Madrid aporta el triple de recursos que Catalu?a a la financiaci¨®n auton¨®mica, seg¨²n Fedea

El sistema de financiaci¨®n auton¨®mica, que ha irrumpido con fuerza en el debate pol¨ªtico, tiene como objetivo que todas las comunidades garanticen a sus ciudadanos los servicios p¨²blicos en las mismas condiciones. Para lograrlo, contempla una serie de trasferencias tanto verticales, desde el Estado a las regiones, como entre los mismos territorios, donde los m¨¢s ricos aportan m¨¢s de lo que reciben y viceversa. Madrid, Catalu?a y Baleares, con las mayores rentas per c¨¢pita, son las ¨²nicas aportadoras netas, con unos 9.000 millones en total, pero con grandes diferencias entre ellas. Mientras que la regi¨®n de la capital contribuye con m¨¢s de 6.300 millones al sistema, Catalu?a lo hace con 2.168 y Baleares con 334.

As¨ª lo resume la nota La liquidaci¨®n de 2021 del sistema de financiaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas de r¨¦gimen com¨²n, publicada por el centro de estudios Fedea este lunes y elaborada por su director, ?ngel de la Fuente. El informe analiza la liquidaci¨®n del sistema correspondiente a 2021, que el Ministerio de Hacienda acaba de difundir y a partir del cual el economista calcula la financiaci¨®n definitiva de ese a?o, adem¨¢s de los llamados indicadores de financiaci¨®n aumentada, que incluyen las transferencias extraordinarias dise?adas para hacer frente a la pandemia.

De la Fuente calcula que las comunidades receptoras recibieron recursos por encima de sus ingresos tributarios por un importe 20.000 millones de euros. Algo m¨¢s de la mitad de esta cifra, unos 11.000 millones, procede del Estado, y el resto ¡ª9.000 millones¡ª de las autonom¨ªas con mayor renta per c¨¢pita: Madrid, Catalu?a y Baleares. Estas aportaciones suponen en torno a un 8% de los ingresos tributarios auton¨®micos en Baleares, un 9% en Catalu?a y un 24% en Madrid. En el otro lado est¨¢n todos los dem¨¢s territorios beneficiarios netos: los importes recibidos por esta v¨ªa suponen m¨¢s del 20% de los ingresos tributarios en diez casos ¡ªsolo Valencia y Arag¨®n se quedan por debajo de este porcentaje¡ª. En Extremadura superan el 40% y son m¨¢s de la mitad en Canarias.

Eso ocurre porque el sistema est¨¢ basado en la nivelaci¨®n: uno de los papeles fundamentales del Estado es redistribuir recursos entre Administraciones y territorios para complementar los ingresos de las zonas menos din¨¢micas, de forma que se garantice la prestaci¨®n de unos servicios p¨²blicos b¨¢sicos en condiciones ¡ªeducaci¨®n, sanidad y servicios sociales, de gesti¨®n auton¨®mica¡ª. Quien paga los impuestos son los ciudadanos: a m¨¢s renta, consumo y riqueza, m¨¢s se tributa.

En total, la financiaci¨®n definitiva de las comunidades creci¨® en un 16% (18.000 millones) en 2021, sobre todo gracias a la mejora de los ingresos tributarios tras la ca¨ªda provocada por la pandemia durante 2020. El documento avanza que los recursos del sistema sujetos a liquidaci¨®n retrocedieron un 0,87% en 2022, pero este a?o se incrementaron en hasta un 19,3%.

Con respecto al a?o de la pandemia, hay territorios que han mejorado su posici¨®n relativa en cuanto a financiaci¨®n por habitante ajustado. En este grupo destacan Baleares y Extremadura. En el lado opuesto est¨¢n las ca¨ªdas de Murcia (-1,5), Valencia (-1,0) y Castilla la Mancha (-1,0). Estas tres comunidades siempre est¨¢n a la cola de la distribuci¨®n, pero con este retroceso se alejan a¨²n m¨¢s de la media.

Murcia y Comunidad Valenciana, las peor financiadas

El sistema de financiaci¨®n auton¨®mica descansa sobre un alambicado esquema de fondos que se nutre del lo que las comunidades ingresan por los tributos compartidos con el Estado (IRPF, IVA e impuestos especiales), los impuestos que tienen cedidos (como sucesiones y donaciones o transmisiones patrimoniales) y aportaciones del Estado. El fondo m¨¢s relevante es el de Garant¨ªa, que reparte los recursos en funci¨®n de las necesidades de gasto de cada territorio. Estas se miden a su vez a trav¨¦s de la poblaci¨®n ajustada: la poblaci¨®n real ponderada a trav¨¦s de variables geogr¨¢ficas y demogr¨¢ficas, como la dispersi¨®n territorial o la edad de los residentes.

Despu¨¦s entran en juego otros fondos, que muchos acad¨¦micos consideran distorsionadores por los ajustes que suponen. Son el Fondo de Suficiencia ¡ªque asegura que ning¨²n territorio reciba menos de lo que habr¨ªa resultado de aplicar el modelo anterior¡ª y los de Convergencia (Cooperaci¨®n y Competitividad), que pretenden fomentar la convergencia entre territorios en t¨¦rminos de renta per c¨¢pita y de financiaci¨®n por habitante ajustado.

La foto final deja a cuatro comunidades con recursos por debajo de la media: Murcia, Comunidad Valenciana, Andaluc¨ªa y Castilla-La Mancha. Si la media de financiaci¨®n relativa por habitante ajustado es 100, los ¨ªndices de estas autonom¨ªas son, respectivamente, 90,8, 92,1, 94,3 y 95, seg¨²n los c¨¢lculos de Fedea. Por ello, estos territorios piden una soluci¨®n a aquella parte de la deuda acumulada debida a la infrafinanciaci¨®n. Cantabria est¨¢ en el otro extremo de la lista, con un ¨ªndice del 115,3. Madrid (102,1) y Catalu?a (101,7) est¨¢n en la media.

En los ¨²ltimos d¨ªas, la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica ha saltado a la palestra porque el PSOE y Sumar necesitan el apoyo de los independentistas catalanes para reeditar la coalici¨®n de Gobierno. Ante las reclamaciones soberanistas dif¨ªcilmente asumibles, como la celebraci¨®n de un refer¨¦ndum o la ley de amnist¨ªa, el Ejecutivo en funciones ha puesto sobre la mesa la renovaci¨®n del modelo de financiaci¨®n ¡ªque lleva pendiente desde 2014 pendiente¡ª y a abordar en ese proceso el endeudamiento regional, un lastre pesado para Catalu?a. Es la comunidad con el pasivo m¨¢s grande en volumen, y de los 85.000 millones que debe m¨¢s del 80% est¨¢ en manos del Estado.

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