Qu¨¦ es la senda fiscal que Hacienda se abre a negociar tras pedirlo Junts

Espa?a tiene que cumplir cada a?o con un objetivo de d¨¦ficit p¨²blico que se reparte entre los cuatro niveles de la Administraci¨®n: el Estado, la Seguridad Social, las comunidades aut¨®nomas y las entidades locales. En otras palabras, cada uno de estos subsectores tiene asignado un nivel de desequilibrio m¨¢ximo que, al sumarse, da lugar a la referencia prevista para todo el pa¨ªs. La distribuci¨®n de esas metas para los a?os 2025 y 2026, propuesta por el Ministerio de Hacienda y validada por el Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera (CPFF) en julio, ha hecho saltar de nuevo los planes del Gobierno, posponiendo una vez m¨¢s la presentaci¨®n del proyecto de Presupuestos Generales del Estado y obligando al Ejecutivo a replantear con sus socios habituales los n¨²meros que hab¨ªa dise?ado. ¡°No tenemos que tener ning¨²n tipo de prisa si llegamos a un acuerdo¡±, dijo ayer a ¨²ltima hora de la tarde en el Senado la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, tras confirmar que han reabierto el di¨¢logo con los grupos que sostienen al Gobierno para intentar cerrar un nuevo reparto.

La senda fiscal en la que se incluye la distribuci¨®n del d¨¦ficit ya fue rechazada por primera vez a finales de julio por PP, Vox y Junts en el Congreso. Ahora, ante las perspectivas de sufrir un nuevo y duro rev¨¦s en la votaci¨®n que hasta ayer estaba prevista para este jueves, el Gobierno ha decidido aparcar la propuesta y se abre a negociarla con los catalanes para dar algo m¨¢s de capacidad fiscal a la Generalitat y el resto de autonom¨ªas, como piden respectivamente las formaciones lideradas por Carles Puigdemont y Alberto N¨²?ez Feij¨®o.

La retirada de la tramitaci¨®n, afirmaban ayer fuentes de Hacienda, ¡°es un ejercicio de responsabilidad de un Gobierno que mira por el inter¨¦s general para alcanzar un acuerdo beneficioso para la defensa del Estado de bienestar¡±. Enfrente, a?aden, est¨¢n ¡°quienes solo se mueven por c¨¢lculos electoralistas y partidistas, aunque eso suponga perjudicar los servicios p¨²blicos de todos los ciudadanos¡±.

La senda de estabilidad recoge los objetivos vinculantes de d¨¦ficit p¨²blico, deuda p¨²blica y regla de gasto para los siguientes tres a?os, en este caso para el periodo 2025-2027. Estas metas tienen que estar en l¨ªnea con lo acordado con la Comisi¨®n Europea y condicionan los presupuestos de cada administraci¨®n. Es decir, son necesarias para que pueda haber unas nuevas cuentas p¨²blicas. La senda que hasta ayer propon¨ªa el Gobierno marca que los n¨²meros rojos del conjunto del sector p¨²blico no puedan superar el 2,5% del PIB el pr¨®ximo ejercicio, el 2,1% en 2026 y el 1,8% en 2027. En este reparto ¡ªsin contar con la Administraci¨®n central y la Seguridad Social¡ª, las comunidades tendr¨ªan que registrar un d¨¦ficit del 0,1% en cada uno de estos tres a?os, mientras que las entidades locales deber¨ªan lograr el equilibrio presupuestario o d¨¦ficit cero.

Es la distribuci¨®n propuesta por Hacienda la que ha suscitado las cr¨ªticas del PP y Junts, quienes sostienen que las autonom¨ªas disponen de poca capacidad fiscal frente a una Administraci¨®n Central que se quedar¨ªa con la mayor parte del margen disponible en esta correcci¨®n: un d¨¦ficit del 2,2%, del 1,8% y del 1,5% en los tres a?os del periodo, seg¨²n la senda planteada por Hacienda. El escenario que ahora se abre implicar¨¢ la puesta en marcha de una negociaci¨®n ¡ªprevisiblemente con el partido independentista¡ª dirigida a que las comunidades rasquen unas pocas d¨¦cimas. Junts ha puesto sobre la mesa la posibilidad de concretar un d¨¦ficit auton¨®mico del 0,8%, ocho veces m¨¢s del ahora planteado, si bien desde el Gobierno conf¨ªan en que la propuesta no sea de m¨¢ximos dado el poco margen del que se dispone, seg¨²n fuentes del Ejecutivo.

El objetivo de aparcar la votaci¨®n de la senda de gasto ¡°es dar m¨¢s tiempo a la negociaci¨®n ofreciendo una nueva oportunidad al di¨¢logo¡±, se limitaron a decir ayer desde Hacienda. ¡°El Gobierno quiere agotar todas las posibilidades para alcanzar un pacto que ser¨ªa beneficioso para todas las comunidades aut¨®nomas y los ayuntamientos¡±, a?adieron mientras criticaban la postura de los populares. A la vicepresidenta Montero le ha sentado especialmente mal que el PP se niegue a dejar avanzar un planteamiento que obtuvo luz verde en el CPFF, donde est¨¢n representadas tanto el ministerio como el grupo de las comunidades aut¨®nomas, cada uno con un 50% de peso en la votaci¨®n.

En las ¨²ltimas semanas, el Ejecutivo ha puesto toda la presi¨®n sobre la formaci¨®n que lidera Alberto N¨²?ez Feij¨®o y ha expuesto a los cuatro vientos el sinsentido, dicen, que supone que el PP vote en contra de unos objetivos de d¨¦ficit que benefician a las comunidades, gobernadas en su mayor¨ªa por ellos mismos.

Desde Hacienda argumentan que si el Congreso no aprueba una nueva senda fiscal, inmediatamente entrar¨ªa a funcionar la actual, que es m¨¢s estricta con las autonom¨ªas y los ayuntamientos. En la senda vigente, las comunidades tendr¨ªan que anotar en 2025 y 2026 un super¨¢vit del 0,1% cada a?o, mientras que las entidades locales tendr¨ªan que registrar un ahorro del 0,1% y el 0,2%, respectivamente. En cifras, seg¨²n c¨¢lculos del Gobierno, perder el margen que se ofrece en la senda propuesta har¨ªa que estos dos subsectores perdiesen un margen conjunto de casi 12.000 millones de euros. ¡°Es decir, la senda del Gobierno ofrece a las comunidades aut¨®nomas y los ayuntamientos una mayor capacidad de gasto. Sobre esa misma premisa seguiremos negociando para alcanzar un acuerdo¡±, apuntan desde Hacienda.