El recorte de inversiones pone en peligro el plan de S¨¢nchez para digitalizar Espa?a
Las operadoras reducen m¨¢s de un 20% los fondos para el despliegue de nuevas redes de fibra y 5G acosadas por la crisis y la ca¨ªda de ingresos
El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, anunciaba el pasado 23 de julio un ambicioso plan bautizado como agenda Espa?a Digital 2025, que pretende movilizar 140.000 millones para la completa ¡°digitalizaci¨®n¡± del pa¨ªs en los pr¨®ximos cinco a?os. De ellos, 70.000 millones se aportar¨¢n en los tres primeros ejercicios, correspondiendo 20.000 millones a inversiones p¨²blicas que proceder¨¢n en la mayor¨ªa de las ayudas de la Uni¨®n Europea, y los otros 50.000 millones de inversiones privadas.
Siendo discutible la disponibilidad de fondos p¨²blicos para redes de telecomunicaciones en un pa¨ªs como Espa?a que, debido a la pandemia, destina mensualmente 14.000 millones de euros a pagar pensiones y prestaciones de desempleo, el protagonismo que se concede a las empresas privadas en la financiaci¨®n de ese plan choca con la salud financiera de estas a la luz de los ¨²ltimos datos. Y es que las cuatro grandes operadoras nacionales (Telef¨®nica, Orange, Vodafone y M¨¢sM¨®vil) no solo no est¨¢n aumentando sus inversiones sino que las han tenido que recortar dr¨¢sticamente. En concreto, todos ellos las han reducido m¨¢s del 20% en el primer semestre de este a?o, y los planes para el futuro van en esa misma l¨ªnea restrictiva, aunque oficialmente se insista en el mensaje de la importancia de extender las redes de fibra ¨®ptica y de telefon¨ªa m¨®vil 5G para la recuperaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs.
Pese a que las redes de telecomunicaciones han registrado m¨¢s tr¨¢fico que nunca por el confinamiento, ese incremento no se ha traducido en mayores ingresos para las compa?¨ªas. Al contrario, salvo M¨¢sM¨®vil, que sigue arrebatando clientes a sus rivales gracias a su oferta low cost, los otros tres operadores sufrieron fuertes descensos de facturaci¨®n en el segundo trimestre. Y todos ellos admiten que la crisis econ¨®mica provocada por la pandemia ha disparado los impagos y provocado que las familias migren a paquetes de servicios (tel¨¦fono fijo, m¨®vil e Internet) m¨¢s asequibles o de bajo coste, lo que seguir¨¢ minando sus ingresos en el futuro m¨¢s cercano. La consecuencia es que si la facturaci¨®n no sube la ¨²nica forma de cuadrar las cuentas es recortar los costes y la inversi¨®n.
Y as¨ª est¨¢ sucediendo. Telef¨®nica de Espa?a redujo sus inversiones (capex) un 20,8% en el primer semestre hasta los 649 millones; Orange Espa?a invirti¨® un 26% menos hasta los 392 millones; M¨¢sM¨®vil recort¨® las suyas un 26,1% hasta los 185 millones en el mismo periodo. Vodafone Espa?a, con distinto calendario fiscal, no ha facilitado este dato pero las estimaciones del mercado apuntan en el mismo sentido. No en vano ha sido el operador que ha sufrido la mayor p¨¦rdida de ingresos en el segundo trimestre.
Los presidentes de las operadoras, que arroparon a S¨¢nchez en La Moncloa en la presentaci¨®n de la Agenda Digital 2025, cierran filas p¨²blicamente en torno a la importancia de la digitalizaci¨®n para la reconstrucci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs. El presidente de Telef¨®nica, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez Pallete, ha ido m¨¢s all¨¢ y ha planteado un pacto digital comprometi¨¦ndose a llevar la fibra ¨®ptica a todo el pa¨ªs antes de 2025. No ser¨¢ f¨¢cil. Actualmente, hay 31 millones de unidades inmobiliarias (hogares, locales comerciales y oficinas) en Espa?a. Y aunque solo 10,2 millones de clientes la tienen contratada, la red de fibra ¨®ptica de los cuatro operadores llega ya a 54 millones de hogares, porque a muchos de ellos llegan las de varias compa?¨ªas siendo con diferencia la m¨¢s extensa de Europa. El problema es que las compa?¨ªas se pelean por los clientes m¨¢s rentables, los de ciudades con mayor densidad de poblaci¨®n o las zonas industriales, que tienen varias ofertas donde elegir al estar las redes duplicadas. Por el contrario, existen alrededor de seis millones de hogares, fundamentalmente en zonas rurales, adonde no llega ning¨²n acceso a Internet por fibra porque no resulta rentable su despliegue. Y, en plena crisis, supone un reto para las compa?¨ªas desviar inversiones hacia esos territorios sabiendo que no se van a recuperar ni a corto ni a medio plazo. Solo con fondos p¨²blicos se podr¨ªa conseguir el objetivo.
Retraso del 5G
El otro gran cap¨ªtulo del plan de digitalizaci¨®n es la puesta en marcha del 5G, la quinta generaci¨®n de la telefon¨ªa m¨®vil llamada a revolucionar el mundo de las comunicaciones por su velocidad de descarga, la capacidad para mantener un gran n¨²mero de dispositivos conectados al mismo tiempo y su corto tiempo de respuesta (latencia) que permitir¨¢ aplicaciones como la conducci¨®n aut¨®noma sin conductor.
Vodafone fue pionera en comercializar los servicios 5G en el mercado espa?ol en junio de 2019 y actualmente lo presta parcialmente en 21 ciudades. Orange tiene previsto arrancar en la primera quincena de septiembre en cinco grandes ciudades (Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y M¨¢laga), un lanzamiento simult¨¢neo al que realizar¨¢ M¨¢sM¨®vil puesto que tiene un acuerdo para usar la red del operador franc¨¦s. Movistar no ha revelado sus planes pero su estreno en 5G se producir¨¢ antes de que acabe el a?o.
De todas formas, se trata de un lanzamiento m¨¢s testimonial y de cara al marketing que real. En primer lugar, porque la cobertura no llega ni al 10% de la poblaci¨®n total; en segundo t¨¦rmino, porque los servicios se dan sobre la banda de frecuencias de 3,7 gigahercios (GHz) que apenas tiene penetraci¨®n en interiores; y, sobre todo, porque se trata de una tecnolog¨ªa intermedia que, en realidad, es una evoluci¨®n del actual 4G. Se la conoce como 5G NSA (Non-Standalone o 5G no aut¨®nomo) y no proporciona gran parte de las especificaciones del 5G SA (Standalone o 5G completo).
Para disfrutar del 5G con toda su capacidad habr¨¢ que esperar a la subasta de la banda de 700 MHz que el Gobierno tiene previsto lanzar en el primer trimestre de 2021. Aunque tanto el anterior Ejecutivo del PP como el actual de PSOE-Podemos han dicho que no tienen un af¨¢n recaudatorio, ser¨¢ dif¨ªcil que con un d¨¦ficit p¨²blico desbocado, Hacienda no tenga la tentaci¨®n de arrancar un buen pellizco a las compa?¨ªas. Estas ya pagaron 438 millones de euros por la banda de entre 3,6 y 3,8 GHz, por lo que se estima que la de 700 MHz estar¨¢ entre los 3.000 y 5.000 millones, seg¨²n fuentes del sector. Un fuerte desembolso para unas frecuencias que hasta ahora han sido ocupadas completamente gratis por las cadenas de televisi¨®n tanto p¨²blicas como privadas, a las que adem¨¢s el Gobierno subvenciona la migraci¨®n.
Ese nuevo tributo ¨Caunque en los balances aparezca como inversi¨®n- llega en el peor momento para las compa?¨ªas. Cuanto m¨¢s abonen al Estado por las frecuencias, menos fondos tendr¨¢n para el despliegue de las antenas y las estaciones base que necesita el 5G. El presidente de Vodafone, Antonio Coimbra, estima que asegurar cobertura 5G a todas las empresas y hogares tendr¨ªa un coste estimado para el sector de 5.000 millones, cifra que podr¨ªa elevarse a 10.000 millones incluyendo casos de uso como el coche conectado.
As¨ª que la previsi¨®n de que el 5G est¨¦ disponible para la mitad de la poblaci¨®n el pr¨®ximo a?o se antoja una quimera. Los expertos apuntan en que, el nuevo escenario de crisis por la pandemia, el 5G no estar¨¢ disponible para la mayor¨ªa de los 50 millones de l¨ªneas que hay en Espa?a al menos hasta bien entrado 2022 o incluso 2023.
El temor com¨²n al ¡°af¨¢n recaudatorio¡±
Las cuatro grandes compa?¨ªas se preparan para participar en la subasta de frecuencias de comienzos de 2021. Aunque rivales en el proceso, tienen un objetivo com¨²n: pagar lo menos posible. El temor al ¡°af¨¢n recaudatorio¡± del Estado les une.
¡°Todav¨ªa se desconocen los t¨¦rminos de la subasta, la tasa del espectro aplicable o las obligaciones de cobertura asociadas, por lo que no resulta posible establecer una valoraci¨®n. En cualquier caso, si todos los factores anteriores se mantienen en t¨¦rminos razonables, la adquisici¨®n del espectro no supondr¨¢ una merma de la inversi¨®n en 5G¡±, apuntan desde Telef¨®nica.
Un mensaje muy similar al que indican desde Orange: ¡°El Gobierno ha repetido en distintas ocasiones que no tendr¨¢ un af¨¢n recaudatorio y confiamos en que as¨ª sea, con el fin de promover las inversiones e impulsar la digitalizaci¨®n, uno de los pilares estrat¨¦gicos para la recuperaci¨®n del pa¨ªs¡±.
¡°Esperamos que la subasta prime las obligaciones de cobertura y calidad de servicio de los operadores y valore el esfuerzo inversor de desplegar redes 5G potentes, que permitan a Espa?a seguir a la cabeza en el ¨¢mbito de las redes de telecomunicaciones, frente al af¨¢n recaudatorio que podr¨ªa penalizar o poner en riesgo futuros despliegues¡±, precisan desde Vodafone.
Por su parte, desde M¨¢sM¨®vil se?alan que participar¨¢n ¡°en ese proceso en caso de que se den unas condiciones razonables que nos permitan tener opciones reales de obtener parte de ese espectro a un coste razonable para un cuarto operador¡±.
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