Espa?a ofrece menos l¨ªneas de avales que los grandes pa¨ªses europeos, pero logra una mayor demanda

¡°La respuesta fiscal global a la pandemia no tiene precedentes¡±. Esta frase encabeza la parte que el Fondo Monetario Internacional (FMI) dedica, en su informe sobre fiscalidad, a las pol¨ªticas impulsadas por los Gobiernos para luchar contra la crisis. Entre estas destacan los pr¨¦stamos garantizados con avales p¨²blicos que, en mayor o menos medida, los pa¨ªses m¨¢s industrializados han puesto a disposici¨®n de las empresas para evitar su colapso. El objetivo es impedir que una crisis que comenz¨® como de falta de liquidez por el par¨®n de la econom¨ªa vaya a m¨¢s y derive en una falta de solvencia por la incapacidad de las empresas para sobrevivir.

Pero la respuesta tambi¨¦n ha variado de pa¨ªs a pa¨ªs. Seg¨²n la comparativa que el FMI publica este mi¨¦rcoles entre las cinco grandes econom¨ªas europeas, Espa?a ha sido la que menos cantidad de cr¨¦dito garantizado ha ofrecido pero la que ha ejecutado una parte mayor. Destaca Alemania (con unos 750.000 millones de ayudas p¨²blicas) y le siguen el Reino Unido, Francia e Italia (todos ellos con entre 300.000 y 400.000 millones). Despu¨¦s viene Espa?a, con una cantidad cercana a los 200.000 millones.

Sin embargo, al analizar el grado de ejecuci¨®n de estos pr¨¦stamos el orden se invierte: Espa?a ha logrado comprometer el 46% de las ayudas, frente a un 36% de Francia, un 18% del Reino Unido, un 17% de Francia y tan solo un 5% de Alemania. El pasado mes de agosto, las empresas espa?olas hab¨ªan recibido casi 100.000 millones de euros de liquidez por parte de los pr¨¦stamos avalados por el ICO. De estas ayudas, el 15% hab¨ªa ido a parar a las empresas de turismo, ocio y cultura.

La vicepresidenta de Asuntos Econ¨®micos, Nadia Calvi?o, defendi¨® este mismo mi¨¦rcoles la eficacia del programa de avales p¨²blicos puesto en marcha por el Gobierno para proteger el tejido empresarial. Y a?adi¨® que este plan se mantendr¨¢ los pr¨®ximos meses, reforzando los elementos enfocados a la solvencia para que las empresas viables puedan seguir con su actividad.

El Fondo se fija en el escaso grado de ejecuci¨®n de estas ayudas en los grandes pa¨ªses europeos. Y halla dos respuestas fundamentales. Por una parte, asegura que esto se puede deber a las capacidades de la administraci¨®n para conceder los cr¨¦ditos o a las restricciones dise?adas en los programas p¨²blicos. Pero esta escasa incidencia se explica tambi¨¦n por la escasa demanda de las propias empresas, que pueden contar con colchones de liquidez suficientes en los sectores menos afectados por la crisis y la existencia de otros programas de ayuda gubernamentales, como los subsidios o los mecanismos de protecci¨®n del empleo como los ERTE en Espa?a, el kurzarbeit en Alemania, los furlough en Reino Unido, el ch?mage partiel en Francia o la cassa integrazione guadagni en Italia.

Otros motivos para este reducido impacto podr¨ªan ser el exceso de deuda que ya acarrean las empresas y la elevada incertidumbre en torno a las perspectivas econ¨®micas, seg¨²n los expertos del Fondo.

El FMI no se fija solo en las l¨ªneas de liquidez desplegadas por los Estados. ¡°En casi todas las econom¨ªas europeas las ayudas al empleo y los salarios subsidiados han ayudado a preservar los puestos de trabajo y el nivel de vida de los ciudadanos, las transferencias de dinero en efectivo han sido especialmente ¨²tiles para apoyar a los trabajadores pobres y a los empleados en la econom¨ªa informal que se han quedado sin empleo. Las medidas de liquidez para las empresas han evitado una oleada de quiebras y de despidos masivos. Esto es especialmente importante para las peque?as y medianas empresas que suponen una gran parte del tejido productivo¡±, asegura V¨ªtor Gaspar, director del Departamento de Asuntos Fiscales en la entrada del blog del FMI que acompa?a a la publicaci¨®n de su informe fiscal semestral.