La lenta muerte de la tarjeta de coordenadas para el pago digital
La nueva normativa para los pagos electr¨®nicos ya est¨¢ en vigor, pero Espa?a y otros pa¨ªses dan un margen de adaptaci¨®n
Desde el pasado s¨¢bado 14 de septiembre est¨¢ en vigor la directiva PSD2, que da un paso m¨¢s para verificar la identidad de los consumidores cuando realizan transacciones electr¨®nicas. Les da una seguridad que antes no ten¨ªan, porque a partir de ahora los proveedores de servicios de pago deben exigir dos de estos tres elementos de seguridad para comprobar la identidad de sus clientes: algo que sepa el usuario (como una contrase?a), algo que tenga f¨ªsicamente (como un m¨®vil), o algo que sea inherente al cliente, como una huella dactilar o la voz. Las tarjetas de coordenadas dejan de ser ¨²tiles (no computan como elemento de seguridad) y han sido sustituidas por c¨®digos enviados por mensaje o v¨ªa aplicaci¨®n.
Pero el Banco de Espa?a, al igual que otros reguladores europeos, ha dado un margen de tiempo (se estima que ser¨¢ de 14 meses con otros cuatro adicionales, pero todav¨ªa no est¨¢ decidido), para cumplir con la normativa. Lo que nos lleva a "noviembre de 2020 o incluso marzo de 2021", se?ala Ainoa Santander, abogada de Gaona Abogados BMyV. Una moratoria que ha a?adido cierta confusi¨®n entre los consumidores y las pymes, porque, de facto, la norma est¨¢ en vigor aunque no se vayan a imponer sanciones. Por ejemplo: "Si sufrimos un pago no autorizado, la responsabilidad del consumidor se reduce a los primeros 50 euros gastados, cuando antes eran 150", cuentan en Mycash. ?La moratoria afecta a este derecho si alguien necesita reclamar? "En caso de conflicto, se aplica la directiva", explica Santander.
Hay otros problemas que se?ala Antonio Fagundo, empresario de la firma de zapatos MasAltos. Dice que hay "mucho humo" alrededor de la PSD2, como el que rode¨® a la alerta por el "efecto 2000" o la entrada en vigor de la ley de protecci¨®n de datos. Alerta de las empresas que venden soluciones "supuestamente imprescindibles" y juegan con el desconocimiento de las pymes. "La norma afecta a entidades de cr¨¦dito, entidades de pago, los bancos y tarjetas de cr¨¦dito, entidades de giro postal y dinero electr¨®nico... Tu pasarela de pago tiene que adaptarse a la normativa, pero tu empresa no tiene por qu¨¦ hacer nada", recuerda. Aunque en realidad s¨ª puede: "Puedes adaptar tu negocio y dar un servicio adicional a tus clientes. Que tengan una experiencia de compra mucho mejor, adelant¨¢ndote a otras empresas", dice Fagundo. Por ejemplo, dejando en manos de una fintech el proceso y haciendo que ¨¦sta elabore un perfil sobre los clientes que despu¨¦s podr¨¢ utilizar el comercio para enviar, por ejemplo, ofertas personalizadas.
Esa es otra consecuencia: la banca estar¨¢ obligada a compartir con terceros los datos financieros de los clientes cuando ¨¦stos den permiso, as¨ª que con la PSD2 se ampliar¨¢ el n¨²mero de actores en el mercado y, supuestamente, eso har¨¢ que bajen las comisiones. Carlos Gavil¨¢n, director de desarrollo de negocio de Biometric Vox, es un entusiasta de las nuevas directrices: "Vamos a operar con m¨¢s agilidad y seguridad. El open banking permitir¨¢ que terceros intervengan en los pagos. Y ah¨ª es donde entra la demora anunciada por el Banco de Espa?a. Una tercera pata es que actualiza la norma de 2007, que era un tanto d¨¦bil porque el escenario ha cambiado considerablemente". Muchas empresas como la de Gavil¨¢n, han visto una gran ventana abierta para sus productos. "Se han disparado los fraudes por duplicado de SMS. Los malos han estado especialmente atentos. Pero con los datos biom¨¦tricos es distinto, son mucho m¨¢s seguros. Analizamos par¨¢metros tanto morfol¨®gicos como fon¨¦ticos, un imitador o una grabaci¨®n no enga?a al sistema. El mundo va a ser multifactor, seg¨²n el caso y el usuario el banco te dar¨¢ a elegir c¨®mo te relacionar¨¢s con ¨¦l. Porque no todo el mundo tiene voz o dedos".
Ra¨²l Legaz, director de Biocryptology, tambi¨¦n habla de que est¨¢n surgiendo m¨²ltiples soluciones tecnol¨®gicas. "Nuestra herramienta llev¨® mucho tiempo de desarrollo pero encaja para esta legislaci¨®n". Pero no todas son buenas noticias. "M¨¢s all¨¢ del punto de vista te¨®rico, la realidad del mercado va a ser dura a nivel de seguridad, los hacker est¨¢n cada vez m¨¢s preparados y hay un gran volumen de negocio en juego".
No solo eso. Surgen problemas entre pa¨ªses que s¨ª han empezado a aplicar la PSD2? y otros con moratoria, como indica Jordi Nebot, cofundador de la tecnol¨®gica PaynoPain: "En Suecia ya se esta aplicando plenamente y se han empezado a registrar denegaciones de operaciones. Es uno de los problemas de la moratoria, que cada uno marque sus propias fechas puede provocar un problema de competitividad entre pa¨ªses".
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