Detenido un empresario de Bizkaia que impon¨ªa maratones de trabajo de hasta 26 horas a cambio de cinco euros la hora

Llegaban a trabajar hasta 26 horas seguidas en jornadas que el empresario bautiz¨® como ¡°maratones¡±, con solo una de descanso para comer y a cinco euros la hora. Empezaban a las siete de la ma?ana y terminaban el d¨ªa siguiente a las nueve. Toda la noche encerrados y sin parar de envasar ajos y cebollas. El empresario de Ajos y Cebollas del Txorierri, una firma de alimentaci¨®n ubicada en el parque de Zamudio, en Bizkaia, fue detenido la pasada semana tras la denuncia de varios empleados que describieron ante la Polic¨ªa Nacional de Bilbao el r¨¦gimen cercano a la esclavitud al que les somet¨ªa.

La Delegaci¨®n del Gobierno en el Pa¨ªs Vasco ha confirmado este mi¨¦rcoles los hechos por los que el empresario se enfrenta a varios delitos contra los derechos de los trabajadores y a multas de hasta 70.000 euros por infringir la legislaci¨®n en materia laboral y de seguridad social. Tras declarar ante el juez de guardia, el empresario qued¨® en libertad, pero a disposici¨®n del juzgado.

Seg¨²n ha informado este mi¨¦rcoles la Delegaci¨®n del Gobierno, el arresto se produjo el pasado 17 de agosto despu¨¦s de que varios empleados denunciaran voluntariamente su situaci¨®n y explicaran a la autoridad policial y laboral las pr¨¢cticas del empresario. Los trabajadores contaron que, al no tener permiso de residencia, su jefe no les hab¨ªa formalizado contrato alguno, percibiendo un sueldo de cinco euros por hora efectiva de trabajo. Relataron que cuando sufr¨ªan alg¨²n accidente laboral como consecuencia de su trabajo y ten¨ªan que acudir a los servicios m¨¦dicos, el due?o les aleccionaba para que no mencionaran ni la empresa ni el lugar donde hab¨ªan sufrido las lesiones.

Adem¨¢s, explicaban que, ocasionalmente, hac¨ªan lo que su jefe denominaba una ¡°marat¨®n¡±, consistente en trabajar desde las siete de la ma?ana hasta las nueve de la ma?ana del d¨ªa siguiente, teniendo solo una hora libre para comer mientras permanec¨ªan toda la noche encerrados en las instalaciones de la empresa, situadas en el pol¨ªgono industrial Ugaldeguren en Zamudio. El empresario les pagaba a cinco euros la hora. Otra modalidad era pagarles un euro por cada saco de 12 kilos de cebollas que pelaban.

Hartos de ser explotados, denunciaron los hechos pese a estar en una situaci¨®n irregular y ser conscientes de los problemas que les pod¨ªa acarrear. La Inspecci¨®n de Trabajo confirm¨® que los trabajadores se encontraban en una situaci¨®n irregular sin contrato. La Brigada de Extranjer¨ªa y Fronteras de Bilbao constat¨® que varios de los ellos tampoco dispon¨ªan de permisos de residencia.

Un grupo de agentes de la Brigada de Extranjer¨ªa y Fronteras de Bilbao y funcionarios de la Inspecci¨®n de Trabajo y Seguridad Social de Bizkaia se presentaron en la empresa, identificando en su interior a un total de ocho trabajadores. De ellos, cuatro estaban sin permiso de residencia ni contrato de trabajo. Tras comprobar la gravedad y veracidad de los hechos narrados por estas v¨ªctimas, los investigadores concedieron a las v¨ªctimas el car¨¢cter de testigos protegidos.

El empresario fue detenido. Se le acusa de un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, enfrent¨¢ndose, adem¨¢s, a una posible sanci¨®n econ¨®mica de m¨¢s de 70.000 euros por infringir la legislaci¨®n en materia laboral y de seguridad social.