor como en volumen, mientras el pan fresco integral sufri¨® el mayor retroceso.?

¡°El consumidor ahora estar¨¢ m¨¢s informado que antes, pero otra cosa es que cambie de producto o compre m¨¢s¡±, dice Ruano, de Asemac, quien prev¨¦ que no habr¨¢ confusi¨®n de cara al p¨²blico pero que dentro de unos pocos a?os habr¨¢ que volver a actualizar la norma. ¡°El consumidor sabe mucho m¨¢s de lo que parece y seguir¨¢ comprando el pan que le gusta, se llame como se llame¡±.