Fernando Carrillo: ¡°Este nombramiento refuerza la apuesta por Am¨¦rica¡±

Fernando Carrillo Fl¨®rez (Bogot¨¢, 1963) acaba de ser nombrado vicepresidente primero de PRISA para reforzar el papel institucional del grupo en Am¨¦rica. Su carrera profesional ha estado vinculada a temas p¨²blicos y asuntos de pol¨ªtica internacional. Es abogado y economista y tiene dos m¨¢sters por la Universidad de Harvard. Fue ministro de Justicia en Colombia. ¡°Me toc¨® ser ministro muy joven¡±, dice. Despu¨¦s desarroll¨® su carrera profesional durante 16 a?os en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), donde estuvo en Washington, Par¨ªs y Brasilia. Volvi¨® a ser ministro en su pa¨ªs, esta vez de Interior. Fue embajador de Colombia en Espa?a y Procurador General de la Naci¨®n, uno de los m¨¢s altos cargos del Estado.

Pregunta. Acaba de ser nombrado vicepresidente primero del grupo PRISA, en una nueva arquitectura org¨¢nica con dos vicepresidencias. ?C¨®mo se explica esa nueva estructura?

Respuesta. Es una apuesta por una regi¨®n que no solo es el futuro del grupo, sino que ya es una realidad. Indiscutiblemente, esa es la filosof¨ªa detr¨¢s de este nombramiento. Creo que hay dos factores en esa decisi¨®n: por un lado, el elemento financiero, que es trascendental y que requiere mucha, mucha estabilidad. Y, por otro, una apuesta de futuro que es Am¨¦rica Latina. Siempre cito una frase de Garc¨ªa Lorca: ¡°Un espa?ol que no conoce Am¨¦rica Latina no sabe lo que es Espa?a¡±. Ese puente entre dos realidades que son complementarias, rec¨ªprocas, que se retroalimentan, es esencial para el grupo.

P. ?Qu¨¦ va a aportar usted como vicepresidente?

R. Es un rol institucional. Las relaciones institucionales, que tienen que ver con los grandes temas de las reformas, con construir puentes con los gobiernos, con el sector privado, y con los ciudadanos. Creo que el sector privado juega un papel fundamental. El sector privado tiene una responsabilidad central de participar en crear los escenarios del desarrollo y de afrontar todos los desaf¨ªos de car¨¢cter social. Ah¨ª vamos a jugar un rol que va a ser muy importante.

P. Durante a?os los directivos de esta empresa dec¨ªan que Am¨¦rica era una oportunidad, que era el futuro. ?Se ha convertido ya en el presente del grupo? ?Qu¨¦ planes tiene la compa?¨ªa para la regi¨®n y c¨®mo est¨¢ representada PRISA ahora en Am¨¦rica?

R. Tenemos un equipo robusto en Am¨¦rica que tiene claro que la regi¨®n ya no es el futuro, sino el presente. Y todos los indicadores de desempe?o nos lo demuestran. Se han multiplicado las suscripciones, las audiencias digitales, los ingresos. El 80% del Ebitda (beneficio bruto de explotaci¨®n) del grupo procede de Am¨¦rica. Creo que hay un gran equipo ya conformado en Am¨¦rica. Hay un equipo en M¨¦xico que viene trabajando, particularmente con EL PA?S y las estaciones de radio. Por ejemplo, las emisoras en M¨¦xico tienen una gran preeminencia, est¨¢n pr¨¢cticamente en segundo lugar en audiencia. En PRISA Media Colombia estamos los primeros de todas las emisoras habladas y musicales. Desde el 8 de mayo pasado, [en EL PA?S] ha empezado a funcionar una estrategia con las portadas de Colombia, M¨¦xico, Chile y Argentina, lo que ha implicado una multiplicaci¨®n de las audiencias digitales, de los suscriptores, del inter¨¦s de la gente en el peri¨®dico. EL PA?S est¨¢ jugando un rol muy protagonista al entrar en una realidad tan compleja como la de Estados Unidos, en una naci¨®n con 64 millones de hispanoparlantes. La apuesta es clar¨ªsima.

P. ?En qu¨¦ momento est¨¢n los planes de futuro de PRISA en Am¨¦rica y cu¨¢l es el principal desaf¨ªo del grupo en la regi¨®n?

R. Am¨¦rica Latina vive un gran momento de reformas. En ese contexto, hay que elevar la calidad del debate p¨²blico, que es lo que ha hecho el grupo a trav¨¦s de EL PA?S y a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n. El grupo tiene la oportunidad de posicionarse como el espacio donde se dan los grandes debates de la regi¨®n, para generar di¨¢logos que propicien acuerdos con grandes consensos. El gran desaf¨ªo es demostrar que la frivolidad y la superficialidad est¨¢n condenadas a la irrelevancia en el manejo de los medios de comunicaci¨®n. Creo que las noticias falsas no son noticias: son simplemente mentiras. El periodismo de calidad y la gesti¨®n empresarial de los medios implican una conexi¨®n con la ciudadan¨ªa, mucho rigor, mucha profesionalidad y mucha seriedad en la diferenciaci¨®n entre los hechos y opiniones. EL PA?S se ha ganado un gran reconocimiento en Am¨¦rica Latina y en Espa?a, por sus valores ¨¦ticos y profesionales. Y eso marca el camino a seguir.

La digitalizaci¨®n tiene que ser el primero de los caminos a afrontar, y eso se hace indiscutiblemente con buen periodismo y periodismo de calidad, con independencia. Y eso implica regresar a la edad de oro de un periodismo donde la verificaci¨®n, la seriedad y la profundidad est¨¦n en el centro en lugar de la inmediatez, que es el mal. Ese es el tal vez el c¨¢ncer de la profesi¨®n en este momento: el tener primero la noticia y olvidarse de la necesidad de verificarla, de profundizarla, de analizarla, de criticar el hecho y, si es necesario, buscar el periodismo de opini¨®n.

En ese sentido, a m¨ª me parece que la ¨¦tica es rentable. Eso se dijo de la sostenibilidad, que al comienzo se ve¨ªa como una gran carga para las empresas. Creo hoy en d¨ªa todo el mundo se ha convencido de que la sostenibilidad es una condici¨®n necesaria y genera rentabilidad porque cambia los criterios de la sociedad. Y creo que eso va a pasar con el periodismo: cuanto m¨¢s profesional lo sea, m¨¢s posibilidades de tener ¨¦xito econ¨®mico y rendimiento ¨¦tico.

P. Santillana es una divisi¨®n fundamental para el grupo. Aporta la mayor parte de los recursos y es l¨ªder en todos los pa¨ªses donde opera. ?Qu¨¦ desempe?o ha tenido Santillana tras la profunda reorganizaci¨®n del a?o pasado, cuando se separaron el negocio privado del p¨²blico?

R. Tenemos el gran desaf¨ªo de dar ese paso para trabajar con el sector p¨²blico. Hay varios pa¨ªses de la regi¨®n donde ya estamos avanzando. Tenemos unos equipos muy s¨®lidos y profesionales. La mayor¨ªa de los clientes ahora son del sector privado. Pero tenemos que trabajar con las autoridades educativas. Tenemos que hablar de tecnolog¨ªa educativa, abordar la salida de la brecha digital. Esto viene acompa?ado de una gran debilidad de la infraestructura tecnol¨®gica p¨²blica en estos pa¨ªses. Hay una infraestructura, pero est¨¢ en manos del sector privado y hay que comenzar a hacer inversiones en lo p¨²blico, porque Am¨¦rica Latina va muy atr¨¢s en la comparativa internacional.

P. EL PA?S ha logrado recientemente superar la barrera de los 300.000 suscriptores digitales. Una buena parte proceden de Am¨¦rica. ?Qu¨¦ planes tiene el grupo para impulsar las suscripciones en la regi¨®n?

R. Es cierto, Am¨¦rica Latina tiene tambi¨¦n una gran contribuci¨®n en el Ebitda, de cerca del 80% del total. Dentro de los 300.000 suscriptores hay una parte importante de Am¨¦rica Latina, y esperamos llegar pronto a los 50.000 suscriptores en la regi¨®n con f¨®rmulas completamente nuevas en donde entra la radio. Creo que tenemos que aprovechar las sinergias. En algunos pa¨ªses de la regi¨®n hab¨ªa poco di¨¢logo e interacci¨®n entre nuestras emisoras y nuestras redacciones. Eso, por fortuna, ya pas¨® a la historia. Es una estrategia que funciona much¨ªsimo.

P. C¨®mo evoluciona la estrategia para implantar los muros de pago en Am¨¦rica Latina.

R. El muro de pago hay que ir consolid¨¢ndolo dentro de nuestros pa¨ªses, y viendo c¨®mo evoluciona. El mes de julio va a ser fundamental para aumentar todas las campa?as de marca y de suscripciones. Siempre con esa bandera de demostrar que ya lo hemos hecho en dos en los cinco pa¨ªses en los que estamos, incluyendo Estados Unidos, con la edici¨®n en ingl¨¦s con la altura y el profesionalismo con el que se maneja los contenidos en el grupo.

P. Precisamente sobre la edici¨®n en ingl¨¦s, que se lanz¨® hace unos meses, ?c¨®mo se logra competir en un mercado tan complejo como Estados Unidos?

R. Ah¨ª juega de nuevo la innovaci¨®n en materia de contenidos. La gran preocupaci¨®n es que la tercera generaci¨®n de inmigrantes ya pr¨¢cticamente ni habla ni lee en espa?ol. Pero nos une la cultura, fen¨®menos como la m¨²sica o el deporte. Hay que saber poner el o¨ªdo en las preocupaciones y en los deseos de esa nueva generaci¨®n.

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