La cumbre clim¨¢tica tambi¨¦n es para las empresas
Los grandes grupos se vuelcan en la COP25 y aprovechan que se celebra en Madrid para pedir consenso a los partidos pol¨ªticos
Este lunes comienza en Madrid la Cumbre Mundial del Clima (COP25) que se alargar¨¢ hasta el viernes de la semana que viene. Es decir, 12 d¨ªas que centrar¨¢n la atenci¨®n del planeta. Todos coinciden en que la situaci¨®n es de emergencia clim¨¢tica y obliga a actuar con premura ante lo que es el mayor desaf¨ªo de la civilizaci¨®n junto al cambio a la era digital. En pocas palabras, obliga a todos los Gobiernos a trazar sus sendas de descarbonizaci¨®n hasta 2050.
La Espa?a del minuto 93 de Iv¨¢n Redondo. Iv¨¢n Redondo y Jaume Gir¨® se reunieron el pasado mi¨¦rcoles en Madrid para debatir, cara a cara, sobre la crisis de confianza en las instituciones. Fue una excusa para que el director de Gabinete del presidnete del Gobierno, y hombre al que se atribuye mucho poder, y el dircetor de la Fundaci¨®n La Caixa y del Corporate Excellence-Centre for Reputation Leadership dirimieran tambi¨¦n sobre la actualidad, sobre el futuro del periodismo y los riesgos y oportunidades que plantea la tecnolog¨ªa y el uso de datos. Seg¨²n Redondo, que se mostr¨® optimista ante los desaf¨ªos globales, la sociedad demanda grandes pactos. ¡°Espa?a es muy del minuto 93, siempre pasan cosas¡±, a?adi¨® en referencia a los consensos necesarios que no gustara mucho a los al¨¦ticos. A su juicio, ¡°hay bases muy s¨®lidas para reconstruir la confianza¡± perdida en las instituciones. Para Gir¨®, ¡°el progreso de la ciencia y la tecnolog¨ªa se han puesto por delante del progreso de la ¨¦tica¡±. ¡°S¨®lo con un comportamiento ¨¦tico y coherente se podr¨¢ gestionar la reputaci¨®n y los intangibles de las organizaciones de un modo eficiente y socialmente responsable¡±, complet¨®.
Riesgo de impago de los bonos espa?oles. ¡°Si se produce una nueva recesi¨®n econ¨®mica, como parece, un 40% de las emisiones de bonos (es decir, 6.000 millones de euros) tendr¨ªa un alt¨ªsimo riesgo de impago, con el descalabro sist¨¦mico que esto ocasionar¨ªa, tal y como han advertido algunos organismos internacionales¡±, advirti¨® ?ngel Zamora, socio de Zurbar¨¢n Abogados, en una jornada sobre la deuda de alto riesgo que organiz¨® el jueves el IESE. Zamora, especializado en la recuperaci¨®n de cr¨¦ditos de alto riesgo destacando su labor en la crisis de Abengoa a favor de peque?os bonistas e inversores, acaba de ser nombrado representante en Espa?a de la European Leverage Finance Alliance (ELFA), asociaci¨®n d einversores de alto riesgo que se cre¨® elpasado abril con el objetivo de hacer este mercado m¨¢s transparente y eficiente y con m¨¢s colaboraci¨®n con las instituciones p¨²blicas y privadas.
Las circunstancias han querido que se celebre en Espa?a, donde ha crecido la conciencia de la transici¨®n ecol¨®gica a velocidad vertiginosa. Haber asumido la sede de la cumbre aporta una dosis de compromiso por parte de los agentes sociales y pol¨ªticos que no debe quedarse solo en expectativas. Porque m¨¢s all¨¢ de la visibilidad internacional que supone como anfitri¨®n, Espa?a llega a la cumbre en un momento en el que la adecuaci¨®n legislativa a los pactos de Par¨ªs (COP21, 2015), a la agenda de la ONU 2030 y a los acuerdos de la UE, est¨¢ en ciernes.
Por eso hay que actuar con decisi¨®n avanzada. Y, como cualquier momento es bueno para presionar y pedir consenso, a la cabeza de la manifestaci¨®n se han puesto las grandes empresas, que ven en la COP25 una oportunidad de crecimiento econ¨®mico y para pedir a los grupos pol¨ªticos espa?oles que se esfuercen por conformar un Gobierno estable que ponga en marcha las medidas ya recogidas en el Plan Nacional Integrado de Energ¨ªa y Clima (PNIEC) que el actual Ejecutivo entreg¨® en Bruselas.
Para las empresas, ¡°resulta imprescindible la participaci¨®n del sector p¨²blico con un marco regulatorio, una ley de cambio clim¨¢tico con el mayor consenso posible y que marque el terreno de juego para que las compa?¨ªas sepan por d¨®nde ir y ajustar las inversiones, que elimine riesgos a futuro y permita lanzar nuevas l¨ªneas de negocio de descarbonizaci¨®n¡±. Desde que se supo que Madrid sustituir¨ªa a Santiago de Chile y ante la llamada de la ministra Teresa Ribera, compa?¨ªas y bancos se han agolpado para arrimar el hombro a colaborar como patrocinadores (hay cuatro categor¨ªas: dos millones, uno, 500.000 euros y 125.000 euros) y respaldar parte de los 70 millones a que sube la factura.
A cambio, esperan recibir satisfacciones econ¨®micas a medio y largo plazo. Tradicionalmente, la lucha contra el cambio clim¨¢tico se ha visto como un gasto y no como una inversi¨®n. Ahora, las empresas la han dejado de ver como una desventaja. El PNIEC, por empezar por casa, prev¨¦ mover oportunidades de negocio superiores a los 200.000 millones de euros en la pr¨®xima d¨¦cada. Adem¨¢s, busca reducir la dependencia energ¨¦tica exterior del 74% al 59% y mejorar en 75.000 millones (hasta 2030) la balanza comercial espa?ola. Las empresas est¨¢n convencidas de que, de no aplicar las medidas, las emisiones en 2040 ser¨¢n pr¨¢cticamente las mismas que en 1990, con lo que Espa?a no solo no cumplir¨ªa los compromisos europeos, sino que adem¨¢s su econom¨ªa ser¨ªa cada vez menos competitiva.
Para las compa?¨ªas es imprescindible saber por d¨®nde ir y ajustar las inversiones
Las firmas han dejado de ver la lucha contra el cambio clim¨¢tico como un gasto
Adem¨¢s, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) generar¨¢n nuevas ¡°¨¢reas de actividad¡± equivalentes a 12 veces el PIB de Espa?a, seg¨²n Naciones Unidas. Tampoco son reflactarias a las voces que reclaman una participaci¨®n activa y corresponsable, junto a los pol¨ªticos y otros agentes sociales y econ¨®micos, en la b¨²squeda de soluciones a los retos del cambio clim¨¢tico. Seg¨²n los expertos, entran en juego nuevos desaf¨ªos (polinizaci¨®n de las plantas, tratamiento del agua, control de inundaciones o eliminaci¨®n del CO2 por medios forestales...) cuya resoluci¨®n concebir¨¢ una nueva estructura productiva y servir¨¢ para recuperar sectores en decadencia.
Hay ejemplos de que las empresas se han concienciado, como la participaci¨®n en la Global Compact de Naciones Unidas, que en su red espa?ola agrupa a m¨¢s de 2.500 empresas y que ha establecido objetivos para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5¡ãC por encima de los niveles preindustriales y alcanzar cero emisiones antes de 2050. O la formaci¨®n del Grupo Espa?ol de Crecimiento Verde, que agrupa a medio centenar de las principales empresas.
Tambi¨¦n el Carbon Pricing Leadership Coalition a favor de ¡°pol¨ªticas de precios del carbono estables y a largo plazo¡± que recomienda un precio por tonelada emitida de carbono entre 40 y 80 d¨®lares en 2020. Una actuaci¨®n que algunos empresarios, como Jos¨¦ Manuel Entrecanales, reconoci¨® como muy acertada en el foro empresarial de la Cumbre 2019 de Acci¨®n Clim¨¢tica. ¡°Repercutir el precio del carbono en los costes de las operaciones de una compa?¨ªa, es una de las medidas m¨¢s efectivas contra la emergencia clim¨¢tica¡±, afirm¨® el presidente de Acciona.
La transparencia del gobernador
Pablo Hern¨¢ndez de Cos ha demostrado que ser gobernador del Banco de Espa?a no est¨¢ re?ido con la transparencia informativa con la consecuci¨®n del Premio Tintero que entrega la Asociaci¨®n de Periodistas de Informaci¨®n Econ¨®mica (APIE). Fueron acc¨¦sit Gonzalo Gort¨¢zar (CaixaBank) y Pilar Gonz¨¢lez de Frutos (Unespa). El Secante, por lo contrario, recay¨® en Esther Alcocer Koplowit, que hizo prop¨®sito de enmienda. Los acc¨¦sit secantes fueron para Mariangela Marseglia (Amazon) y Norman Sorensen (Codere), que no acudieron a recoger el premio. Valent¨ªn Pich (Consejo de Economistas) y Pascual Fern¨¢ndez (Colegio de conomistas de Madrid) recibieron el reconocimiento de socios de honor. Para completar y demostrar la transparencia el gobernador se qued¨® a departir un buen rato con los periodistas, que comparaban esa actitud con las de sus tres predecesores.
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