Los salarios espa?oles est¨¢n m¨¢s en l¨ªnea con los europeos que la productividad
Un estudio de Adecco sit¨²a la relaci¨®n entre los sueldos espa?oles y el PIB per c¨¢pita entre los mayores de la UE, mientras que desciende al puesto 11 a la hora de evaluar si son m¨¢s o menos productivos
La econom¨ªa espa?ola adolece de varios males. Hist¨®ricamente, se han escuchado quejas sobre los bajos salarios de los trabajadores y una productividad pobre que no anima a mejorar dichas retribuciones. Una forma de evaluar si estas quejas son ciertas es comparar la retribuci¨®n media de un pa¨ªs con su PIB por habitante y con la productividad media, y, a la vez, observar como resultan estas comparaciones en el resto de pa¨ªses de la UE. O dicho de otra manera, los salarios, independientemente de su nivel, son la compensaci¨®n de un trabajo realizado, por lo que, en teor¨ªa, deben guardar cierta correspondencia con el valor de la producci¨®n que dicho trabajo contribuye a realizar. Esta relaci¨®n, sin embargo, resulta muy distinta seg¨²n de qu¨¦ pa¨ªs se hable.
Seg¨²n el ¨²ltimo Monitor Adecco sobre salarios elaborado por Adecco Group Institute, en Espa?a, esta proporci¨®n la guardan mejor los salarios respecto al PIB que respecto a la productividad, si se comparan con el resto de pa¨ªses comunitarios. As¨ª, el salario medio de la econom¨ªa espa?ola durante 2022 fue de 1.822 euros mensuales ¡ªtomando el salario ordinario bruto que excluye los pagos no regulares como extras, atrasos o indemnizaciones, que elabora la Encuesta Trimestral de Coste Laboral del INE¡ª, lo que supone que, si se relaciona esta retribuci¨®n con el PIB por habitante, el sueldo medio estar¨ªa m¨¢s o menos acorde al nivel de riqueza de la econom¨ªa. De hecho, en esta comparativa, Espa?a tiene la cuarta relaci¨®n m¨¢s alta entre el salario medio y el PIB per c¨¢pita, con el 78% de dicha medici¨®n de la riqueza por habitante. Solo las tres grandes econom¨ªas europeas superan este ratio: Alemania (81,8%); Italia (80,5%) y Francia (80%).
Sin embargo, si se toma el salario medio como proporci¨®n de la productividad media, Espa?a desciende notablemente en el ranking comunitario hasta el puesto n¨²mero 11, ya que dicha representaci¨®n representa el 37,2%. En Alemania, el pa¨ªs que encabeza este listado, el sueldo medio equivale al 50,2% de su productividad media.
Esta menor relevancia de los salarios respecto a la productividad ha empeorado, adem¨¢s, de forma notable en el ¨²ltimo a?o, periodo en el que ha ca¨ªdo desde el sexto puesto al n¨²mero 11. Esto sirve a los autores de este estudio de Adecco para asegurar que ¡°es precisamente la evoluci¨®n de la productividad lo que permite generar dudas acerca de la sostenibilidad de los actuales niveles salariales en Espa?a¡±. De hecho, llaman la atenci¨®n sobre que entre 2017 y 2022 Espa?a fue la econom¨ªa europea con peores resultados de esta variable, con un descenso de la productividad del -4,3%; seguido de Luxemburgo (-4%); Malta (-2,9%); Grecia (-1,7%); Finlandia (-0,5%) y Alemania (0%).
En este sentido, defienden que ¡°el crecimiento salarial sostenible durante largos periodos de tiempo solo es posible cuando hay un crecimiento significativo de la productividad¡±. Y esto es lo que ha ocurrido entre 2009 y 2019, seg¨²n este an¨¢lisis, cuando la productividad laboral creci¨® un 12,3% en la UE-27, m¨¢s que los salarios reales, que avanzaron un 8,4% en este lapso.
En este escenario, el director de Adecco Group Institute, Javier Blasco, resalt¨® este lunes: ¡°Un incremento de los salarios, para ser sostenible, debe estar acompa?ado por un aumento en la producci¨®n. De lo contrario, un descenso de la productividad significa que, para alcanzar un mismo nivel de producci¨®n, hacen falta m¨¢s trabajadores. O, dicho de otra forma, que una misma plantilla produce menos que antes. Por eso, si se quiere aumentar los salarios sin que estos est¨¦n respaldados por una mayor producci¨®n, eso se debe de hacer a costa de reducir los m¨¢rgenes. Pero esto ¨²ltimo, a su vez, implica menor capacidad de inversi¨®n, lo que dificulta la recuperaci¨®n de la productividad y se crea un c¨ªrculo vicioso¡±.
Sin embargo, a la hora de hablar de la baja productividad de la econom¨ªa espa?ola (y del elevado desempleo), el director del gabinete econ¨®mico del sindicato CC OO, Carlos Mart¨ªn, opina que ambos indicadores no son la causa de un peor comportamiento, sino que son ¡°s¨ªntomas¡± del poco desarrollo del capital. ¡°En los ¨²ltimos a?os, en Espa?a se ha permitido la existencia de mucho capital vago, de malos negocios. As¨ª, durante mucho tiempo ¡ªexplica este economista¡ª el capital ten¨ªa la posibilidad de rentabilizarse sin inversi¨®n. Pero la subida del salario m¨ªnimo interprofesional (un 47% en los ¨²ltimos cinco a?os) y la limitaci¨®n al abuso de la precariedad (con la reforma laboral) tienen un efecto guada?a: evita los malos negocios e incrementa el tama?o medio de las empresas (las peque?as que desaparecen son reabsorbidas en actividad y empleo por las mayores)¡±, asegura este responsable de CC OO.
Por ello, Mart¨ªn aconseja que ¡°lo ideal ser¨ªa encauzar el capital hacia la mediana empresa y eso se hace con algunas de las medidas que ya se est¨¢n tomando, como es la subida de los est¨¢ndares laborales, la limitaci¨®n de la extracci¨®n de rentas con la ley de la vivienda; e impidiendo determinadas privatizaciones de servicios p¨²blicos. Todo esto ¡ªen su opini¨®n¡ª provocar¨¢ un cambio en el modelo productivo que mejorar¨¢ la productividad y los salarios¡±.
En cualquier caso, una de las v¨ªas para fomentar similares avances de los salarios y la productividad es la vinculaci¨®n de los primeros al cumplimiento de objetivos, por ejemplo. Se trata de un mantra repetido una y otra vez por los empresarios desde hace a?os que no termina de abrirse camino en Espa?a. De hecho, seg¨²n los ¨²ltimos datos de las cl¨¢usulas especiales incluidas en los convenios colectivos, de los casi tres millones de trabajadores que firmaron un nuevo convenio en 2022, apenas 433.000 de ellos contaban con alg¨²n tipo de vinculaci¨®n de su sueldo a la calidad y/o cantidad de su trabajo, lo que representaba apenas el 16%.
Una tercera medici¨®n: el salario m¨ªnimo
Otra forma de comparar los salarios espa?oles y los europeos la ofrece el salario m¨ªnimo interprofesional. M¨¢s all¨¢ de su cuant¨ªa y su evoluci¨®n, es determinante evaluar el porcentaje que representa esta renta con respecto al salario m¨ªnimo de cada pa¨ªs con el que se compare. La oficina estad¨ªstica de la Uni¨®n Europea (Eurostat) ofrece esta informaci¨®n, pero dado que en la mayor¨ªa de los Estados los ¨²ltimos datos son de 2021, los t¨¦cnicos que han elaborado este informe de Adecco han realizado una estimaci¨®n para 2022 (tomando como salario promedio el que gana una persona soltera sin hijos proporcionando por Estad¨ªstica para cada pa¨ªs). Seg¨²n esto, hay seis pa¨ªses en la UE donde el salario m¨ªnimo supera el 50% del salario medio, encabezados por Eslovenia, donde alcanza el 62% del sueldo medio. Le siguen Polonia, Croacia, Eslovaquia, Ruman¨ªa y Grecia; mientras que Espa?a ocupa el octavo lugar, con el 49,4%.
En el ¨¢mbito regional, las estructuras econ¨®micas de cada comunidad aut¨®noma difieren unas de otras y, por tanto, sus niveles salariales y de productividad son tambi¨¦n muy distintos. En consecuencia, el porcentaje de lo que supone el salario m¨ªnimo sobre cada salario medio regional es asimismo muy dispar y var¨ªa desde el 50% que supone para el sueldo medio madrile?o al 72% que representa en Extremadura (si bien, este c¨¢lculo se ha hecho teniendo en cuenta solo los sectores de la industria, la construcci¨®n y los servicios y excluyendo la agricultura, donde el salario m¨ªnimo tiene un peso considerablemente mayor que en el resto).
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