Espa?a lidera la sobrecualificaci¨®n en la UE: el 36% de los universitarios tiene un empleo inferior a su formaci¨®n

En Espa?a no es extra?o encontrarse abogados trabajando como teleoperadores, licenciados en psicolog¨ªa que son camareros o ingenieros que dan clases de matem¨¢ticas en un colegio. De hecho, esto ocurre en el mercado laboral espa?ol en mayor medida que en el resto de pa¨ªses europeos. As¨ª, el 36% de los titulados universitarios y de posgrado trabajan en puestos que requieren una cualificaci¨®n inferior. Se trata de una anomal¨ªa end¨¦mica del mercado de trabajo espa?ol ¡ªeste porcentaje apenas ha variado en los ¨²ltimos 30 a?os¡ª que sit¨²a a Espa?a a la cabeza de la sobrecualificaci¨®n laboral en la Uni¨®n Europea, seg¨²n demuestran los datos de la oficina de estad¨ªstica comunitaria (Eurostat) analizados en el ¨²ltimo Observatorio trimestral del mercado laboral que elaboran los expertos de Fedea y que han presentado este jueves.

Eurostat mide esta sobrecualificaci¨®n analizando la proporci¨®n de titulados universitarios ocupados que trabaja en puestos distintos a los de directores, t¨¦cnicos y profesionales cient¨ªficos e intelectuales (grupos 1 y 2 del Cat¨¢logo Nacional de Ocupaciones). Y, seg¨²n esto, los datos oficiales para Espa?a indican que el denominado ¡°ajuste ocupacional¡±, esto es, los trabajadores que cuentan como m¨ªnimo con una licenciatura universitaria y que s¨ª ocupan un puesto adecuado a su formaci¨®n, eran poco m¨¢s del 63% en 2022.

El grupo de ocupaciones que cuenta con m¨¢s trabajadores con una cualificaci¨®n m¨¢s ajustada a su formaci¨®n es el de graduados en formaci¨®n profesional superior, trabajando en ocupaciones intermedias como t¨¦cnicos, profesionales de apoyo; contables; administrativos y otro personal de oficina; trabajadores de la restauraci¨®n, servicios personales, seguridad y comerciales; as¨ª como trabajadores cualificados de la industria y la construcci¨®n (grupos 3, 4, 5 y 7). Estos colectivos tuvieron un ajuste ocupacional que roz¨® el 78%, con lo que casi ocho de cada diez estaba en un puesto adecuado para su formaci¨®n. Mientras que solo una cuarta parte de quienes tan solo cuentan con ense?anza secundaria superior (formaci¨®n profesional de segunda etapa y bachillerato) trabaja en ocupaciones que requieren menor cualificaci¨®n como los ocupados en el sector primario, operadores de instalaciones, maquinarias y montadores y ocupaciones elementales (grupos 6, 8 y 9).

El coordinador de este estudio y economista experto en mercados laborales, Florentino Felgueroso, ha explicado que este desajuste laboral del personal m¨¢s cualificado en Espa?a tuvo su pico m¨¢s alto en el inicio de la gran recesi¨®n que provoc¨® la crisis financiera de 2008, cuando la tasa de sobrecualificaci¨®n del colectivo super¨® el 40% y, desde entonces se ha mantenido m¨¢s o menos estable en el entorno del 35%, por lo que se trata de ¡°un problema estructural¡± del mercado espa?ol.

Entre hombres y mujeres cualificados la tasa de ajuste ocupacional es muy similar (62% y 61%, respectivamente). Si bien en el caso de las mujeres extranjeras cualificadas que trabajan en un puesto para el que se requiere titulaci¨®n universitaria bajan al 31%, la mitad que las nacionales. Esto significa que casi siete de cada diez ocupan puestos para los que se requiere una formaci¨®n inferior a la que tienen.

Fijos discontinuos forzosos

Por el contrario, otro de los problemas hist¨®ricamente estructurales del empleo en Espa?a era su elevada precariedad, medida generalmente por la tasa de temporalidad, que tambi¨¦n lideraban los asalariados espa?oles en Europa hasta 2022. Pero el a?o pasado, la reforma laboral, que introdujo fuertes restricciones para los contratos temporales, ha dado la vuelta a este indicador. As¨ª lo refleja tambi¨¦n este estudio, que destaca que la reforma laboral de 2021 ha permitido que la tasa de temporalidad se haya reducido siete puntos porcentuales, hasta el 17,3%. De esta forma, esta tasa ha convergido con la de los pa¨ªses de su entorno como Portugal, Italia o Francia.

Pese a esta reducci¨®n, Espa?a sigue ocupando el segundo lugar en el ranking de temporalidad, a cierta distancia de Pa¨ªses Bajos, donde la mitad de los ocupados son temporales. Seg¨²n ha explicado el tambi¨¦n investigador de Fedea, el holand¨¦s Marcel Jansen, este alto porcentaje de temporalidad en Holanda se debe a cambios t¨¦cnicos en su medici¨®n y a que en ese pa¨ªs la voluntariedad de este tipo de contratos es muy elevada, a diferencia de lo que ocurre en Espa?a.

Precisamente, los autores de este estudio han remarcado nuevamente que el mero descenso de la temporalidad no es sin¨®nimo de recorte de la precariedad laboral. Ya que el impacto de la reforma en otros indicadores como la rotaci¨®n y, m¨¢s concretamente, en el flujo de trabajadores del empleo al paro cada trimestre, no se est¨¢ produciendo de momento. De hecho, la tasa de salida de la ocupaci¨®n al desempleo en Espa?a afecta aproximadamente al 3% de los ocupados en el trimestre y duplica la media de la UE-27; adem¨¢s, sigue siendo pr¨¢cticamente la misma que antes de la pandemia y triplica la de Holanda, con mucha m¨¢s temporalidad.

El hecho de que la tasa de trabajadores que sale al paro cada trimestre apenas var¨ªe se debe, seg¨²n han explicado los autores de este informe, a un efecto composici¨®n consistente en que la fuerte creaci¨®n de nuevos empleos indefinidos, que sale con menos frecuencia al desempleo, compensa el tambi¨¦n aumento de las salidas al paro o a la inactividad de temporales y fijos discontinuos.

Al hecho de que no est¨¦ mejorando a¨²n esta tasa de salidas del empleo al desempleo, que reflejar¨ªa tambi¨¦n un recorte de la precariedad, Jansen ha a?adido otro indicador que, si se midiera, podr¨ªa dar una idea de si se est¨¢ produciendo una clara mejora de la calidad en el empleo o no. Se tratar¨ªa de medir, adem¨¢s del empleo a tiempo parcial involuntario, algo que ya calcula la Encuesta de Poblaci¨®n Activa, saber cu¨¢ntos fijos discontinuos son tambi¨¦n forzosos, y tienen este contrato porque no han encontrado otro.

Por este motivo, Felgueroso ha insistido en que la palabra ¡°intermitencia¡± (en el empleo) es actualmente clave para saber si la reforma laboral est¨¢ mejorando la calidad de la ocupaci¨®n y tambi¨¦n para establecer una m¨¢s certera relaci¨®n entre el PIB, el empleo y el n¨²mero de horas trabajadas.

Desaceleraci¨®n laboral

Respecto a este ¨²ltimo punto, el jefe de An¨¢lisis Econ¨®mico del BBVA Research y tambi¨¦n coordinador de este estudio, Rafael Dom¨¦nech, ha informado de que la mayor¨ªa de los indicadores de empleo y de horas trabajadas han superado ya los registros prepandemia entre abril y junio, con la excepci¨®n del n¨²mero de puestos de trabajo. Adem¨¢s, ha recordado que las previsiones que baraja su departamento de estudios es que el empleo crezca tres d¨¦cimas en el tercer trimestre y mantenga un avance del 1,2% anual. Es m¨¢s, estima que ¡°este crecimiento se mantendr¨¢ similar en los pr¨®ximos trimestres y la tasa de paro seguir¨¢ estable, lo que dibuja un mercado laboral menos din¨¢mico pero a¨²n fuerte¡±.

Junto a esta evoluci¨®n previsible de la ocupaci¨®n, Dom¨¦nech ha destacado que el comportamiento de los salarios refleja la situaci¨®n de tensiones que se est¨¢n produciendo en el mercado de trabajo entre la existencia de vacantes y desempleo, lo que est¨¢ llevando a avances del 7,6% de la remuneraci¨®n por hora trabajada y del 5,1% de la remuneraci¨®n por asalariado. Si bien, este economista asegura que este avance de los salarios, ¡°no ha sido motivo de preocupaci¨®n¡± porque se debe a la tensi¨®n citada (ante las vacantes algunos sectores elevan los salarios para atraer a los trabajadores que no encuentra) y no est¨¢ generando, de momento, efectos de segunda ronda en la inflaci¨®n, tal y como tambi¨¦n ha apuntado esta semana el Banco de Espa?a. Si bien, Dom¨¦nech ha asegurado que desde BBVA Research est¨¢n ¡°monitorizando¡± que estos efectos de segunda ronda no se produzcan y ha insistido en que no lo prev¨¦n en el corto plazo.

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