?xito econ¨®mico, pero malestar social
Afirmar que la econom¨ªa espa?ola est¨¢ estancada o en declive es una majader¨ªa, otra cosa es que persistan problemas enquistados
Decir que la econom¨ªa espa?ola est¨¢ estancada o en declive es una majader¨ªa, ?atenuada por la ignorancia? Otra cosa es que persistan problemas enquistados (stocks); pero lo esencial es si su evoluci¨®n (flujos) los endereza, o los empeora. No solo en 2022 Espa?a alcanz¨® la cabeza europea en crecimiento y empleo, y los mejores registros de reducci¨®n del paro y la inflaci¨®n.
Este a?o contin¨²a en la misma t¨®nica. Todos los organismos internacionales y las instituciones dom¨¦sticas se abonan ahora al crecimiento del 2,1% del PIB proyectado por el Gobierno y a listones similares en los dem¨¢s baremos. La parte recorrida del primer semestre parece ampararlo. Solo cierta propaganda niega el alcance de los ¨¦xitos, cuando podr¨ªa alegar, de forma m¨¢s veros¨ªmil, que a¨²n no bastan. Y subrayar el malestar todav¨ªa existente.
As¨ª ocurre con las grandes cifras. El sectarismo despreci¨® el crecimiento del PIB en 2022 y este se coloc¨® en vanguardia de los grandes de la UE, al 5,5%. El primer trimestre de 2023 aument¨® al 3,8%, frente al 2,9% de igual per¨ªodo de a?o anterior.
Tambi¨¦n subraya la pesarosa inflaci¨®n, pero oculta que va mucho mejor que la de los vecinos, y que ha bajado 7,6 puntos: desde el pico del 10,8% en julio de 2022 al 3,2% de este mayo. Dispara porque somos farolillo rojo europeo en desempleo, pero olvida que el n¨²mero de parados ha bajado a 2,7 millones, circa la mitad que bajo el gobierno de Mariano Rajoy en 2013.
E ignora haber alcanzado los 20,8 millones de trabajadores activos. R¨¦cord hist¨®rico en m¨¢s empleo y menos paro, desde luego desde 2008. Y en trabajos de alto valor a?adido, como inform¨¢ticos, telecos, cient¨ªficos. Este pa¨ªs tiene muchos bares, s¨ª, pero ya no es solo un pa¨ªs de camareros. Y ostenta r¨¦cord en empleo indefinido: los temporales son ya solo el 14%, frente al 30% de antes de la pandemia.
Y las exportaciones marcan cima creciendo hasta abril al 9,2%, tras registrar la inversi¨®n exterior su segundo r¨¦cord hist¨®rico en 2022 (34.178 millones), alza del 13,95% sobre 2021. O en la reducci¨®n de la pobreza extrema y otros baremos sociales.
Pero entonces, ?por qu¨¦ eso cotiza mal en la escena p¨²blica? ?por qu¨¦, se quejan los ingenuos del Gobierno, no ¡°permea¡±? Igual es que no se explican bastante. O quiz¨¢ sea m¨¢s exacto inferir que el relativo malestar social se asienta en algunos factores muy sensibles ¡ªy menos manejables desde la Administraci¨®n¡ª y que funcionan peor. Muy sensibles significa tan tangibles como irritantes e insidiosos. Veamos tres:
Uno es el poder adquisitivo de muchos sectores: el aumento (escaso) de sueldos y (amplio) de salario social (ingreso m¨ªnimo, pensiones...) en 2022 fue muy erosionado por una inflaci¨®n de caballo. Y el peso de las remuneraciones ha bajado en el producto final (casi diez puntos), a costa del aumento de excedentes empresariales.
Otro factor es la parte alimentaria de la inflaci¨®n: aunque baj¨® del 16,6% en febrero al 12% en mayo, sigue demasiado alta.
Y tres, la vivienda. Las hipotecas se desplomaron un 13% al multiplicarse sus tipos por tres o por cuatro... mientras los rendimientos de la banca cotizada en el primer trimestre aumentaban un 14%. La comparaci¨®n con otros tambi¨¦n hiere.
As¨ª que a los magn¨ªficos datos macroecon¨®micos no los siguen ciertas percepciones... razonables. Al ¨¦xito econ¨®mico le cuesta cancelar el malestar social.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.