El Santander acusa a Andrea Orcel de grabar conversaciones privadas con Ana Bot¨ªn

El Santander ha lanzado su contraataque a la demanda de Andrea Orcel. El ejecutivo italiano se querell¨® a finales de mayo con el banco espa?ol por su fichaje frustrado como consejero delegado ¡ªque se anunci¨® en septiembre y se anul¨® en enero¡ª y le exige a la entidad que preside Ana Bot¨ªn m¨¢s de 110 millones de euros en compensaci¨®n, porque dej¨® su puesto de ejecutivo en UBS para fichar por el banco y finalmente se ha quedado sin ninguno de los dos puestos. El banco ha respondido a la demanda presentada en el juzgado de la Plaza de Castilla. Adem¨¢s de otros argumentos jur¨ªdicos, con los que insiste en defender que solo hubo "una carta de intenciones" y nunca un contrato en firme, Santander acusa a Orcel de haber grabado conversaciones privadas con directivos de la entidad cuando cancelaron su fichaje. Entre las grabaciones, hay conversaciones con la propia presidenta Ana Bot¨ªn, seg¨²n fuentes conocedoras del proceso.

M¨¢s informaci¨®n

Orcel demanda al Santander y le reclama 102 millones, el doble de lo que costaba al banco su fichaje

Andrea Orcel (Roma, 1963) present¨® su demanda civil contra el Santander el pasado 24 de mayo. El banco ten¨ªa hasta finales de julio para presentar ante la autoridad judicial correspondiente el escrito de contestaci¨®n y oposici¨®n a la demanda presentada, y ya lo ha hecho. Tras entregarla, ha realizado un comunicado. ¡°Ante las filtraciones producidas con la finalidad de generar una imagen distorsionada de los hechos, y con pleno respeto a los jueces y tribunales ante los que har¨¢ valer sus razones, el banco considera procedente puntualizar¡± una serie de aspectos, indica la entidad.

El banco insiste en que nunca hizo un contrato en firme a Orcel tal como exige la ley y, por tanto, no tiene por qu¨¦ indemnizarle. Sostiene que solo envi¨® al ejecutivo una carta-oferta. ¡°El se?or Orcel fue nombrado consejero delegado el 25 de septiembre de 2018 acelerando el proceso a petici¨®n de UBS y el propio se?or Orcel, pero ni ese nombramiento fue efectivo ni el contrato entre el banco y el se?or Orcel qued¨® perfeccionado", defiende la entidad. Explica que "estaba pendiente" de la negociaci¨®n y acuerdo sobre uno de sus elementos esenciales: "La retribuci¨®n final a percibir por el se?or Orcel como buyout", es decir, una compensaci¨®n por su salida de UBS. Adem¨¢s, asegura que el acuerdo estaba sujeto a la aprobaci¨®n por la junta general de accionistas, la futura aprobaci¨®n del contrato por el consejo de administraci¨®n, la evaluaci¨®n de idoneidad por el BCE y el plazo de preaviso establecido por UBS. "Ninguna de estas condiciones se dio", justifica el Santander.

Grabaciones incluidas en la demanda

El Santander defiende que todo fue una cuesti¨®n de dinero: el ejecutivo quer¨ªa m¨¢s y no estaba satisfecho con ninguna compensaci¨®n. Orcel, en su demanda presentada ante el juzgado, ofrece una versi¨®n distinta. Y para defenderla, ha incluido transcripciones de largas conversaciones telef¨®nicas que mantuvo con diferentes ejecutivos de la entidad, entre ellos, la presidenta Ana Bot¨ªn, una vez la relaci¨®n laboral ya hab¨ªa fracasado y la entidad estaba negociando con el italiano para evitar una querella.

¡°Seg¨²n ha conocido el banco por la demanda, el se?or Orcel comenz¨® el 12 de enero de 2019 a grabar conversaciones privadas sin consentimiento ni conocimiento de sus interlocutores, una pr¨¢ctica de dudosa calidad ¨¦tica y moral para alguien que pretend¨ªa desempe?ar el puesto de consejero delegado de Banco Santander, lo que viene a confirmar que la decisi¨®n adoptada por el consejo de Banco Santander fue la adecuada", se limita a se?alar el escrito de la entidad.

Las conversaciones est¨¢n incluidas en la demanda que Orcel ha entregado al juzgado, seg¨²n ha publicado El Confidencial, en un CD que ha aportado el ejecutivo. Este mismo medio se?ala que hay transcripciones de presuntas llamadas realizadas a partir del 15 de enero, cuando ya se hab¨ªa roto el acuerdo de fichaje, con Jaime P¨¦rez Renovales, secretario de la comisi¨®n de nombramientos de Banco Santander; Javier Garc¨ªa Carranza, director general adjunto de Banco Santander; y con la propia Ana Bot¨ªn. En estas ¨²ltimas, (siempre seg¨²n la versi¨®n de la demanda de Orcel) ella ofrece al banquero de inversi¨®n colocarle como responsable de alguna cotizada o inmobiliaria para compensarle por el fiasco de su fichaje en el banco.

El gran escollo: la indemnizaci¨®n de UBS

En su relato, Santander explica que desde el 25 de septiembre de 2018, Orcel y el banco mantuvieron intensas negociaciones para concretar la cuant¨ªa del buyout [la compensaci¨®n por su salida de UBS] que se deb¨ªa incorporar al futuro contrato del ejecutivo. Estaba previsto que se abonara en acciones de Santander, sujeta a las m¨¦tricas de desempe?o establecidas por el grupo y desembolsado a lo largo de siete a?os. Ese 25 de septiembre se aprob¨® una carta oferta que se?alaba que si UBS decid¨ªa abonar solo parcialmente la retribuci¨®n diferida o un importe de la misma inferior al que Orcel hubiera percibido de permanecer en UBS, el banco pagar¨ªa una compensaci¨®n de, como m¨¢ximo, 35 millones de euros. Adem¨¢s, el ejecutivo se compromet¨ªa "a realizar todo lo posible para reducir el coste que deb¨ªa asumir Banco Santander", asegura la entidad.

¡°Desde el primer momento, el se?or Orcel trasmiti¨® a Banco Santander unas expectativas sobre la posici¨®n que mantendr¨ªa UBS sobre el pago de sus incentivos que nunca se cumplieron", justifica el banco. "En reiteradas ocasiones el se?or Orcel asegur¨® que lograr¨ªa reducir el buyout negociando con UBS para que se hiciese cargo de hasta el 50% de la cantidad que se deb¨ªa. Incluso pidi¨® a Banco Santander que le ayudara a redactar una carta que enviar¨ªa a UBS en la que sosten¨ªa que la entidad deb¨ªa hacer todo lo posible para asumir la mitad de la retribuci¨®n diferida. No consta que el se?or Orcel llegara a enviar nunca esa carta, cuyo borrador s¨ª le fue proporcionado por el banco¡±, indica.

Orcel pidi¨® m¨¢s dinero

Seg¨²n el banco, lejos de hacer todo lo posible para que UBS le abonara una parte significativa de las retribuciones diferidas, en el transcurso de la negociaci¨®n Orcel rechaz¨® destinar a reducir el importe del buyout los 13,7 millones de euros que UBS accedi¨® a pagarle en concepto de retribuci¨®n no sometida a diferimiento del bonus de 2018 y las retribuciones diferidas que le correspond¨ªan en ese momento.

Asimismo, durante el curso de las negociaciones Orcel incorpor¨® la necesidad de compensar una nueva y supuesta p¨¦rdida retributiva por su salida de UBS, derivada de la no percepci¨®n de dividendos e intereses por la retribuci¨®n diferida, cuantificada inicialmente en un importe superior a los tres millones de euros.

El pleito judicial sigue ahora su curso. ?Hay todav¨ªa margen de negociaci¨®n? Fuentes conocedoras del proceso se?alan que en una demanda civil de este tipo, siempre hay margen para llegar a un pacto y cerrar el conflicto sin que haya sentencia. Sin embargo, los puentes en este momento est¨¢n rotos. Lo que pas¨® en aquellos casi cinco meses de negociaci¨®n todav¨ªa es un misterio. Fue un viaje desde el entusiasmo con el que Ana Bot¨ªn anunci¨® sonriente el fichaje del italiano el 25 de septiembre hasta un pleito que desgastar¨¢ a ambas partes y en que ahora, adem¨¢s de versiones contradictorias y documentos interpretables, hay conversaciones telef¨®nicas grabadas y aireadas a los cuatro vientos.