Bruselas endurecer¨¢ las sanciones para los pa¨ªses que incumplan las nuevas reglas fiscales
El borrador de la Comisi¨®n apunta a multas de ¡°menor cuant¨ªa¡± pero que se aplicar¨¢n con ¡°mayor frecuencia¡±
La Comisi¨®n Europea est¨¢ dispuesta a adaptar los planes de ajustes de deuda a las circunstancias de cada Estado en las nuevas reglas fiscales. Pero al contrario de lo que ha sucedido con las viejas, quiere que su incumplimiento lleve un castigo r¨¢pido y no se queden en una herramienta imposible de utilizar. ¡°La gama de sanciones se ampliar¨ªa a?adiendo otras m¨¢s inteligentes y focalizadas¡±, apunta uno de los ¨²ltimos borradores de la comunicaci¨®n sobre la revisi¨®n de las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento al que ha tenido acceso EL PA?S y que la Comisi¨®n Europea aprobar¨¢ este mi¨¦rcoles. La traducci¨®n de este enunciado pasa por multas de ¡°menor cuant¨ªa¡± que puedan aplicarse con ¡°mayor frecuencia¡±.
En Bruselas son conscientes de que uno de los problemas de las actuales reglas fiscales, las que el expresidente de la Comisi¨®n Romano Prodi calific¨® de ¡°est¨²pidas¡±, pueden ¡°poner en riesgo el crecimiento y son proc¨ªclicas¡±, seg¨²n se lee en el citado documento. Y no lo son solo por su propio funcionamiento, sino tambi¨¦n por las sanciones que llevan aparejadas cuando no se cumplen, que, en teor¨ªa, pueden acabar con multas equivalentes al 0,2% y hasta el 0,5%. As¨ª que ahora, al plantear castigos menos cuantiosos, el Ejecutivo de Ursula von der Leyen, apunta a que ¡°reducir¨ªan el da?o econ¨®mico¡±. Esto, sobre el papel, le dar¨ªa margen imponer sanciones por incumplir las normas del Pacto de Estabilidad. Por eso apunta que a?adi¨¦ndolas al men¨² disponible podr¨ªa aplicarlas con ¡°mayor frecuencia¡±.
Comparecencia en el Parlamento Europeo para los Estados incumplidores
El arsenal que plantea Bruselas en su comunicaci¨®n para desarrollar despu¨¦s en textos legales una vez haya un consenso con los Estados miembros se completa con castigos reputacionales, como la obligaci¨®n de que los ministros de Finanzas de los pa¨ªses incumplidores pasen por el Parlamento Europeo a dar explicaciones acerca de por qu¨¦ no cumplen con los planes de ajuste y las recomendaciones comunitarias. Esta humillaci¨®n simb¨®lica va m¨¢s all¨¢ de la simple comparecencia, ya que deja claro en los mercados que un Estado se desv¨ªa de la senda de ajuste de deuda hacia el objetivo que la Comisi¨®n considera fiscalmente sostenible, lo que puede traducirse en un castigo en los mercados de capital para los bonos del pa¨ªs en cuesti¨®n.
¡°La gama de sanciones¡± se ampl¨ªa con la propuesta de que se pueda suspender la financiaci¨®n europea si el Estado afectado no act¨²a para corregir el d¨¦ficit p¨²blico ¡ªque seguir¨¢ debiendo situarse por debajo del 3% en un objetivo a medio plazo¡ª e, incluso, se plantea el endurecimiento de la senda de ajuste que el pa¨ªs de turno y Comisi¨®n hayan pactado si el primero se desv¨ªa de lo acordado.
Estos pactos de ajuste de deuda, que en principio ser¨¢n de cuatro a?os, pero podr¨¢n extenderse hasta siete, son la novedad m¨¢s llamativa de la propuesta para reformar las reglas fiscales que pondr¨¢ sobre la mesa este mi¨¦rcoles. El objetivo a largo plazo seguir¨¢ siendo del 60%, como lo es desde 1992, pero la forma de llegar a esa meta cuando un Estado la sobrepase cambiar¨¢ si la Comisi¨®n tiene ¨¦xito con su comunicaci¨®n. En esos pactos se marcar¨¢n objetivos a medio plazo una vez el Ejecutivo de Bruselas ha determinado un indicador de deuda sostenible para el Estado en cuesti¨®n. Ese indicador servir¨¢ de referencia en las negociaciones y tambi¨¦n servir¨¢ para fijar el l¨ªmite de gasto que ambas partes tendr¨¢n que acordar para este periodo.
Controversia
La imposibilidad de imponer sanciones ha sido objeto de controversia entre los pa¨ªses m¨¢s endeudados y aquellos m¨¢s partidarios de la ortodoxia fiscal. Su activaci¨®n, en las normas actuales, no llega por los incumplimientos, sino por no seguir las recomendaciones de la Comisi¨®n Europea para volver a cumplirlas. Sin embargo, ni as¨ª el Consejo de la UE ha llegado a imponer sanciones. Espa?a o Portugal, por ejemplo, han estado inmersas en procedimientos de d¨¦ficit excesivo por incumplir las normas y, seg¨²n el propio Consejo, en 2016 no aplicaron las medidas correctivas necesarias, pero no recibieron sanci¨®n alguna por ello. Tampoco Italia, que en 2019 lleg¨® al extremo de ver rechazado su presupuesto por la Comisi¨®n, ha recibido castigo. Fuera de la zona euro, Hungr¨ªa ha sido otro de los Estados que han podido ser multados y finalmente no lo fue.
Con la nueva revisi¨®n, uno de los objetivos es claramente un dise?o que s¨ª permita castigar al incumplidor y reconducir sus desviaciones. No obstante, esto no quiere decir que los planes de ajuste, una vez acordados y aprobados, sean inamovibles. Se?ala el borrador de la Comisi¨®n que cuando las circunstancias hagan inviable la implementaci¨®n, se podr¨¢ revisar lo acordado, aunque para ello ser¨¢ necesario seguir el mismo proceso de negociaci¨®n con Bruselas y sanci¨®n por parte del Consejo de la UE. Sin embargo, el texto tambi¨¦n deja claro que esta v¨ªa no podr¨¢ ser recorrida a menudo para perder credibilidad.
Adem¨¢s de este mecanismo de adaptaci¨®n a los cambios coyunturales, tambi¨¦n hay otra que es la cl¨¢usula de escape. Esta ya existe en la actualidad y, de hecho, est¨¢ activada desde que estall¨® la pandemia, motivo por el que, aunque la mayor¨ªa de pa¨ªses de la Uni¨®n Europea incumplen el Pacto de Estabilidad, ninguno est¨¢ inmerso en un procedimiento de d¨¦ficit excesivo. Ahora la comisi¨®n habla de una cl¨¢usula ¡°robusta¡± que ser¨ªa general por si sobrevienen situaciones imprevistas y de gran magnitud que aboquen a la UE a una recesi¨®n econ¨®mica profunda ¡ªuna pandemia o una guerra, por ejemplo¡ª que obliguen a desviarse ¡°temporalmente¡± de la senda fiscal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.