Los resultados de implantar el teletrabajo: ni ahorro ni mayores costes, pero m¨¢s productividad
BeeDigital, la antigua P¨¢ginas Amarillas, ha implementado una jornada con cuatro d¨ªas en remoto y uno presencial
En una oficina semivac¨ªa, solo con la mitad de los puestos de trabajo ocupados, el jueves se re¨²nen alrededor de uno de los asientos tres empleados. Asisten a una videoconferencia con compa?eros de otros departamentos que est¨¢n teletrabajando. En la pr¨¢ctica, ellos tambi¨¦n est¨¢n en remoto, pero no desde su casa sino desde la oficina. Una de las paradojas de un nuevo modelo de relaci¨®n laboral que en el caso de BeeDigital, la antigua P¨¢ginas Amarillas, se mantendr¨¢ m¨¢s all¨¢ de la emergencia sanitaria.
Tras el verano, las empresas parecen volver a algo parecido a la normalidad, excepto un pu?ado de ellas que se han atrevido al cambio. De ah¨ª que el teletrabajo pierda fuelle respecto a los meses m¨¢s duros de la pandemia, aunque s¨ª ganar¨¢ algo de peso si se compara con antes del coronavirus. Las que sacan tajada de la nueva situaci¨®n son las grandes empresas y determinados sectores, especialmente los que basan su actividad en el uso de herramientas y plataformas digitales. Ejemplo de ello es BeeDigital, que ha optado por teletrabajar cuatro d¨ªas a la semana y solo asistir uno de forma presencial. Afirman que no les supone un ahorro, a pesar de reducir el pago del alquiler, ya que se dedica una cantidad similar al pago adicional a sus casi 300 empleados.
¡°Hasta la pandemia hab¨ªa poco convencimiento del teletrabajo, pero con la experiencia obligada nos hemos convencido. Hemos descubierto que est¨¢bamos preparados¡±, explica Javier Castro, consejero delegado de BeeDigital. La estampa del espacio de trabajo es el de una empresa a medio gas o con unas dimensiones muy por encima de lo que necesita. Adem¨¢s, las taquillas y la zona de comedor no se pueden utilizar en su base central, en San Sebasti¨¢n de los Reyes, por medidas de higiene y protecci¨®n contra la covid.
Esta imagen, sin embargo, no refleja la decadencia de la firma, sino un modelo en remoto engrasado, tanto que se ha apostado por ¨¦l sin vuelta atr¨¢s. Una decisi¨®n tomada de la mano con los trabajadores: antes de verano se hizo una encuesta y casi el 100% de la plantilla pidi¨® que se mantuviese el sistema que era obligatorio por la emergencia sanitaria. ¡°Estoy m¨¢s c¨®moda y soy mucho m¨¢s operativa desde casa. Aqu¨ª se pierde algo m¨¢s de tiempo¡±, cuenta Susana Fern¨¢ndez, del departamento de marketing.
La importancia del contacto
De hecho, el d¨ªa que asisten de forma presencial (cada equipo tiene su d¨ªa asignado, entre el lunes y el jueves) se mantienen los mismos h¨¢bitos que cuando est¨¢n en remoto. ¡°Hacemos lo mismo que en casa. En realidad teletrabajamos desde aqu¨ª¡±, dice Daniel Goiricelaya, del departamento de personal y relaciones laborales. Por tanto, lo ¨²nico que cambia es el lugar desde el que se trabaja. Y permite recuperar la socializaci¨®n entre los compa?eros, algo que entienden capital. ¡°Para que sea un modelo sostenible se tiene que mantener el contacto entre personas. Por eso tenemos este d¨ªa fijado: sirve para ganar sentido de pertenencia a la marca e involucrar a la gente¡±, a?ade Castro.
Este cambio, por supuesto, ha hecho variar los costes de la firma. Aunque al final es lo comido por lo servido. Por un lado, se ahorra parte del alquiler: hasta la pandemia contaba con 3.000 metros cuadrados, pero con la vuelta parcial se ha quitado una planta. As¨ª, ahora solo utiliza unos 1.275 metros, lo que repercute en la renta a la que hace frente, como explica el consejero delegado de la firma: ¡°Tener menos espacio es un ahorro, pero como dice la ley tambi¨¦n tenemos que pagar una cantidad mensual por el teletrabajo y gastos adicionales¡±.
Esta segunda parte es la contrapartida econ¨®mica. Tras la negociaci¨®n con los representantes de los trabajadores, se acord¨® una cantidad fija por empleado ¡ªmontante que la empresa no quiere detallar¡ª, as¨ª como el listado de herramientas que necesitan. ?El resultado? ¡°Ni ganamos ni perdemos. No ahorramos dinero con esto, pero tampoco nos cuesta. El beneficio que tenemos es que de esta forma los trabajadores son m¨¢s productivos¡±, incide Castro.
Adem¨¢s, durante la pandemia tambi¨¦n tuvo que desarrollar sus propias herramientas. Por ejemplo, en la parte de las l¨ªneas telef¨®nicas. ¡°El departamento de servicio al cliente ten¨ªa l¨ªneas fijas en la oficina, pero con la pandemia tuvimos que habilitar una centralita virtual que se ha mantenido¡±, explica Jorge Moret¨®n, responsable del ¨¢rea. Eso s¨ª, este coste adicional no se debe repercutir al nuevo modelo laboral, ya que se mantendr¨ªa si se volviese a la presencialidad. Aunque empresas como BeeDigital esperan que ese modelo haya quedado superado para siempre.
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