Solo el 5% de los afectados por ERTE perdi¨® el trabajo, seg¨²n la Seguridad Social

Una de las inc¨®gnitas que queda por despejar del impacto del coronavirus es el n¨²mero de afectados por ERTE que mantendr¨¢ su empleo cuando la medida extraordinaria decaiga. Por ahora algo m¨¢s del 5% de los afectados por los expedientes de fuerza mayor ¡ªla mayor¨ªa de los que se aplicaron durante el estado de alarma¡ª ya habr¨ªa perdido el trabajo, seg¨²n ha cifrado este martes ayer el n¨²mero dos de la Seguridad Social, Israel Arroyo. Este es un dato provisional, todav¨ªa hay cerca de 1,2 millones de trabajadores con el contrato suspendido o la jornada reducida.

Los expedientes de regulaci¨®n temporal de empleo (ERTE) han sido la medida estrella del Ejecutivo para proteger el empleo durante la pandemia. Llegaron a afectar a m¨¢s de 3,4 millones de trabajadores que vieron su empleo suspendido o con la jornada reducida a finales de abril y comienzos de mayo. De ellos, la inmensa mayor¨ªa ¡ªen torno al 90%¡ª estaban en la modalidad provocada por una fuerza mayor, causada directamente por las restricciones del estado de alarma.

Saber cu¨¢ntos de los afectados van reincorpor¨¢ndose al puesto de trabajo es clave para valorar tanto el calado de la recuperaci¨®n como el ¨¦xito de la medida. Seg¨²n los datos que ha dado la Seguridad Social, ya habr¨ªan salido de los ERTE por fuerza mayor algo m¨¢s del 70% de trabajadores afectados el 5 de mayo. Y, de esos 70 puntos porcentuales, unos 60 habr¨ªan vuelto a su empleo.

Los 10 puntos restantes se dividen entre los que han vuelto a trabajar pero a un puesto en otro centro de trabajo de la misma empresa (por ejemplo, en una cadena hotelera un establecimiento distinto del habitual); los que se han jubilado; los despedidos que han vuelto a trabajar; y, por supuesto, los despedidos que siguen en paro. Este ¨²ltimo grupo supondr¨ªa unos cinco puntos o algo m¨¢s, seg¨²n ha aproximado el secretario de Estado, Israel Arroyo.

Esta cifra es muy pr¨®xima a la que dio el m¨¢ximo responsable del departamento, el ministro Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, el pasado 15 de julio, que precis¨® en Twitter que alcanzaban el 6,1%, es decir, unas 180.000 personas.

La clave, a partir de ahora, estar¨¢ en ver cu¨¢ntos de los casi 1,2 millones de trabajadores que todav¨ªa est¨¢n afectados regresan a sus puestos de trabajo o, al menos, mantienen el empleo. Tambi¨¦n servir¨¢ para conocer la magnitud final del golpe en el turismo, el comercio o el transporte, sectores que a¨²n tienen a centenares de miles de trabajadores afectados (solo en servicios de alojamiento y de comida hay unos 350.000) y en comunidades como Baleares y Canarias.

No se salvar¨¢n todos. Eso parece claro, aunque para conocer la cifra definitiva debe pasar tiempo y aclararse qu¨¦ pasar¨¢ con la regulaci¨®n especial de los ERTE. Ahora hay una pr¨®rroga hasta el 30 de septiembre y la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, ya ha declarado que el mecanismo funciona y no ve raz¨®n alguna para dejarlo caer. Sin embargo, ya se oyen voces que piden ser m¨¢s selectivos con las ayudas. Una de ellas es la del gobernador del Banco de Espa?a, Pablo Hern¨¢ndez de Cos. ?l argumenta que en los primeros compases de la crisis hab¨ªa que aprobar un plan de ayudas masivas para evitar el hundimiento sin remedio de la econom¨ªa. Pero ahora se debe mantener las ayudas con matices. Las pol¨ªticas que se desplieguen deben ser m¨¢s quir¨²rgicas para no sostener artificialmente ¡°empresas y sectores zombie¡± y dar paso al ajuste propio de toda crisis, sostiene Hern¨¢ndez de Cos.

Hasta julio, el gasto en las prestaciones extraordinarias de los ERTE habr¨ªa ascendido a m¨¢s de 9.000 millones. Esta cifra sale de sumar al desembolso ya conocido ¡ª8.097 millones entre abril y junio¡ª los 1.000 millones del mes pasado que estim¨® ayer el secretario de Estado de Empleo, Joaqu¨ªn P¨¦rez Rey. Este dato no recoge todo el esfuerzo presupuestario: falta lo no ingresado por las exenciones en las cotizaciones.