El Banco de Espa?a alerta de que las condiciones laborales de los j¨®venes ya empeoraban antes del coronavirus

El Banco de Espa?a alerta en un informe de que los j¨®venes ya se enfrentaban a un empeoramiento de las condiciones salariales antes de la pandemia del coronavirus. La Gran Recesi¨®n trunc¨® sus perspectivas laborales. Hasta que empez¨® la crisis de 2008, lo normal era que cada nueva generaci¨®n consiguiera ganar m¨¢s que la anterior, en parte porque estaban mejor formados. Sin embargo, en las nuevas generaciones los salarios de los trabajadores m¨¢s cualificados han ido disminuyendo respecto a lo que se cobraba antes. Y las retribuciones de los poco formados han quedado congeladas. Esto se mide seg¨²n el salario mensual medio cobrado en t¨¦rminos reales, es decir, una vez restada la inflaci¨®n para conocer as¨ª cu¨¢l es el verdadero poder adquisitivo. Si adem¨¢s se examina qu¨¦ ha ocurrido con las horas trabajadas, entonces la conclusi¨®n es que las rentas laborales anuales han disminuido para todos, los formados y los no formados, debido a la evoluci¨®n de la econom¨ªa. Y han ca¨ªdo en mayor medida para los trabajadores j¨®venes con estudios bajos, que han estado m¨¢s lastrados por el paro, la rotaci¨®n entre puestos de trabajo y las jornadas por horas. Esas son las principales conclusiones de un estudio que ha realizado el Banco de Espa?a sobre la evoluci¨®n de los sueldos por generaciones y que ya hab¨ªa adelantado EL PA?S.

Pero el informe va m¨¢s all¨¢. Sostiene que adem¨¢s de la crisis hay otros motivos que tambi¨¦n est¨¢n influyendo: ¡°El fen¨®meno de salarios medios m¨¢s bajos observado tras la crisis financiera para las generaciones m¨¢s recientes podr¨ªa obedecer no a causas relacionadas principalmente con la posici¨®n c¨ªclica de la econom¨ªa, sino a factores de naturaleza estructural y, por tanto, tendr¨ªan un car¨¢cter m¨¢s permanente¡±. O lo que es lo mismo: el banco ha seguido a lo largo del tiempo cu¨¢l es la trayectoria de los salarios, y concluye que tambi¨¦n se est¨¢n resintiendo al margen de crisis econ¨®micas.

Aunque las generaciones j¨®venes se enfrentan a una temporalidad ligeramente inferior a las previas, quienes permanecen en contratos temporales sufren una mayor rotaci¨®n. La duraci¨®n de sus contratos ha ido bajando ¡°de forma tendencial¡± hasta situarse en el entorno de los 3 meses para los poco formados y los cinco o seis meses para los m¨¢s cualificados. Adem¨¢s, el trabajo a tiempo parcial ha aumentado, en buena medida de forma involuntaria y sobre todo para los j¨®venes con estudios medios y bajos. Es decir, la precariedad es mayor para un grupo concentrado de j¨®venes. Incluso soportando una temporalidad un poco menor, sus condiciones laborales son peores. ¡°La precariedad es relevante, ya que la incertidumbre asociada a percibir una misma cuant¨ªa de renta es muy diferente si se percibe de forma estable que si se hace de modo irregular¡±, recuerda el documento.

El estudio detecta que ya antes de la crisis de 2008 hab¨ªa peque?as bajadas del sueldo medio en los trabajadores m¨¢s cualificados. As¨ª que existe una tendencia de fondo que no se achaca a la coyuntura econ¨®mica. Dice que tambi¨¦n ha podido influir en la marcha de los salarios que hubiese un incremento de la oferta de trabajadores formados sin que haya aumentado la demanda. Y a?ade que hay dudas sobre si las habilidades que poseen los trabajadores cualificados, tanto en su formaci¨®n como en su experiencia laboral, son acordes con las que se piden para los puestos de trabajo.

En cuanto a los j¨®venes con menor formaci¨®n, la automatizaci¨®n de tareas puede afectar a sus empleos y empeorar sus perspectivas laborales, se?ala el organismo supervisor. En general, la tecnolog¨ªa ha propiciado unas nuevas formas de trabajar que pueden estar precarizando el empleo de los j¨®venes con estudios bajos en una fase que es decisiva para determinar su desarrollo posterior. Y a este c¨®ctel se une ahora la crisis inducida por la covid-19.

La recesi¨®n de 2008 provoc¨® que los salarios dejasen de crecer con la misma intensidad que antes seg¨²n se acumulaba mayor experiencia. Eso hizo que un trabajador nacido en 1977 recibiera un salario medio a los 40 a?os, diez a?os despu¨¦s del comienzo de la crisis, inferior al que percib¨ªa a esa misma edad alguien nacido en 1967. Los ocupados con estudios bajos nacidos en 1977 ganaban a los 30 a?os mucho m¨¢s que los nacidos en 1967 cuando ten¨ªan la misma edad. Sin embargo, diez a?os despu¨¦s esos mismos trabajadores cobraban algo menos que los de la generaci¨®n precedente con los mismos a?os.

Pero incluso si se hace el mismo an¨¢lisis intentando eliminar el efecto de la crisis, el resultado es similar y por tanto sugiere que ¡°estas diferencias se habr¨ªan mantenido durante la reciente fase de recuperaci¨®n¡±, apunta el Banco de Espa?a. Justo antes de la anterior crisis ya se percib¨ªan peque?as bajadas en los trabajadores de mediana edad m¨¢s cualificados. Y solo ligeras subidas en los j¨®venes menos formados. O dicho de otro modo: parece que esta tendencia pudiera venir en parte de antes.

Si se atiende solo a lo que ha pasado con las rentas medias anuales, entonces el impacto de la crisis es mucho mayor debido al desempleo y las menores horas trabajadas. Con datos de la Seguridad Social de los ¨²ltimos 30 a?os, el estudio observa que cada nueva generaci¨®n fue siempre superando los ingresos laborales de las anteriores, en parte por la mejora educativa y en parte por el aumento de rentas en los colectivos con menores estudios. Incluso se aprecia que la recesi¨®n de los noventa apenas se not¨®. Sin embargo, esta trayectoria se quebr¨® con la pasada crisis. Entonces todos los grupos vieron c¨®mo se redujeron sus retribuciones anuales. Pero hay uno que lo padeci¨® con mayor crudeza: los j¨®venes. Y entre ellos el colectivo de los menos formados fue el que sufri¨® la mayor ca¨ªda en sus rentas anuales por una mayor tasa de paro y unas menores horas trabajadas. Los nacidos en 1987 con pocos estudios consiguen, en promedio, cerca de un 25% menos de ingresos laborales que aquellos que ten¨ªan 30 a?os en la anterior d¨¦cada. Y eso ocurre por primera vez en tres d¨¦cadas. Los episodios de desempleo en una fase temprana pueden adem¨¢s perjudicar el futuro de la carrera laboral, explica el Banco de Espa?a.