El cierre del tratado de libre comercio da un respiro a la econom¨ªa mexicana

El acuerdo firmado este martes en M¨¦xico m¨¢s que de comercio es un pacto de confianza. Estados Unidos, M¨¦xico y Canad¨¢ sellaron definitivamente el tratado de libre comercio (TMEC) tras a?adir una serie de condiciones ¡ªprincipalmente sobre el terreno laboral¡ª al texto original, redactado en noviembre de 2018. Mientras los mexicanos cedieron a buena parte de las peticiones de Estados Unidos, los estadounidenses prometieron ratificar el tratado antes del 20 de diciembre. El presidente mexicano, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, se ha hecho de una poderosa herramienta para resucitar la econom¨ªa mexicana, que este a?o se ha instalado en la recesi¨®n, mientras el presidente Donald Trump logra una victoria ante los dem¨®cratas al demostrar que ten¨ªa raz¨®n al pedir hace dos a?os y medio la modernizaci¨®n del Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (NAFTA, por sus siglas en ingl¨¦s).

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Las ¨²ltimas horas han sido ag¨®nicas para la diplomacia mexicana. Con el tiempo en su contra, los negociadores han conseguido sortear la pol¨ªtica interna de Estados Unidos: un proceso en curso de juicio pol¨ªtico en contra de Trump; la resistencia natural de los legisladores dem¨®cratas a seguir con el plan; y la presi¨®n de los sindicatos estadounidenses en la v¨ªspera de la campa?a electoral. La ratificaci¨®n del TMEC en EE UU ocurrir¨¢ a unas horas de que comience el receso de Navidad en el Congreso y a unas semanas de que arranque la carrera por la presidencia. Sin las nuevas condiciones, el acuerdo habr¨ªa tenido que esperar, al menos, un a?o m¨¢s para su aprobaci¨®n: un escenario que M¨¦xico no se pod¨ªa permitir.

El nuevo tratado es uno de los est¨ªmulos con los que L¨®pez Obrador cuenta para impulsar la econom¨ªa mexicana. El TMEC abunda sobre la expansi¨®n de una regi¨®n libre de aranceles que comenz¨® en 1994 y adem¨¢s profundiza en la nueva realidad econ¨®mica con nuevas reglas para el comercio electr¨®nico, los servicios financieros y la propiedad intelectual. ¡°Hemos conseguido el mejor acuerdo comercial de la historia¡±, ha presumido el representante de Comercio de EE UU, Robert Lighthizer, en la firma del adendum. Este salvavidas llega para M¨¦xico cuando los ¨²ltimos datos muestran que el PIB cay¨® un 0,1% en el primer semestre del a?o y que la recesi¨®n es una realidad en el pa¨ªs norteamericano. El presidente mexicano ha reforzado la apuesta comercial con un plan de infraestructuras de 42.000 millones de d¨®lares para los pr¨®ximos cinco a?os.

La oportunidad de zanjar de una vez por todas las negociaciones alrededor del TMEC se consolid¨® en esta semana, sin embargo, M¨¦xico emprendi¨® en el ¨²ltimo a?o una reforma laboral para asumir las exigencias de los estadounidenses. Adem¨¢s de cambiar la Ley del Trabajo para mejorar el sistema de justicia laboral y dar independencia a los sindicatos mexicanos, L¨®pez Obrador ofreci¨® aumentar el salario m¨ªnimo un 2% por encima de la inflaci¨®n cada a?o y un presupuesto para implementar la reforma laboral de unos 900 millones de d¨®lares en los pr¨®ximos cuatro a?os. Este martes los negociadores han anunciado que ante la petici¨®n de EE UU de enviar supervisores para observar el cumplimiento de las condiciones en materia laboral ¡ªuna medida considerada como ¡°inaceptable¡± por los mexicanos¡ª, las partes han acordado un sistema de resoluci¨®n de controversias con paneles conformados por expertos de los tres pa¨ªses. Adem¨¢s, M¨¦xico ha aceptado cumplir con un 70% de contenido norteamericano en la producci¨®n de autom¨®viles que ser¨¢ revisada en siete a?os en los componentes de acero y en 10 a?os en el aluminio. Los estadounidenses, por su parte, dejaron de insistir en la protecci¨®n de 10 a?os para las patentes de biomedicamentos.

El triunfo de un acuerdo crucial rescatado a ¨²ltima hora ha sido de un gusto agridulce para los empresarios mexicanos. Aunque una buena parte de ellos acudieron a Palacio Nacional para aplaudir la firma del cierre de la negociaci¨®n, existi¨® una permanente sensaci¨®n de que la premura termin¨® por empujar al Gobierno mexicano a ceder m¨¢s de la cuenta. ¡°Me parece que ha quedado claro que este Gobierno ha sido un mal negociador, hay un claro retroceso en la negociaci¨®n que se hab¨ªa tenido. Se traspasaron muchos de los l¨ªmites donde est¨¢n los intereses del pa¨ªs¡±, ha dicho Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederaci¨®n Patronal de la Rep¨²blica Mexicana (Coparmex). Los empresarios se?alaron que en la horas decisivas no tuvieron acceso a las ¨²ltimas condiciones a negociar. ¡°Se les dio acceso a todo¡±, defendi¨® Jes¨²s Seade, subsecretario para Am¨¦rica del Norte y principal negociador del lado mexicano. ¡°Revisaremos los textos acordados y evaluaremos con todo detalle sus implicaciones para el sector productivo del pa¨ªs¡±, expres¨® el Consejo Coordinador Empresarial en un comunicado.

¡°Cada quien puede decir lo que guste para su p¨²blico pol¨ªtico¡±, dijo Seade para cerrar uno de los episodios m¨¢s convulsos en la historia de los tratados comerciales que comenz¨® con un abrupto anuncio de Trump acusando a M¨¦xico de aprovecharse de la econom¨ªa estadounidense. Seguido de dos a?os y medio de negociaciones turbulentas, atravesadas por procesos electorales en los tres pa¨ªses. El presidente mexicano ha mirado con una sonrisa y al lado del yerno de Trump Jared Kushner el momento en el que los tres negociadores ¡ªLighthizer, Seade y la vice primera ministra canadiense Chrystia Freeland¡ª rubricaron la ¨²ltima p¨¢gina. L¨®pez Obrador, adem¨¢s, se ha apuntado un tanto frente a Estados Unidos. ¡°Hemos seguido su carrera y la encuentro extraordinaria¡±, le ha dicho Lighthizer, el negociador estadounidense. ¡°Eligi¨® el camino dif¨ªcil, nunca se involucr¨® pol¨ªticamente en esto y nos respet¨®¡±, a?adi¨®.