El cerrojazo de los bazares chinos en Espa?a
La crisis sanitaria lleva a muchos comerciantes a volver a su pa¨ªs en tanto que otros optan por abrir negocios como panader¨ªas
La crisis sanitaria y el brutal golpe al consumo desde que comenz¨® la pandemia hacen estragos tambi¨¦n en el comercio asi¨¢tico asentado en las grandes ciudades espa?olas, en los conocidos bazares chinos. Es f¨¢cil contemplar grandes locales desiertos o en liquidaci¨®n en Madrid y Barcelona. Hay varias causas. Una parte de esta comunidad ha regresado a China. ¡°La salud es lo primero¡±, aseveran los comerciantes. En contra de retirar la mascarilla en exteriores, como manifiestan algunos en esta quinta ola, vuelan a su pa¨ªs para vacunarse y empezar all¨ª. Otros, aprovechando la recuperaci¨®n actual, abandonan sus establecimientos para abrirlos en grandes superficies situadas a las afueras de las urbes, y un tercer grupo m¨¢s emprendedor opta por reinventarse.
Basta con dar una vuelta por Madrid. Desde Fuencarral-El Pardo, Chamber¨ª, Moncloa-Aravaca, Arganzuela a Centro, Carabanchel, Villa de Vallecas o Usera. Sus calles anuncian locales disponibles en venta o en alquiler en lo que eran bazares chinos de toda la vida. Pedro Nueno, profesor de IESE, fundador y presidente honor¨ªfico de la escuela de negocios China Europe International (CEIBS), justifica estos cierres por varios motivos: ¡°La covid-19, la ca¨ªda del turismo, el dr¨¢stico cambio de h¨¢bitos de consumo que golpea la tienda f¨ªsica, la calidad de los productos en algunos casos y el incremento de las regulaciones e inspecciones a todos los negocios¡±.
La abogada Lidan Qi, directora de la consultora Puente China Espa?a, que asesora a grandes empresas y emprendedores chinos, prioriza el criterio sanitario. ¡°Hay compatriotas que ven lejos el fin de la pandemia y aqu¨ª no se sienten seguros¡±. ¡°El asi¨¢tico es muy cauto¡±, dice, y recuerda el autoconfinamiento de muchos miembros de la comunidad en enero y febrero de 2020, cuando el coronavirus a¨²n parec¨ªa algo lejano de Europa. Qi apunta: ¡°Muchos cierres son de comerciantes que se fueron al inicio de la pandemia y no pueden volver porque ya no cuentan con ahorros para empezar de nuevo¡±. Las cifras del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) reflejan esta merma al contabilizar una poblaci¨®n de 232.807 chinos en 2020 (170 fallecimientos), y de 228.564 a 1 de enero de 2021.
Otro de los motivos de cierre tiene que ver con el asfixiante par¨®n en las ventas meses atr¨¢s y la imposibilidad de seguir asumiendo costes como los altos alquileres. Es el caso de uno de los dos bazares de la calle de Juan Montalvo, en la zona madrile?a de Ciudad Universitaria. Su arrendatario ha dejado el de 300 metros cuadrados ¡°porque no se vende¡±. Un local por el que pagaba 4.000 euros al mes. No ha llegado a un acuerdo con el propietario para rebajarlo. Eduardo Molet, propietario de la inmobiliaria que lleva su nombre, reconoce que ¡°a pesar de que hay quien ha comenzado a rebajar el alquiler, la baja rentabilidad de estos comercios les impide seguir con el negocio¡±.
Emprendedores natos
Molet subraya: ¡°Los comercios asi¨¢ticos han aguantado m¨¢s tiempo¡±, pero ¡°empiezan a caer los que se hab¨ªan dado de plazo hasta el verano¡±. La incipiente rebaja en los alquileres que anuncia el experto inmobiliario comienza a ser aprovechada, sin embargo, por comerciantes asi¨¢ticos que optan por reinventarse ¡°con otro tipo de negocios m¨¢s econ¨®micos como las panader¨ªas¡±, indica Lidan Qi. ¡°El chino es una persona muy emprendedora y el que permanece en Espa?a buscar¨¢ qu¨¦ hacer ahora¡±. Y lo har¨¢ sin p¨¦rdida de tiempo porque, como asegura Pedro Nueno, ¡°hablamos de profesionales que saben detectar oportunidades y moverse r¨¢pido¡±.
De hecho, un portavoz de la Asociaci¨®n de Chinos de Espa?a, que se identifica como Li, apunta: ¡°Los que ven la crisis como una oportunidad han cerrado sus locales y trabajan ya para abrir negocios y franquicias relacionados con la energ¨ªa, el pan, el reparto a domicilio y la venta online¡±. Vaticina que ser¨¢n los nuevos negocios chinos en Espa?a. Li a?ade, entre los motivos que han llevado a la quiebra a sus compatriotas, el encarecimiento del transporte internacional, ¡°tres veces m¨¢s elevado¡±, lo que ha impactado en su descenso y en la recepci¨®n, con mucho retraso, de la mercanc¨ªa procedente de China.
Precisamente el propietario del bazar de la calle de Fernando el Cat¨®lico, 4, en Chamber¨ª, que no quiere decir su nombre, culpa del cierre a la pandemia ¡°porque la gente sale menos y compra lo justo¡±, y tambi¨¦n a la enorme competencia del comercio electr¨®nico. ¡°Casi todo se compra ya por internet¡±, dice. ¡°Ya no se gasta con alegr¨ªa¡±, afirman los vecinos del barrio. A algunas calles de distancia, en Cea Berm¨²dez, hay otro bazar en liquidaci¨®n.
Un local de Magallanes est¨¢ ahora de enhorabuena. Su cierre por los antiguos propietarios es una oportunidad para la joven pareja asi¨¢tica que lo ha conseguido a un precio de 2.500 euros al mes. Desde el anonimato reconocen ¡°acometer el reto con mucha ilusi¨®n¡± a pesar de los numerosos gastos (mercanc¨ªa, impuestos, personal¡)¡± y ¡°cuando la incertidumbre de la recuperaci¨®n est¨¢ ah¨ª¡±. Un miembro de la pareja confiesa que se lanza porque conoce muy bien el negocio y cuenta con la ayuda de su madre, que tiene otro establecimiento.
Algo diferente ocurre en Barcelona. El cierre de los peque?os comercios ¡°por quiebra o por contagios descontrolados¡± ha motivado un cambio de estrategia del emprendedor chino, seg¨²n Jonhi Zhang, mayorista textil y secretario general de la Federaci¨®n de Corporaciones Chinas de Espa?a. ¡°Se est¨¢ yendo a locales de m¨¢s de 1.000 metros cuadrados en la ciudad y a grandes superficies, a partir de 5.000 metros cuadrados, en las afueras¡±. Y ejemplifica: ¡°Cierran un peque?o restaurante y abren grandes comedores de wok porque en Barcelona es un buen momento para coger buenos locales¡±. Otro movimiento que relata es el desarrollo de cadenas de panader¨ªas regentadas por chinos que dan empleo al personal nacional. Son tiempos de trasformaci¨®n empresarial.
Cierre de cuentas
La poblaci¨®n china est¨¢ que echa humo. Se confiesa "indignada" ante los cierres masivos de sus cuentas bancarias en CaixaBank. ¡°Nos lo comunican 60 d¨ªas previos al cierre sin ning¨²n fundamento¡±, apunta Helena Xia, presidenta de la Asociaci¨®n China de Derecho en Espa?a. ¡°Estamos sumando afectados para presentar una demanda colectiva contra la entidad bancaria¡± y aduce ¡°motivos racistas¡±. ¡°Si hay sospecha de blanqueo, que se persiga, pero que el criterio no sea por nacionalidad¡±. Paco Qian, presidente de Vision Spain China, anuncia que van por ¡°3.000 cuentas obligadas a darse de baja¡± y estima que llegar¨¢n a 10.000.
Desde CaixaBank explican: ¡°Tenemos cerca de 80.000 clientes de nacionalidad china. Dif¨ªcilmente pueden argumentar que los motivos de su baja guardan relaci¨®n con su pertenencia a este colectivo¡±. Y justifican el cierre de cuentas por ¡°la necesidad de regularizar la situaci¨®n de determinados clientes que hab¨ªan sido desvinculados por Bankia o CaixaBank durante los ¨²ltimos a?os en aplicaci¨®n de la normativa, lo que ha impactado en todo tipo de clientes¡±.
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