Los Veintisiete aprueban una versi¨®n rebajada de la ley que exigir¨¢ a grandes empresas un mayor respeto de derechos humanos y medioambientales

Parece que solo los Estados van a cantar victoria esta vez. Tras duras negociaciones de ¨²ltima hora ¡ªsobre un texto que ya estaba acordado¡ª los Veintisiete han dado su visto bueno este viernes a la ley europea que busca obligar a las grandes empresas a velar mejor por el respeto de los derechos humanos y el medio ambiente a lo largo de sus cadenas de suministro. Pero la normativa, que ya era criticada como insuficiente para proteger sobre todo a menores de explotaci¨®n infantil, ha salido m¨¢s rebajada a¨²n para conseguir los votos suficientes que le permitir¨¢n ser ratificada antes de que acabe la actual legislatura europea.

Una de las mayores cr¨ªticas sobre el texto ahora negociado de la Directiva de Diligencia Debida sobre Sostenibilidad Corporativa (CSDDD, por sus siglas en ingl¨¦s) es que afectar¨¢ a un n¨²mero de empresas much¨ªsimo menor de lo inicialmente previsto y, tambi¨¦n, de lo que se acord¨® con la Euroc¨¢mara en diciembre pasado: seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, el nuevo texto, propuesto por la presidencia de turno belga del Consejo de la UE, se aplicar¨¢ ahora solo a empresas europeas con m¨¢s de mil empleados y un volumen de negocios de 450 millones de euros, cuando originalmente se iba a aplicar a compa?¨ªas que tuvieran m¨¢s de 500 empleados y un volumen de negocios de 150 millones. Se elimina adem¨¢s la menci¨®n a que se aplicar¨¢ la ley a empresas m¨¢s peque?as que operan en sectores especialmente sensibles a violaciones medioambientales o en materia de explotaci¨®n infantil como son el textil, la miner¨ªa, agricultura (incluida la pesca y la explotaci¨®n forestal) o la construcci¨®n, un extremo que hab¨ªa sido especialmente celebrado por organizaciones defensoras de los derechos humanos. Algo que se intenta paliar con la creaci¨®n de una cl¨¢usula de revisi¨®n, acotan las fuentes.

Seg¨²n c¨¢lculos de WWF y de la Coalici¨®n Europea por Justicia Corporativa, los nuevos l¨ªmites excluyen hasta el 70% de las m¨¢s de 16.000 empresas a las que iba originalmente destinada la medida, que tambi¨¦n ha quedado rebajada en otras obligaciones medioambientales.

Adem¨¢s, la directiva, que estuvo bloqueada varias semanas por reticencias de Alemania, a las que se unieron Francia, Italia y otros pa¨ªses, ser¨¢ aplicada en una primera fase a solo aquellas empresas de m¨¢s de 5.000 empleados, retrasando m¨¢s a¨²n as¨ª su impacto.

Los ¡°regateos¡± de estos pa¨ªses costar¨¢n un ¡°alto precio¡±, lamenta la asociaci¨®n legal Client Earth: ¡°El lobby corporativo y los juegos pol¨ªticos han asesinado esta oportunidad para revolucionar la forma de hacer negocios en la UE y m¨¢s all¨¢ al excluir a la mayor parte de las empresas de su ¨¢mbito¡±, advierte.

Pese a su fuerte rebaja, la ponente de la Euroc¨¢mara, Lara Wolters, ha saludado el visto bueno del Consejo para un proyecto ¡°demasiado importante como para que fracasara¡±. Seg¨²n la socialdem¨®crata holandesa, a pesar de todo, la normativa ¡°tendr¨¢ un gran impacto en todo el mundo al impedir que las empresas miren hacia otro lado ante una miseria y destrucci¨®n muy reales¡±.

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