La excepci¨®n ib¨¦rica, un mecanismo de ahorro energ¨¦tico en el punto de mira
El tope sobre el precio al que venden las centrales f¨®siles propici¨® un ahorro sustancial para los consumidores adheridos del mercado regulado. Lleva sin aplicarse desde finales de febrero por la fuerte bajada del gas, pero el PP sugiere su eliminaci¨®n
Ser una isla energ¨¦tica tiene muchos inconvenientes ¡ªno te beneficias de los precios bajos del resto cuando los tuyos son altos y no puedes vender tus excedentes en las horas de gran generaci¨®n renovable¡ª y pocas, muy pocas ventajas. Espa?a y Portugal, sin embargo, han logrado sacar punta a este ¨²ltimo apartado, el de los pros: la excepci¨®n ib¨¦rica, un mecanismo in¨¦dito y consensuado con Bruselas, permiti¨® a ambos pa¨ªses desligar su mercado el¨¦ctrico del gas en los meses m¨¢s crudos de la crisis energ¨¦tica. Ahora, el PP sugiere su final en el programa con el que se presenta a las elecciones generales del pr¨®ximo d¨ªa 23.
En retrospectiva, el resultado de la medida es n¨ªtido: en la segunda mitad de 2022 y en los primeros compases de 2023, en los que medio pa¨ªs consultaba el precio de la luz como quien en 2012 consultaba la prima de riesgo, la Pen¨ªnsula logr¨® unos precios sustancialmente m¨¢s bajos que en los principales pa¨ªses europeos, como Francia, Italia o Alemania. De febrero para ac¨¢, su impacto ha sido nulo: desde entonces, el esquema ¡ªque limita el precio al que generan las centrales de gas, a las que compensan a posteriori, para evitar que contaminen a todo el mercado el¨¦ctrico¡ª permanece inactivo porque el precio del gas natural est¨¢ por debajo del umbral pactado con la UE.
El mecanismo ha sacudido los sacrosantos pilares del marginalismo (a saber: el precio lo fija, cada hora, la ¨²ltima tecnolog¨ªa que entra en el mercado) y ha llevado a varios pa¨ªses del club comunitario a plantearse una medida similar. Los resultados, a la vista de todos, tambi¨¦n han logrado cambiar el punto de vista de muchos socios europeos ¡ªPedro S¨¢nchez lleg¨® a abandonar una cumbre europea ante la f¨¦rrea negativa de Alemania y Pa¨ªses Bajos¡ª y del propio Ejecutivo de Ursula Von der Leyen, que ha pasado de una fuerte reticencia inicial a dar el s¨ª a la pr¨®rroga de la excepci¨®n hasta finales de este a?o, por lo que pueda pasar en el siempre vol¨¢til mercado gasista.
A partir de entonces, salvo que las cosas se tuerzan mucho, la excepci¨®n ib¨¦rica ser¨¢ historia. A¨²n m¨¢s si el PP logra formar Gobierno tras los comicios de dentro de dos domingos: en su programa, el principal partido de la oposici¨®n apuesta por ¡°evitar las medidas excepcionales de intervenci¨®n del mercado mayorista el¨¦ctrico y eliminar las existentes¡±. Aunque el partido de Alberto N¨²?ez Feij¨®o no habla expl¨ªcitamente de la excepci¨®n ib¨¦rica, esta es la mayor de las intervenciones, junto con el recorte hasta 67 euros por megavatio hora (MWh) del beneficio de las el¨¦ctricas en los nuevos contratos, acordado en marzo del a?o pasado.
Tras unos primeros d¨ªas sorprendentemente negativos, en los que la compensaci¨®n a pagar por los consumidores a los due?os de las centrales de gas y carb¨®n fueron incluso mayores que el descuento obtenido, las tornas cambiaron pronto: su primer mes en activo, la excepci¨®n ib¨¦rica ya hab¨ªa permitido un ahorro sustancial a los hogares y las empresas acogidos al mercado regulado, el que m¨¢s hab¨ªa sufrido el zarpazo de los precios. Con el paso del tiempo, la ventaja se fue haciendo m¨¢s visible: entre mediados de junio y febrero, el periodo en el que la herramienta estuvo activa ante los altos precios del gas, el ahorro para los consumidores espa?oles rond¨® los 5.000 millones de euros, seg¨²n las cifras oficiales. Solo hasta octubre hab¨ªan sido 2.900 millones.
Rafael Salas, profesor del departamento de An¨¢lisis Econ¨®mico y Econom¨ªa Cuantitativa de la Universidad Complutense de Madrid y uno de los economistas que m¨¢s de cerca ha seguido la excepci¨®n ib¨¦rica, calcula para 2022 un descenso del 17% en el precio de la electricidad para los clientes del mercado regulado (tambi¨¦n conocido como PVPC). ¡°Es una medida extrema para momentos de precios del gas extremos, y en ese periodo fue muy efectiva¡±, valora el acad¨¦mico, que defiende su reciente prolongaci¨®n hasta finales de a?o. ¡°Sigue habiendo mucha incertidumbre sobre qu¨¦ puede pasar con el precio del gas este pr¨®ximo invierno: aunque la probabilidad de que se dispare es baja, me quedo mucho m¨¢s tranquilo contando con este seguro¡±.
Vista su efectividad para rebajar el precio de la luz, las cr¨ªticas pronto se situaron en otro ¨¢mbito: el aumento de las exportaciones de electricidad a Francia y la subvenci¨®n que el mecanismo supon¨ªa para los consumidores del pa¨ªs vecino (y, tambi¨¦n, para los portugueses). La oposici¨®n hizo bandera de ello en Espa?a. Tambi¨¦n algunas grandes el¨¦ctricas, a las que no les gust¨® nada una medida que, en ¨²ltima instancia, drena parte de sus beneficios en favor de los consumidores.
¡°Es cierto que las exportaciones a Francia han crecido mucho, pero ni mucho menos todo el aumento se debe a la excepci¨®n ib¨¦rica: es una falacia¡±, apunta Salas. Los cables que conectan Espa?a con Francia a trav¨¦s de los Pirineos, dice, ya iban cargados en sentido salida desde antes de junio, cuando la excepci¨®n ib¨¦rica entr¨® en vigor. ¡°Y en los ¨²ltimos meses, ya con el mecanismo inactivo, las exportaciones han sido incluso mayores¡±. El abrupto aumento de las exportaciones a Francia responde, sobre todo, al par¨®n t¨¦cnico de una parte importante del vast¨ªsimo parque nuclear de ese pa¨ªs y al crecimiento exponencial en la potencia renovable instalada en Espa?a (sobre todo, fotovoltaica), que deprime los precios en las horas centrales del d¨ªa y agranda la brecha de precios entre ambos pa¨ªses.
Sobre el segundo punto, el de las subvenciones, el mecanismo implica una subvenci¨®n indirecta a los consumidores franceses desde el mismo momento en el que la Comisi¨®n Europea opt¨® por no diferenciar entre el precio interior en la Pen¨ªnsula y el que rige para las exportaciones al resto del continente. ¡°Sin embargo, las ventajas de la excepci¨®n han sido tan grandes, que ha merecido la pena. Por mucho¡±, sentencia el profesor de la Universidad Complutense de Madrid.
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