Bruselas quiere sacar a m¨¢s de 80 millones de personas del riesgo de pobreza en 2030

En el plazo de ocho a?os, la Uni¨®n Europea deber¨ªa rebajar muy significativamente el n¨²mero de personas en riesgo de pobreza en los pr¨®ximos ocho de a?os: de 95,4 millones a 15. Este es el objetivo que se ha fijado la Comisi¨®n Europea y que pretende impulsar con las recomendaciones sobre ingresos m¨ªnimos para los Estados miembro que ha aprobado este mi¨¦rcoles, planteadas como una v¨ªa para llegar al objetivo de tener un 78% de poblaci¨®n de 20 a 64 a?os en 2030, seg¨²n se recoge entre las metas del pilar europeo de Derechos Sociales. En la misma carta, se incluye la salud laboral, otro elemento que ha tratado de desarrollar el ejecutivo comunitario al aprobar una enmienda a la directiva sobre amianto de 2005 en la que plantea reducir a una d¨¦cima parte los l¨ªmites de exposici¨®n actuales a este material cancer¨ªgeno tan utilizado hasta hace pocas d¨¦cadas.

Todos los pa¨ªses de la UE, los Veintisiete tienen alg¨²n tipo de ingreso m¨ªnimo vital, aunque la disparidad entre todos ellos es grande, como se?ala el comisario europeo de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmidt, en un encuentro con varios medios europeos, entre ellos EL PA?S. El Ejecutivo comunitario pretende que estas diferencias vayan acerc¨¢ndose, aunque como su competencia en esta materia es escasa ha optado por aprobar una serie de recomendaciones para los Estados miembro. Es decir, ning¨²n texto con fuerza de ley, como una directiva o un reglamento.

Los consejos que plantea Bruselas para aumentar la cobertura de este tipo de salarios sociales pasan por no excluir a determinados colectivos como a los m¨¢s j¨®venes fijando una edad m¨ªnima a los 25 o los 30 a?os, prestando apoyo a los beneficiarios de estas ayudas para su inserci¨®n social y laboral, especialmente estas ¨²ltimas, porque como subraya el luxemburgu¨¦s Schmidt, la Comisi¨®n no plantea un apoyo incondicional sino ¡°un contrato¡± por el que quien percibe este ingreso se compromete a dar pasos para su inserci¨®n. ¡°No es una renta b¨¢sica universal¡±, zanja Schmidt.

El planteamiento que hace la Comisi¨®n no pasa por fijar cantidades de ayudas ni un porcentaje sobre ingresos medios o medianos en cada pa¨ªs y huye de las comparaciones entre pa¨ªses. No obstante, s¨ª que da dos consejos concretos: el primero es que la respuesta oficial a una petici¨®n de ayuda de darse como tarde en 30 d¨ªas y que a los tres meses debe concretarse un plan de inserci¨®n social y laboral para el beneficiario.

¡°En un momento en que muchas personas tienen dificultades para llegar a fin de mes, ser¨¢ importante que este oto?o los Estados miembros modernicen sus redes de seguridad social con un enfoque de inclusi¨®n activa para ayudar a los m¨¢s necesitados. As¨ª es como podemos luchar contra la pobreza y la exclusi¨®n social, y ayudar a m¨¢s personas a trabajar durante este per¨ªodo dif¨ªcil¡±, ha a?adido el vicepresidente de la Comisi¨®n, Valdis Dombrovskis, en la presentaci¨®n de la iniciativa.

Junto a esta recomendaci¨®n, el Ejecutivo europeo ha aprobado una propuesta para reformar la directiva de 2005 que proh¨ªbe la utilizaci¨®n del amianto en edificios nuevos y reforma y que limita la exposici¨®n a esta sustancia en los puestos de trabajo a 0,1 fibras por cent¨ªmetro c¨²bico rebajando esta cantidad a 0,01, es decir, una d¨¦cima parte. Para poner en contexto la importancia de la medida en la UE, el departamento de Schmidt ha dado varios datos que ayudan a contextualizar: un 78% de los c¨¢ncer laborales que se dan en la UE est¨¢n relacionados con el amianto; 70.000 trabajadores murieron en 2020 por la exposici¨®n a esta sustancia; entre 4,1 y 7,3 millones de ocupados est¨¢n expuestos a ella