Bancos centrales y el b¨¢lsamo de Fierabr¨¢s
Se plantea si los supervisores deber¨ªan evaluar su pol¨ªtica de acuerdo a los riesgos del cambio clim¨¢tico
Resulta destacable c¨®mo los bancos centrales han ampliado su ¨¢mbito de actuaci¨®n a la vez que se reduc¨ªa el margen de maniobra de su principal instrumento de pol¨ªtica monetaria, el manejo de los tipos de inter¨¦s. Recurrieron entonces a herramientas hasta entonces no convencionales (¡°forward guidance¡±, compras de activos, entre otras) que ya se han convertido en habituales. Adem¨¢s, los bancos centrales tambi¨¦n act¨²an como supervisores de la estabilidad de los sistemas financieros, un objetivo que ha cobrado especial protagonismo desde la crisis financiera de 2007-08.
El car¨¢cter multidimensional del cambio clim¨¢tico, con riesgos econ¨®micos diversos que se transmiten por diferentes canales, reales y financieros, y que pueden terminar afectando a la estabilidad de los sistemas bancarios, hace natural plantearse si deber¨ªan los bancos centrales reevaluar tambi¨¦n su actuaci¨®n e, incluso, sus objetivos a la luz de este fen¨®meno ambiental. Se trata de un debate en pleno desarrollo, por lo que es normal que haya posiciones distintas, con matices diferentes incluso dentro del Banco Central Europeo (BCE).
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, defendi¨® hace unos d¨ªas que la inacci¨®n en materia clim¨¢tica no es una opci¨®n, pero que cualquier iniciativa ligada a la estrategia de pol¨ªtica monetaria (en revisi¨®n) ha de ser considerada cuidadosamente antes de implementarse, poniendo por delante el cumplimento del mandato del BCE. Al referirse a una potencial ruptura de la neutralidad de mercado, dando preferencia a la compra de activos sostenibles medioambientalmente, se?al¨® que el BCE puede contribuir al desarrollo de este mercado mediante la definici¨®n de criterios de elegibilidad, como los que tiene ya vigentes para operaciones de compra de colateral del Eurosistema o para fines de pol¨ªtica monetaria. Una menci¨®n prudente enmarcada en llamadas a la acci¨®n a los responsables de definir e implementar las pol¨ªticas contra el calentamiento global, que no son los bancos centrales.
Este fue precisamente el punto enfatizado por, Jens Weidmann, presidente del Bundesbank, en el mismo evento: el cambio clim¨¢tico es una responsabilidad compartida y los bancos centrales no pueden sustituir pol¨ªticas cruciales en la transici¨®n hacia una econom¨ªa baja en carbono, como aumentar el precio de las emisiones. Donde hizo un ¨¦nfasis diferente fue al destacar los conflictos de usar los instrumentos disponibles para m¨²ltiples objetivos, incluyendo ahora el cambio clim¨¢tico. Favorecer compras de activos sostenibles en operaciones de pol¨ªtica monetaria hace depender la transici¨®n clim¨¢tica de la estabilidad de precios, lo que no parece razonable dada la necesaria predictibilidad y orientaci¨®n a largo plazo de este proceso. Habr¨¢ que estar atentos a la revisi¨®n de la estrategia de pol¨ªtica monetaria del BCE, pero como se?ala su presidenta, no va a estar ah¨ª la panacea para el cambio clim¨¢tico, su b¨¢lsamo de Fierabr¨¢s en palabras de Don Quijote.
J. Juli¨¢n Cubero, BBVA Research.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.