La banca teme que un nuevo cambio contable corte el grifo del cr¨¦dito

Hace unas semanas, las entidades financieras recibieron una nota de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en ingl¨¦s) que les anunciaba que se acababan las medidas contables excepcionales decretadas en marzo por la pandemia. A partir de octubre, los clientes que impagaran un cr¨¦dito deb¨ªan ser considerados morosos y, por lo tanto, los bancos deber¨ªan provisionar el importe correspondiente contra sus cuentas de resultados.

Hasta entonces, los bancos, junto con el Gobierno, establecieron moratorias en los cr¨¦ditos que permit¨ªan carencias ¡ªes decir, les permit¨ªan retrasar pagos¡ª de los intereses o del principal sin que la EBA exigiera que se consideraran morosos. Muchos de estos cr¨¦ditos est¨¢n asociados a las l¨ªneas ICO desplegadas por el Gobierno en lo peor de la pandemia para ayudar a las empresas con problemas durante el confinamiento. Pero estas moratorias empiezan a caducar a partir de marzo de 2021 y el sector teme que no podr¨¢ renovarlas en las condiciones favorables lo que podr¨ªa llevar a un cierre del cr¨¦dito y a la ca¨ªda de miles de empresas. Las entidades podr¨ªan iniciar procesos de ejecuci¨®n de las deudas, con lo que llevar¨ªan a concurso a muchas empresas, algunas de ellas solventes pero con problemas temporales por la covid-19.

Algunas entidades explican que hubo clientes que no quisieron pedir los cr¨¦ditos con avales antes del verano confiadas en su capacidad de aguante y la recuperaci¨®n de la econom¨ªa en oto?o. Ahora, con la segunda ola de contagios, se acercan a su banco para pedirlos. ¡°Por desgracia, las entidades somos m¨¢s reticentes a prestar por la gran incertidumbre en la que nos encontramos y la nueva norma contable¡±, indica un directivo bancario que pide el anonimato.

Los bancos est¨¢n trabajando de manera coordinada con el Tesoro y el Ministerio de Asuntos Econ¨®micos, dirigido por Nadia Calvi?o, seg¨²n diferentes fuentes financieras consultadas. Consultadas tanto la patronal Asociaci¨®n Espa?ola de Banca (AEB) como la patronal de las antiguas cajas de ahorro (CECA) prefirieron no hacer comentarios.

El sector recurre a Oliver Wyman

Ante esta situaci¨®n, la AEB y la CECA han contratado al consultor internacional Oliver Wyman para que les presente los cambios legislativos que se deber¨ªan hacer en Espa?a, y ante la Comisi¨®n Europea, para evitar esta situaci¨®n. Se trata de saber si la prolongaci¨®n en el tiempo de alguna norma publicada en marzo o abril podr¨ªa ser ¨²til para dar continuidad a las moratorias en las condiciones contables anteriores a octubre. Se trata de evitar un efecto ¡°acantilado¡±, es decir, un corte brusco de las moratorias.

Adem¨¢s, Oliver Wyman tiene otro cometido: preparar una metodolog¨ªa que sirva a los bancos para identificar las empresas viables de las que ya no lo son o, en el futuro, no lo ser¨¢n por la crisis de la covid-19. Se trata de establecer pautas que arrojen luz para conocer los sectores mejores y peores, la tipolog¨ªa de las empresas m¨¢s preparadas para el futuro, y as¨ª discriminar a las que tienen menos posibilidades de cerrar.

El Banco de Espa?a, a trav¨¦s del gobernador, Pablo Hern¨¢ndez de Cos, ha insistido al sector financiero en que debe seguir apoyando al tejido productivo pero centr¨¢ndose en las empresas que sobrevivir¨¢n a la pandemia y no a las que ya son zombis. Por eso, el supervisor ve con buenos ojos las iniciativas de este tipo.

Hasta ahora, las entidades han elevado con fuerza el cr¨¦dito con el que las empresas y particulares han hecho frente a las deudas surgidas por la crisis de la pandemia. Pero el rebrote de la segunda oleada de contagios, unido a la rigidez de la normativa contable de la EBA, puede cambiar todo el panorama. ¡°Esto es lo contrario que se pretend¨ªa con las moratorias del Gobierno, a trav¨¦s del ICO, y las que lanzamos nosotros como sector", indica un directivo de un gran banco que pide el anonimato, ¡°pero nadie previ¨® que la situaci¨®n fuera a alargarse tanto tiempo¡±.

Los responsables de riesgos admiten su desconcierto. "La incertidumbre y la volatilidad es enorme en el mercado porque todo depende de la aparici¨®n de la vacuna y la evoluci¨®n de la situaci¨®n sanitaria, que es incierta. Nosotros no somos epidemi¨®logos ni los tenemos en los equipos del banco. Es cierto que debemos distinguir las empresas solventes, con problemas temporales, de las que ya no tienen soluci¨®n, pero es dif¨ªcil ahora y pueden pagar justos por pecadores¡±, concluye.

Entre las soluciones que baraja el sector ahora est¨¢ alargar las carencias del principal, pero no de los intereses, que tiene un tratamiento contable menos punible, o entrar en el capital de algunas empresas para facilitarles ox¨ªgeno durante un tiempo. En este caso, el Banco de Espa?a se ha manifestado m¨¢s favorable de que sea el Gobierno el que protagonice estas entradas, con veh¨ªculos como el fondo creado en julio con 10.000 millones, centrado, por ahora, en aerol¨ªneas y otras empresas tur¨ªsticas.

Evitar que se oculten los morosos

Pero cada autoridad mira por sus riesgos. La EBA quiere evitar un exceso de laxitud en los bancos que les haga refinanciar a empresas insolventes, con lo que ocultan morosidad en los balances, que podr¨ªa salir a flote m¨¢s adelante ocasionando problemas de solvencia. Esta situaci¨®n se dio con frecuencia en la crisis anterior.

En la nota enviada a los bancos, la EBA, dirigida por el espa?ol Jos¨¦ Manuel Campa, dijo que las medidas anteriores ¡°ya han proporcionado la flexibilidad necesaria y la certeza sobre el marco regulatorio, a la luz de la cantidad significativa de acciones tomadas por los bancos para apoyar a sus clientes. La moratoria de pago ha sido una herramienta eficaz para abordar los desaf¨ªos de liquidez a corto plazo causados por la pandemia de la covid-19¡å.

Record¨® que dependiendo de la duraci¨®n de las pr¨®rrogas de pago, ¡°que en Europa ha sido de media entre 6 y 12 meses, la moratoria seguir¨¢ produciendo sus efectos durante un tiempo¡± pero que la EBA ¡°no considera adecuada en este estado la extensi¨®n adicional de una medida tan excepcional. Es oportuno volver a la pr¨¢ctica de que cualquier reprogramaci¨®n de pr¨¦stamos debe seguir un enfoque de caso por caso¡±.