La desconexi¨®n de Sniace
El cierre de la cogeneraci¨®n por el recorte de la retribuci¨®n aboca a la firma c¨¢ntabra a su fin tras a 80 a?os de existencia
El jueves, la empresa Sniace tir¨® la toalla. Tras dos d¨¦cadas de caminar sobre ascuas, la firma c¨¢ntabra ha dicho basta. Un impedimento la aboca a echar el cierre y pedir la liquidaci¨®n: la decisi¨®n de interrumpir el suministro de gas en su planta de cogeneraci¨®n por parte de Cogen, contra la que presentar¨¢ una querella por incumplimiento de contrato. Al tiempo, culpa de la situaci¨®n a la iniciativa del Gobierno de reducir hasta un 35% la retribuci¨®n de la cogeneraci¨®n.
Es la cr¨®nica de una muerte anunciada que, no obstante, ha ca¨ªdo como una bomba en la comnarca de Torrelavega, donde Sniace ha sido un s¨ªmbolo industrial durante gran parte de sus 80 a?os de existencia. El impacto ha llevado al presidente regional, Miguel ?ngel Revilla, a reclamar el apoyo del Gobierno central. ¡°No podemos consentir que Sniace se cierre y punto¡±, dijo Revilla, que este lunes se reunir¨¢ con el comit¨¦ de empresa y el Ayuntamiento de Torrelavega para analizar ¡°alguna posibilidad de futuro¡±.
Una misi¨®n que parece imposible para una empresa que en los ¨²ltimos meses hab¨ªa logrado incorporar dos inversores industriales (Sabino Garc¨ªa Vallina y F¨¦lix Revuelta), dispuestos a elevar su participaci¨®n al 30% cada uno y respaldar la ampliaci¨®n de capital de 32,6 millones, y la renegociaci¨®n de la deuda concursal con diversos acreedores. Pero ahora precisa un nuevo proveedor de cogeneraci¨®n para respaldar el plan de financiaci¨®n. El futuro pasaba por potenciar sus negocios, centrados en cuatro bases (forestal, celulosa, fibra y energ¨ªa renovable) en una l¨ªnea m¨¢s medioambiental y especializarse en productos sustitutivos del pl¨¢stico, seg¨²n explicaba a EL PA?S el pasado verano Gema Ruiz, que hab¨ªa asumido la presidencia en enero de 2019 en el ¨²ltimo intento de salvaci¨®n.
Pero, adem¨¢s, Sniace contaba con una operaci¨®n urban¨ªstica que ten¨ªa el apoyo del Ayuntamiento y del Gobierno c¨¢ntabro, que en la etapa que estuvo ocupado por el PP (2011-2015) se desentendi¨®. Con el respaldo institucional, la empresa quer¨ªa destinar 500.000 de los 700.000 metros cuadrados con que cuenta a desarrollos comerciales y de ocio.
Sniace, fundada en diciembre de 1939 como uno de los primeros logros industriales de la dictadura de Franco, entr¨® en bucle a finales del siglo pasado. Tras vivir encierros de sus trabajadores, plantear planes de distinta ¨ªndole y abordar tres ampliaciones de capital, no pudo evitar el concurso de acreedores. Hasta que en 2013 tuvo que cerrar las instalaciones para volver a abrir en 2016 con una plantilla de 440 personas. En su ¨¦poca gloriosa, que fue duradera, Sniace lleg¨® a superar los 4.000 trabajadores, siendo la bandera industrial de la comarca del Besaya. Contaba con instalaciones que hoy parecen una ruina, con cristales rotos y edificaciones medio abandonadas.
Reacci¨®n del Gobierno
El Gobierno ha respondido a los ataques. Seg¨²n fuentes de Transici¨®n Ecol¨®gica la retribuci¨®n se decide de acuerdo a la normativa europea de 2014 cada seis a?os. Los ajustes, que se conocen con antelaci¨®n, se trasladan a los costes regulados de la factura de la luz. La nueva orden refleja el significativo aumento del precio de mercado. Con los nuevos precios, los ingresos que reciben las plantas por vender su energ¨ªa en el mercado ser¨¢n mayores, lo que les permitir¨¢ cubrir m¨¢s costes de explotaci¨®n y, en consecuencia, ser¨¢ necesaria menos retribuci¨®n regulada para alcanzar la rentabilidad razonable establecida por ley (que obtienen una rentabilidad del 7,39% de su inversi¨®n, avalada por el Estado). En concreto, ser¨¢n necesarios 340 millones menos.
Las fuentes consultadas a?aden que ¡°las empresas conocen el marco y se han beneficiado de ¨¦l, obteniendo beneficios extra, ca¨ªdos del cielo, porque as¨ª lo permite la normativa que ahora critican¡±. Entre 2017 y 2019, los precios de mercado permitieron unos ingresos de 824 millones. A su juicio, no puede hablarse de hachazo, sino de ajuste de esos beneficios extra. ¡°Y Sniace, en concreto, ha recibido en los ¨²ltimos tres a?os m¨¢s de 17 millones, adicionales a sus ingresos¡±. ¡°No parece justo que recurra a ese argumento para esconder otras razones estrictamente empresariales¡±, completan.
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