El virus amenaza con infectar al hierro

El mineral de hierro vive un momento ¨¢lgido. Despu¨¦s de haber surcado con cierta estabilidad el confinamiento mundial, el precio de este material ha empezado a escalar en los mercados ante los temores de un d¨¦ficit. El epicentro de esta subida est¨¢ en Brasil, el segundo productor mundial (con un 23% de cuota), que se ha visto forzado a meter el freno en una de sus principales minas, despu¨¦s de que 188 trabajadores dieran positivo por coronavirus. El asunto no es menor. El metal es un elemento cr¨ªtico para el desarrollo econ¨®mico. Combinado con un poco de carbono da vida a uno de los materiales m¨¢s usados en el mundo: el acero, clave en la producci¨®n de coches, en la construcci¨®n de infraestructuras y en la elaboraci¨®n de aparatos m¨¦dicos, armas, utensilios de cocina, dispositivos tecnol¨®gicos y un sinf¨ªn de cosas.

La tonelada de mineral de hierro se vende por encima de los 100 d¨®lares (88 euros, al tipo de cambio actual), su mayor nivel en los ¨²ltimos 10 meses. Durante el punto ¨¢lgido del confinamiento, su valor se mantuvo en torno a los 80 d¨®lares (71 euros), mientras otras materias primas (como el petr¨®leo o el oro) se sumergieron en un sube y baja. La raz¨®n de esa estabilidad est¨¢ en la industria del acero, que no se detuvo. ¡°Las sider¨²rgicas chinas, en su mayor¨ªa, continuaron operando durante el periodo de cierre, aunque a tasas m¨¢s bajas en algunos casos¡±, dice Julien Hall, director de an¨¢lisis de metales para Asia de S&P Global Platts. Ello provoc¨® que los precios de las barras de acero reforzado cayeran a su nivel m¨ªnimo desde 2017, mientras que los inventarios sub¨ªan hasta llegar a m¨¢ximos en casi dos a?os.

El escenario cambi¨® radicalmente. A principios de junio un tribunal brasile?o orden¨® a la empresa Vale, la mayor productora del material en el globo, a detener su actividad en el complejo minero en Itabira (Minas Gerais, al sureste del pa¨ªs). El par¨®n, seg¨²n los expertos consultados, eliminar¨ªa aproximadamente un 10% de la producci¨®n de la compa?¨ªa, que a¨²n no se ha recuperado. ¡°Los recientes cierres relacionados con el virus han disparado las alarmas porque el suministro de Brasil ya se hab¨ªa visto gravemente afectado por las lluvias monz¨®nicas a principios de este a?o¡±, comenta Hall. ¡°Cualquier cambio impacta directamente en los precios¡±, abunda Lucas Carvalho, analista en Toro Inversiones

El cierre de minas en Brasil podr¨ªa ir a m¨¢s. ¡°La producci¨®n de mineral de hierro de Vale se concentra en Minas Gerais y Par¨¢ [en el norte], este ¨²ltimo registra el cuarto n¨²mero m¨¢s alto de casos entre todos los Estados¡±, afirma Tracy Liao, analista del Citibank. Los pron¨®sticos apuntan a que este a?o las exportaciones del mineral brasile?o podr¨ªan caer un 4%, despu¨¦s de que en 2019 descendieron un 13%, seg¨²n los datos de la consultora Wood Mackenzie. En tanto, los mercados se llenan de incertidumbre ante la demanda creciente de China.

El gigante asi¨¢tico necesita de este elemento para echar adelante sus grandes proyectos de construcci¨®n y obras de infraestructura. China usa el mineral para crear acero. ¡°Fue el primer pa¨ªs en salir del confinamiento, un hecho que lo coloca en una etapa diferente en relaci¨®n con la actividad econ¨®mica¡±, argumenta Carvalho. El gran beneficiado de todo esto es uno de sus principales proveedores: Australia, que tiene en su poder el 58% de la extracci¨®n global del mineral de hierro. La relaci¨®n entre Canberra y Pek¨ªn, sin embargo, no atraviesa por el mejor de los momentos. Australia ha demandado una investigaci¨®n sobre el origen de la covid-19, como lo han hecho otras naciones y, a cambio, ha recibido una reprimenda de China: ha suspendido algunas importaciones como la carne vacuna y ha impuesto aranceles a la cebada.

Pero su v¨ªnculo con el mineral de hierro es ¨²nico. Alrededor de dos tercios de las importaciones que hace China provienen de Australia, y ese suministro representa la mitad de todo el mineral que consume. ¡°Cualquier tipo de imposici¨®n o restricci¨®n en el comercio perjudicar¨ªa a los productores chinos de acero, justo cuando el Gobierno dirige sus est¨ªmulos a la construcci¨®n e infraestructuras¡±, dice Thompson. Pero es improbable que los suministros se vean afectados por la disputa, argumenta Carsten Menke, analista del banco suizo Julius Baer, en un an¨¢lisis. ¡°Simplemente no hay otro productor que proporcione al gigante de Asia los mismos vol¨²menes que demanda¡±, destaca.